Realidad Deseada || TUA

Capítulo 12

—Oigan tontos, eso no es justo, ustedes son tres y ella es solo una —gritó Klaus, llamando la atención de los hombres.

—JAJAJA, ¿ya vieron? Ese niño nos está retando —se rieron de Klaus.

—Todavía se pueden rendir —ahora hablé yo.

—Háganle caso a ella —me apoyó Cinco.

Los hombres se siguieron riendo.

—Ustedes lo pidieron —dije y volteé a ver a mis hermanos y ellos asintieron.

Corrí hacia ellos, Cinco y Klaus me imitaron, los hombres sacaron sus armas y empezaron a disparar pero antes de que nos diera alguna bala yo me teletransporté llevando a Klaus conmigo, Cinco hizo lo mismo, ahora estábamos detrás de ellos y ellos se asustaron por lo que acababan de presenciar pero no bajaron la guardia y siguieron disparando, para esto la señora ya había salido corriendo, una de las balas, la cual no vi a tiempo, me dio pero a causa de la adrenalina seguí peleando, Klaus noqueó al primero, tenía que aceptarlo era muy bueno peleando cuerpo a cuerpo pero a causa de las drogas no siguió así, Cinco se teletransportó atrás del segundo y le pegó, lo cuál lo desmayó y por último yo con mi telequinesis saqué por los aires al otro que fue a dar hasta la pared.

Había sido divertido...

—Eso fue divertido —dijo Klaus, pensando lo mismo que yo.

.Concuerdo contigo Klaus —comenté riendo.

—Bueno, el último que llegue a la academia es un huevo podrido —Klaus se echó a correr y Cinco lo imitó, luego vi cómo Cinco toca a Klaus y lo teletransporta con él.

Yo iba a imitarlos pero una niña de tez morena se puso en mi camino y evitó que pudiera correr.

—Oh perdón —me disculpé.

—No hay problema ______ —remarcó mi nombre.

¿Cómo rayos sabía mi nombre?

—¿Cómo sabes mi nombre? ¿Tú quién eres? —me puse seria.

—Oh perdón, ¿dónde quedaron mis modales? Soy Lila —me retumbó ese nombre en la cabeza.

¿Qué hacía Lila aquí? Se supone que todavía no debe salir, a parte sigue siendo una niña.

—¿Lila? —me hice para atrás.

—Sí y te voy a pedir que vengas conmigo.

—¿Y por qué haría algo así?

—Bueno, sencillo, tú no deberías estar aquí, ya cambiaste mucho la línea temporal y a parte si no vienes mataré a toda tu familia, bueno, ni siquiera son tu familia —rió.

No quería que le pasara algo a Cinco, a Klaus o a cualquiera de la academia.

—Bien, iré contigo —obviamente tengo planeado escapar solo que por el momento no tenía opción.

—Muy bien —sonrío maliciosamente.

Agarró el maletín para después tomarme del hombro y llevarnos a la comisión.

—Bueno esta es... —empezó a decir.

—La Comisión, ya sé —la interrumpí, a lo que se quedó confundida, claramente no se lo esperaba.

Me llevó por pasillo y pasillo hasta que nos detuvimos frente a una puerta blanca con una perilla de metal dorado, Lila tocó la puerta y abrió... La Encargada.

—¡Mamá! —entró y abrazó a su "mamá".

—¡Oh! Veo que ya has traído lo que te pedí hija —habló la encargada.

—¡Sí! No fue tan difícil.

Yo solo escuchaba su conversación y veía como hablaban de mí como si no estuviera aquí parada al lado de ellas.

—Sí, bueno, ¿para que me trajiste aquí? Encargada —remarqué su nombre a lo que ella se sorprendió pero trató de disimularlo.

—Bien hija, le dijiste que soy la encargada.

—No mamá, no se lo dije.

Ahora sí mostraba su cara de confusión pero siguió...

—Bueno, como sea, ______ te hemos estado observando y decidimos que podrías sernos útil como sicaria.

—¿Qué? ¿No estoy muy niña para estos trabajos?

—No lo creo, dados tus poderes y habilidades nos ayudarías mucho —hizo una pausa—. Lila, hija, ¿por qué no la llevas a la oficina donde se entregan las misiones? —le dio un pequeño empujón hacia la puerta—. Y le explicas cada detalle.

—Sí, mamá —dijo agarrando me del brazo para llevarme con ella a la salida.

—Bueno, escucha con atención, te llevaré a la oficina de misiones, ahí te entregarán una carpeta donde dirán todo lo que tienes que hacer, ¿ok? —yo solo asentí—. Te entregarán un maletín y con el podrás viajar al año que se te pida —¡El maletín! ¡Claro! Con el puedo regresar—. Y si estás pensando en escaparte con el maletín te recomiendo que no lo hagas porque sigue en pie lo de matar a tu familia —sonrió.

—No se me había cruzado por la mente —sonreí fingidamente.

—Bueno, llegamos, disfruta tu primera misión —me señaló una puerta.

—¿Ok? —entré a la oficina.

—¿Quien eres tu? —me preguntó la mujer que al parecer era la que entregaba las misiones.

—Amm... Soy ______.

—Oh, de acuerdo, tengo lista tu misión, solo falta un pequeño detalle...

—¿Qué?

—Debes decirme tu nombre para ponerlo en tu expediente, puedes decirme tu nombre o puedes inventar uno nuevo

Estaba a punto de decir mi nombre real pero luego recordé que Cinco podría llegar a estar en la comisión, claro, solo si no puedo evitar que viaje en el tiempo.

—Mmm... Ponme "The girl" —le dije sonriendo.

—De acuerdoo —escribió—. Toma, esta es tu primera misión —me entregó una carpeta, tal y como me había dicho Lila.

La agarré y me salí, ahora tenía que dirigirme al cuarto donde estaban los maletines, estaba a punto de llegar el momento que menos quería... asesinar a alguien, ¿cómo se supone que debo hacer eso? ¡Apenas soy una niña de 14 años! ¿Y ya quieren que mate a alguien? Pero todo esto lo haría por salvar a los Hargreeves, lo que tenía planeado era estar aquí por un tiempo y que piensen que ya no intentaré escapar pero cuando menos se lo esperen me iré, si, yo creo que funciona, o al menos eso espero.

Estaba a punto de llegar a los maletines, cuando empiezo a sentir un dolor insoportable en mi brazo, ¡rayos! Lo había olvidado, me dieron un balazo, sentí muy pesados mis ojos hasta que todo se puso negro...

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OIGAN, DUDA JAJA, QUÉ EDAD TIENEN??