Mi ángel oscuro G!P (2da parte y final de "Mi ángel de la guarda") (Rosé Y Tú)

Busca en tu pasado

Jennie: ¿Dónde está _____?

Jisoo: se fue, no pude detenerla, - sin soportarlo más comenzó a llorar, - ¿Qué es lo que le sucede a mi hermana? ¿por qué nos esta sucediendo esto a nosotras?

Jennie: tranquila, vamos a ayudarla, no la vamos a dejar sola, y a ti tampoco, - se encontraba abrazando a su amiga rodeando sus hombros con sus brazos. –

Jisoo: ella... Parece como si alguien la quisiera manipular, pero, en el fondo sigue siendo la misma, me dijo que no quiere que estemos cerca porque tiene miedo de que nos fuera a lastimar, eso significa que, en el fondo, aún sigue siendo la misma de antes.

Jennie: entonces vamos a estar cerca, vamos a hacer lo que sea necesario para que vuelva a ser la de antes, vamos a recuperar a la antigua _____, ya lo verás.

Jisoo: gracias, Jen, pero ¿Dónde está Lisa y Rosie?

Jennie: recuerda que Lisa acompaño a Rosie con la trabajadora social, dijo que la esperaría hasta que terminarán de hablar y que nos veríamos en la entrada cuando salieran.

Jisoo: ¿En qué momento cambió todo, Jen?

Jennie: no lo sé, pero vamos a solucionarlo, tranquila.

Mientras tanto Lisa y Rosé habían llegado a la oficina de la señorita Im Yoona, tocaron la puerta esperando la aprobación para poder entrar, la cual les llegó en cuestión de segundos.

Abrieron la puerta y se encontraron con una señorita muy bonita, sentada detrás de un gran escritorio, quién al verlas las recibió con una cálida sonrisa.

Im Yoona: hola, chicas, pasen.

Lisa: yo te estaré esperando aquí afuera ¿Ok?

Rosé: está bien, gracias.

Im Yoona: en realidad Lisa, también me gustaría hablar contigo, Jennie y Jisoo, pero será después de que hable con Rosé, por favor podrías ir a buscarlas.

Lisa: ¿Con nosotras?

Im Yoona: sí, con ustedes.

Lisa: está bien, iré a buscarlas y volveré, con permiso, - realizó una reverencia y cerró la puerta. –

Im Yoona: por favor Rosé, toma asiento, - le indicó una silla que se encontraba frente a su escritorio, Rosé caminó y se sentó, tenía los ojos hinchados de tanto que había llorado últimamente. –

Rosé: ¿Sucede algo?

Im Yoona: en realidad es lo que me gustaría saber respecto a ti, tus maestros me han dicho que últimamente te notan un poco distraída ¿Tienes problemas en casa?

Rosé: no, todo está bien en casa.

Im Yoona: entonces ¿Qué es lo que te tiene así?

Rosé: es... Es por amor, de quién me encuentro enamorada parece que es otra persona, pero no entiendo por qué.

Im Yoona: ¿Otra persona? ¿Me quieres explicar?

Rosé: ella ya no es la persona amable y cariñosa de antes, ahora parece que hubiera perdido su esencia, como si su alma estuviera siendo consumida junto con toda su bondad, ella parece otra persona, alguien a quien ya no conozco más.

Im Yoona: entiendo... Rosé, dime ¿Tú amas, a esa persona aún?

Rosé: más que nada en este mundo, haría lo que fuera por ella.

Im Yoona: entonces no te alejes, ella necesitará de ti, debes ser fuerte, y cada vez que sientas que estás perdiendo una parte de esa persona y que se aleja más de ti, recuérdale lo mucho que la amas, a veces las palabras no son suficientes, pero, una mirada puede marcar la diferencia.

Rosé: ¿Una mirada?

Im Yoona: así es, los ojos siempre reflejan nuestra alma, ellos nunca van a mentir.

Rosé: y ¿Si no funciona? ¿Si termino por perderla? No creo poder soportar eso.

Im Yoona: no la perderás, no debes de perder la fe, pero, necesito que primero te cuides tú, no podrás cuidar de nadie si no te encuentras bien, así que, por favor, come más y duerme bien ¿De acuerdo?

Rosé: lo haré señorita, me cuidare más, no se preocupe, gracias.

Im Yoona: siempre que necesites hablar con alguien, de lo que sea, la puerta de mi oficina se encontrará abierta.

Rosé: es usted muy amable, la verdad es que me siento muy tranquila estando aquí, siento que la conozco, sé qué parece raro, pero, así lo siento.

Im Yoona: no tiene nada de raro, a decir verdad, tú me recuerdas a alguien que conocí hace mucho tiempo, ella era muy parecida a ti, era inteligente, amable, fuerte, daba todo por ayudar a otros.

Rosé: y esa persona... ¿Fue feliz?

Im Yoona: lo fue, fue muy feliz, ya que estuvo hasta el último momento con la persona que amaba.

Rosé: espero que yo también pueda ser feliz, al igual que ella.

Im Yoona: lo serás, solo debes de ser fuerte y luchar.

En ese momento se escucharon dos golpes en la puerta, al parecer Lisa ya había regresado con las chicas, la señorita Im Yoona les dio permiso para que pasaran, pidiéndoles que por favor tomarán asiento junto a Rosé.

Rosé: creo que ahora soy yo quien se tiene que retirar para que pueda charlar con ellas.

Im Yoona: no Rosé, por favor quédate, en realidad quiero hablar con las cuatro y es con respecto a _____, creo que es a ella a quien te estuviste refiriendo todo esté tiempo ¿No es así?

Rosé: sí, era a ella.

Im Yoona: bien, quiero escucharlas, a las cuatro ¿Qué es lo que está sucediendo con ella?

Las cuatro se miraron entre sí, intentando decidir quién sería la primera en comenzar a hablar, al final fue Jisoo quien comenzó a contar lo que había sucedido desde el día de las prácticas de fútbol, de cómo su hermana comenzó a sentir un dolor en su ojo y como es que después de eso todo comenzó a cambiar.

Después fue el turno Lisa y Jennie quienes le hablaron sobre la increíble fuerza que había adquirido, del cambio tan radical que tuvo en su carácter y en su forma de vestir, de que ya no pasaba tiempo con ellas y que siempre las ignoraba.

Por último, mencionaron a esas tres chicas extrañas con las cuales ahora ya se juntaba, siempre que estaban cerca de alguna de ellas y ahora también de ese tal Suho, sentían un horrible escalofrío recorrer su cuerpo, Jisoo tenía la sospecha de que ellas tenían algo que ver con el cambio de su hermana.

Im Yoona las escuchó muy atenta en todo momento, no despegaba su mirada de esas cuatro chicas que se notaba estaban muy asustadas con todo lo que estaba sucediendo, y no sabían que hacer exactamente.

Im Yoona: ahora que me han contado lo que está sucediendo, necesito que todas estén tranquilas.

Jisoo: seguramente es probable que no crea ni la mitad de lo que le hemos contado, pero le juro por Dios que todo es verdad.

Im Yoona: tranquila, yo te creo Jisoo, claro que te creo, ahora, sé qué están asustadas y muy preocupadas, pero les diré lo mismo que le dije a Rosé, no se alejen de ella, manténgase unidas ¿Lo entienden?

Jennie: lo entendemos, no vamos a alejarnos de ella.

Lisa: haremos lo que sea necesario para que ella vuelva a ser la misma de antes.

Im Yoona: es bueno saber eso, Lisa, pero ahora lo que creo que ella necesita es que ustedes se mantengan unidas, y les aseguro que todo va a mejorar.

Rosé: ya es tarde, creo que lo mejor será irnos, muchas gracias, señorita Im Yoona, necesitábamos hablar de esto con alguien más.

Cuando estuvieron a punto de salir todas, Jisoo se detuvo en la puerta y giro en dirección de aquella mujer, sus ojos estaban llenos de lágrimas, tenía miedo de lo que fuera a suceder, le atemorizaba no poder ayudar a su hermana.

Jisoo: ¿Qué es lo que debo hacer? – preguntaba, esperando que esa mujer le pudiera dar una respuesta a esa pregunta. –

Im Yoona: en ocasiones, el pasado puede ayudarte a reparar el presente, busca en tu pasado Jisoo... No solo son cosas viejas.