Hoy solo es hoy (Donnie Y Tu)

Está bien...

- que estás pasando?, Por qué no veo nada?

Donnie se acercó a la cama y tocó tu hombro.- okey, quiero que me escuches, todo saldrá bien, te encontré en un callejón y trate la mayoría de tus heridas, solo necesito que confíes en mí.

- Puedes decirme tu nombre...tengo miedo y no se dónde estoy.- decías apunto yo de las lágrimas.

-Me llamo Donatello, pero solo dime Donnie, sigues en Nueva York, solo que en un lugar singular.- sostenía su cabeza con su mano derecha pues no sabía cómo decirle que se encontraba en las alcantarillas.

-Donnie, cuánto tiempo estuve inconsciente?, De seguro las hermanas del orfanato están desesperadas por encontrarme...

-Orfanato..... Perdona pero lleva un mes inconsciente, y será mejor que descanses, ahora que estás despierta, puedo hacerte más exámenes y será más fácil alimentarte, pero dime aparte de el dolor en todo tu cuerpo, sientes algo extraño?

- Mis manos y pies, no los siento...- decías mientras levantabas tu brazo y tratas de mover tus dedos.

- Nada?, Ni siquiera los puedes mover?.- tocó su mano con cuidado y movió uno de sus dedos para ves si reaccionaba.

- No, nada, no puedo moverlos....

- no te preocupes, pronto lo harás, quedarás como nueva, te la prometo.

Solo sonríes y te quedas en silencio, tus pensamientos comienzan a fluir.

No sé si pueda confiar en ellos, y si son los que me han echo esto y si en realidad me quieren para algo peor y si.. y si solo quieren mis órganos, tengo tanto miedo, su voz se escucha tan suave y calmada pero aún así tengo miedo de el.
                    
                                          --------------------- Un mes después --------------------

Pasaron los días y la semanas, ibas conociendo a las tortugas más y más, y aún que te hacían sonreír aún no confiaba en ellas.
De repente escuchas que alguien entra al laboratorio, por sus colores, adivinas que era Donnie, al parecer trayéndote el desayuno, coloca la bandeja  en tu cama y toma la cuchara acercándola a tu boca.

-Donnie...no es necesario ya puedo usar un poco mis manos.. -decías con un poco de vergüenza en tu rostro.
- Que no te de pena, no es molestia así que vamos es hora de desayunar y se que tienes hambre.

acerco más la cuchara a ti y con un poco más de vergüenza abres tu boca y aceptas la comida.

- Y dime, puedes distinguirme un poco más ahora?, Ya sabes por tu vista.
- Bueno, ya veo tu rostro a esta distancia, por lo menos.

Donatello solo pensaba en tu respuesta mientras seguía ayudándote a comer, de repente solo sueltas una pregunta aún más apenada.

-Donnie, se que han pasado en vela cuidándome, pero creo que de alguna forma cambie sus costumbres, es posible que pueda irme?.

-Quieres irte?, Bueno en realidad la has cambiado un poco, pero no de mala manera, al principio si, nos preocupamos, pero a medida que te conocemos creo que los chicos y yo empezamos a sentir aprecio por ti.

-Solo no quiero ser una molestia...Y aún que llevo poco tiempo aquí... Me da pena salir de este cuarto, es como si invadiera este lugar.

-que te parece si.- Donnie deja de alimentarte y mueve todo a una mesa cerca de la cama.- bienes con nosotros a desayunar?

-pero.....pero yo...no puedo ir...-decías apenada e incomoda.

- se que aún no te puedes mover mucho, pero creo que sí vienes con nosotros verás que nada es como lo sientes.