Diciembre era siempre un mes difícil tanto para Karma como para mi
Navidad y su cumpleaños habían pasado ya, haciendo que nuestros días juntos, descansando en brazos del otro durante horas, se fueran terminando.
Sabiendo que nuestro descanso nos duraría solo unos cuantos días más, aprovechamos nuestros tiempo juntos de todas las formas que se nos ocurrían.
El tiempo, gastado en risas y juegos, pasó mucho más rápido de lo que queríamos.
Pero aun quedaba algo importante que celebrar
Siempre celebré Navidad con la familia de Karma, a cambio él celebraba Año Nuevo con la mía. Este año no era la excepción.
Nuestro 31 de Diciembre empezó temprano siendo una ocasión especial, preparándonos para la cena con mis padres.
Nos arreglamos de forma simple, con ropa que no importaba si manchábamos durante los preparativos de la cena.
Y así, empezamos a preparar todo
Empezamos a preparar la cena, entre risas y juegos con los diversos ingredientes, apoyándonos y dándonos ideas, esperando hacer lo mejor que podíamos.
Cada cierto tiempo nos dábamos un beso, corto y dulce, mientras la mañana se escapaba de nuestras manos.
Para las 3 de la tarde ya teníamos toda la cena lista, así que descansamos por un rato, antes de cambiarnos de ropa.
Nos acostábamos en la cama, abrazados frente a frente, mientras decíamos todas las cosas cursis que se nos podían ocurrir en ese momento.
El ambiente nos ponía de ese modo
Nuestros ojos no se despegaban del otro, haciendo que el tiempo pareciera detenido a nuestro alrededor.
- ¿Por qué siempre te pones tan cursi en Diciembre? - Curiosa por su comportamiento, le pregunté al pelirrojo a mi lado.
- Demasiadas fechas se juntan en Diciembre, demasiados sentimientos se arremolinan en mi mente durante todo el año, pero siempre siento la necesidad de demostrarte cuanto te amo en estos días, ¿te molesta? -
- Para nada, me gusta que me demuestres tu amor, y aun más me gusta que lo hagas en estos días -
Era lindo, saber que solo yo lo podía ver así
El reloj fue lo que hizo que nos levantáramos de nuestro melosos ambiente, listos para cambiar de atuendo.
Una larga ducha y algunas peleas de juego mientras nos vestíamos hizo que la tarde se terminara prontamente, haciendo que la hora de la cena se acercara cada vez más.
Mientras esperábamos por la llegada de mis padres, Hikari nos había hecho el favor de poner música para relajarnos.
Bailamos mientras yo usaba un vestido blanco que me llegaba a las rodillas y zapatillas bajas de color plateado, abrazada a un Karma vestido de una camisa roja, pantalón y zapatos negros.
Solo éramos él y yo
Finalmente, el timbre de la puerta nos aviso de la llegada de mis padres.
Abrí la puerta, recibiendo a mis padres con una gran sonrisa y un abrazo.
- Bienvenidos, papá, mamá, espero que el su viaje haya ido bien - Los salude, venían desde una de nuestras casas en Estados Unidos.
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De nuevo en tus brazos (Karma Y Tú)
Fanfiction(T/N) Shiba es hija de una reconocida familia de asesinos, y por ello tuvo que alejarse del que alguna vez fue el amor de su vida. Ahora, después algún tiempo del incidente, ya podrá volver a verlo. Los personajes no me pertenecen, son propiedad de...
