¿Aún me amas? [Segunda Temporada]

Cap 09 | ¿Mañana?

Narra Rubius

Íbamos de regreso al gran pueblo de Karmaland, y creo que por primera vez, en muchísimo tiempo, yo tenía un peso menos. Un peso menos que cargar en mis pesados hombros.

~ ¿Cuánto tiempo pasará para que vuelva ese peso? ~

Miré a mi costado, y encontré a Willy silbando animadamente una canción: paradise.

~ Se ve mucho más relajado que cuando iniciamos la misión ~

Y como si leyera mi mente, él me miró. Tal vez porqué sintió mi mirada, o simplemente también quería comprobar lo mismo que yo: que todo estuviera mejor luego de aquella charla.

Cuando me miró me regaló una genuina sonrisa, y aunque no estaba cien por cien seguro. Algo en mi me decía que así era. Algo me decía que ambos sonreíamos de verdad.

—¿Puedo preguntar algo? —su pregunta me saco de mis casillas por un momento. Aunque esto fue, gracias a que estaba demasiado concentrado en mis propios pensamientos.

~ Debo dejar de perderme tanto en mi mente, o volverán a pensar que estoy loco ~

—Ya la hiciste —conteste vacilante, y solté una carcajada cuando él rodó sus ojos con una mueca divertida— anda, ¿Qué es lo que quieres saber?

Escuché como suspiraba, aunque no comprendí si era por lo complicado de la pregunta misma, o por mi resiente broma: esperaba que fuera por lo último.

—Luzu una vez me dijo que soñabas a menudo con Vegetta, y que esos sueños eran muy reales ¿Es eso cierto? —preguntó Willy desviando la mirada pensativo, como si tratara de pensar en algo en específico.

Al escucharlo yo agradecí mentalmente que estuviera viendo el camino y no a mí, pues mi cara enrojeció al instante de recordar la mayoría de mis sueños.

Y como no, si tremendo sueño el que tuve la última vez.

~ Tranquilo Rubius, piensa en la biblia ~

—S-Si, ¿Porqué la pregunta? —me atreví a responder luego de tranquilizarme un poco.

—Es que Luzu actúa muy raro luego de soñar con él —ahora el nervioso parecía ser otro.

~ ¿Cómo? ~

—¿Luzu también sueña constantemente con Vegetta? —pregunté muy sorprendido.

—Define constantemente —desvió nuevamente la mirada.

—¿T-Todos los días? —respondí, aunque sinceramente, la manera en la que lo hice pareciera más a una pregunta. Y esto sin contar que era un pequeño susurro.

~ Que vergüenza, dirá que soy un pervertido ~

—¡Ostia! ¿Sueñas todos los días con él? Y yo que pensaba que Luzu estaba mal —respondió entre carcajadas y yo me contuve a darle un buen golpe.

—Que cabron —dije luego de recuperar mi voz, esa misma que se escapó junto a mi dignidad. Si, ambas se fueron juntas hace unos momentos, y trataron de regresar al ver que el chino cabron seguía riendo, aunque solamente regresó una, ya que, no tarde mucho en unirme a sus risas— Joder si que eres tonto —dije luego de secar mis lágrimas, y una vez más calmado, decidí responder— pues si, no recuerdo una sola noche en la cual no halla soñado con él.

~ Una noche en la que no halla probado sus labios ~

—¿Y que sueñas regularmente? —Sonreí con nostalgia ante su pregunta.