¿Aún me amas? [Segunda Temporada]

Cap 7 | Desahogo

Narra Rubius

Caminábamos por el extenso bosque, caminábamos en un silencio casi tan incomodo como el mismo hecho de habernos distanciado por tanto tiempo.

Aunque si era sincero, no recordaba la última vez que conviví tanto tiempo con alguien. Pues desde que Vegetta no estaba aquí, todo era tan distinto.

~ Todo carecía de color ~

Y es que ya solo me conformaba con su doloroso recuerdo: pues era lo único que me quedaba.

Solo me quedaba dormir en su cama mientras imaginaba que sus brazos me rodeaban, aunque en realidad solo lo hicieran sus sábanas.

~ Pero estás ya estaban perdiendo casi por completo su olor ~

Solo me quedaba ver todos los hermosos cuadros que adornaban su mansión, adorarlos como si lo tuviera a él frente a mi.

~ Aunque cada vez parecían más opacos ~

Solo me quedaba poner sus discos de música y bailarlos junto a las estrellas, deseando que una de ellas fuera él, deseando que bajara del cielo solo para envolverme en sus brazos, para envolverme y decirme que todo estaba bien.

~ Pero esos discos cada vez estaban más rayados ~

Solo me quedaba tomar flores moradas y llevarlas conmigo, imaginando que a quien llevo es a él, imaginando que él no se ha ido, que él sigue aquí, conmigo.

~ Pero las flores se marchitan en mis manos como su vida. Como aquel día ~

Pero... ¿Qué haré cuando ya lo tenga nada de eso? ¿Cómo hago para que sus sábanas sigan oliendo a él? ¿Cómo hago para que la pintura siga brillando como siempre? ¿Cómo arreglo los discos para que dejen de estar rayados? ¿Cómo hago para que las flores no se marchiten? ¿Cómo hago para que su vida no vuelva a marchitarse una vez regrese? Una vez tenga que irse de nuevo .

~ ¿Cómo soportaré verlo irse otra vez? ~

-Estás pensando en Vegetta ¿Verdad? -escuché a mi lado y miré a Willy, él cual me miraba con tristeza, con ¿lastima?

-¿Soy tan obvio? -intente bromear, pero la sonrisa no quería salir: pues solo deseaban salir mis lágrimas.

-¿Que sucede? Creí que estarías más contento con la idea de que regresará -habló sin mirarme.

-Lo estoy -conteste simple y lo más cortante posible ¿Donde están mis fuerzas?

-No mientas Rubius, se te da falta, créemelo -habló algo serio. Como si no acabe de creerme, pero ¿Porqué? Todos me lo creyeron cuando lo dije ¿Porqué él no?- ¿Qué sucede en realidad? -volvió a insistir esta vez mirándome fijamente.

-Es que enserio me alegra que vuelva, me alegra mucho Willy -intente hablar sin sollozar. Pero esta vez parecía costarme más que las anteriores, esta vez parecía que mi mente se estaba negando a seguir mintiendo.

Se negaba a sonreír como siempre lo hacía, se negaba reír como siempre lo hacía, se negaba a dejarme en paz.

~ ¿Es que ya se me acabaron las mentiras y las sonrisas falsas? ~

Quise seguir hablando, quise contestar cualquier otra cosa para cambiar de tema: como siempre lo hacía.

Pero no podía, ¿Porqué? ¿Porqué parecía que me quedaba sin voz? ¿Porqué parecía que con cada palabra que decía, un horrible nudo apretaba con más fuerza mi garganta? la apretaba hasta que mi voz solo era un fino hilo, un hilo que estaba apunto de romperse.