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Edward pareció un poco mareado y me tomo del hombro para luego ponerse recto y yo empecé a caminar a la recepción, cuando llegué ahí una señorita muy amable me atendió con una sonrisa sincera y le dije que buscaba al Dr. Malfoy y ella me informo que ahorita llegaba de su hora del almuerzo y yo le dije que lo esperábamos. Edward todo el tiempo estuvo tomando mi mano, lo que me encanta en el mundo mágico es que todos o casi todos de mente abierta y aceptan las relaciones gay. Teddy empezó a llorar lo que era muy raro en él y yo me levante soltando la mano de Edward para poder mecer a Ted de un lado a otro, yo estaba muy preocupado de que algo malo le pasara a Teddy bajo mi cuidado. Después de unos diez minutos Draco apareció y al verme a mi con Teddy en mis brazos llorando vino corriendo hasta mi y nos guío a Edward y a mi hasta su consultorio.
-¿Qué tiene, Teddy?- le pregunte.
-Tienes que dejarme revisarlo para saber, Orion- dijo en un tono entre burlon y serio.
-Lo siento, es solo que me preocupo demasiado- le dije mientras ponía a Ted en la camilla para que Draco lo revisara.
-¿Ah comido algo de lo que sea fuera de lo común? ¿Hace cuanto esta así?- me empezó a preguntar.
-Amm, no. Molly me dijo que ya comía sandía y mango y eso le di para desayunar, esta así hace como quince minutos. Ya no se que hacer y eres el único medimago de confianza aquí- le dije en tono desesperado y Edward tomo mi mano.
-Tendré que hacerle unos exámenes de sangre, puede ser un virus o algo así. Viruela de dragón tienes que descartarla de tu lista de enfermedades, lo digo porque eh visto unos casos y eso no es lo que tiene Ted- eso me tranquilizo-
En un segundo se escucho el estornudo de Ted, luego se escucharon muchos seguidos lo que llamo la atención de los dos magos y el vampiro con ellos.
-Puede tener mal evanescent ¿no?- le pregunte a Draco.
-Puede ser, el laboratorio sabrá más. Solo esperaremos una hora, me alegro de que hallas venido a mí- me respondió.
-Si, bueno el padre de Edward es doctor, pero no sabe nada de enfermedades mágicas y te vine a ver, por la confianza y porque eres un buen medimago- le dije.
-Esperemos en la cafetería, Edward también puede tomar algo. Supongo que tendrán sangre por ahí- dijo con una sonrisa.
-Mi familia y yo solo tomamos sangre de animal- le dijo a Draco.
-Tal vez allá, aquí hay de todo- le respondió.
Fuimos camino a la cafetería y por suerte para Edward si había sangre de animal, más específicamente de venado. Estuvimos sentados por una hora contando todo lo que hicimos en la escuela y Draco me contaba lo que descubrió sobre los magos de sangre pura, nos conto que podían quedar embarazados y que eso le encantaba porque estaba empezando a tener una relación con Harry Potter, quien era su némesis en la escuela. Al parecer a Edward lo tranquilizo saber que Draco salía con alguien más, lo que me pareció muy gracioso
