Capítulo 13 El final del secreto (Mía)

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Por fin me encontré a Luis en el metro, estaba muy presionada por explicarle porque no nos vimos toda esa semana y cuando por fin lo vi me calme, le explique todo pero resulto que él tampoco se había subido al metro en días. Le pregunte por qué y él se puso algo nervioso, dijo que tenía algo que decirme. Me preocupe un poco pero decidí escucharlo sin decir nada. En eso comenzó a hablar: Mía tengo algo muy importante que decirte...es algo que cambiara mi vida y es una gran oportunidad pero no es tan bueno para nuestra relación. Ahí fue cuando me empecé a preocupar pero él siguió: hace unos días recibí una oferta de una universidad en Monterrey, me aceptaron allá con una beca deportiva y así podré estudiar letras que es lo que siempre he querido. Pero...me tendré que mudar allá antes de que terminen las vacaciones de invierno. En ese momento se me bajo la presión, me quede en shock y no sabía ni que decir, pasaron mil pensamientos por mi mente y no podía asimilar que jamás volvería a ver a Luis después de las vacaciones, no podría volver a verlo en el metro y no volvería a saber de él. Luis me sobo el hombro tratando se consolarme pero yo seguía en shock. Cuando por fin pude tomar aliento y asimile lo importante que era esto para Luis solo me quedo decirle: estoy muy feliz por ti Luis, con esta oportunidad por fin podrás mostrarle al mundo lo talentoso que eres. Después de decir eso recordé la cita que tuvimos en el parque, el día que lo obligue a hacer una sesión de fotos de ambos, recuerdo que después de la sesión de fotos el me mostró algunas historias que había escrito y eran geniales, tenía mucho talento y era obvio que la carrera de letras era para él así que como frenarlo, esta era su gran oportunidad y no podía perderla. Él se alegró mucho de que me lo tomara bien después de todo; me abrazo porque sabía que estaba triste por dentro y ese abrazo me calmo. Pero después me dijo: esa es la razón de que no me subiera al metro, estuve ocupado con todo lo de la mudanza, los papeles y demás. Pero...no es lo único que te he estado ocultando. La verdad es...que no les he dicho a mis padres de lo nuestro y quiero pasar mis últimos días en la ciudad contigo y que nadie nos lo impida así que se los diré esta noche y tendrán que aceptarlo. Lo siento Mía, pero no quería decírselos porque sabía que si lo hacía no nos dejarían estar juntos y no quería que eso pasara. No lo deje terminar, solo lo bese, estaba tan aliviada de que pensara lo mismo que yo así que yo también le dije la verdad: Luis, yo tampoco se los he dicho a mis padres, y es por la misma razón que tu pero esta vez será diferente, se los diré y no me importa lo que piensen ni lo que digan, ya no voy a ocultarlo. El me beso de vuelta y a pesar de que seguía triste decidimos que estos últimos días juntos haríamos que valiera cada segundo.

La carta del metroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora