Helena

Capítulo 5

Ando por el pasillo para llegar al comedor, Christie se ha separado de mí, dice que los abogados tienen un comedor distinto. El gran pasillo se ha llenado de víctimas siguiendo el mismo recorrido que yo, miro a mi alrededor intentando encontrar a Leo, Bryan o a Roger, pero ni rastro, es imposible encontrarlos entre tanta gente.

No puedo evitar escuchar conversaciones entre las víctimas a mi alrededor, y lo que escucho me mantiene intrigada, pues la mayoría están extremadamente nerviosos, hablando sobre el miedo que le tienen a la cena de hoy. ¿De qué no me he enterado?

Dejamos de andar, hemos llegado a la gran puerta que lleva al comedor, en filas de 3 por el pasillo 15. Teniendo en cuenta la cantidad de víctimas que somos, son filas larguísimas.

Siento una mirada intensa sobre mí, y me giro bruscamente hacia mi izquierda, donde se encuentra una chica de cabello corto castaño, ojos del mismo color parcialmente cubiertos por su flequillo, un rostro redondo lleno de pecas, es algo más baja que yo, que al parecer soy algo más alta que la media.

Vaya... ni mi propia estatura recuerdo.

La chica me mira sonriente sin apartar la mirada, lo cual se vuelve muy incómodo, no digo nada, tan solo aparto la mirada, pero sigo sintiendo la suya.

-Soy Marta.-Dice sin dejar de sonreír.

Me gustaría contestarle con un "¿Te he preguntado?", pero no quiero sonar grosera, ni siquiera serlo, la situación en la que me encuentro no me deja estar de un buen humor precisamente ¿Cómo podría estarlo, teniendo en cuenta todo por lo que estoy pasando?, así que respondo con un "hum", apartando la mirada. Lo que menos quiero en este lugar lleno de desconocidos, es hacer amigos, ni siquiera puedo considerar amigos míos a los 3 chicos con los que he hablado.

-Te desmayaste en la conferencia. Helena ¿Verdad? Sí, solo te conozco por eso... Bueno, ahora todo el mundo sabe quién eres.-Continúa hablando sin quitarse la sonrisa de la cara.-Oye, Helena ¿Tienes idea de cuándo entraremos en el comedor? Soy nueva, voy un poco perdida...

Sigo sin hablar, después de lo sucedido, no estoy para aguantar a una chica que... sí, es dulce y amable, pero demasiado directa y charlatana.

-Es verdad, que tú también eres nueva... Al parecer muchos lo somos. ¿Sabes?, la mayoría de los nuevos se han-

-Marta.-La interrumpo.- ¿Por qué la gente está tan nerviosa?

Su sonrisa se ensancha al escuchar mi voz por primera vez.

-En la conferencia, el jefe habló. Bueno, él no, su abogada habló por él, el jefe tan solo se comunicaba a través de susurros extraños, y ella nos transmitía el mensaje a nosotros a través del micrófono. Dijo muchas cosas, pero para finalizar, anunció algo que creo que nadie entendió: "esta noche, en la cena, habrá que robarle el manjar a las bestias, aquí entrará en juego la ley del más fuerte" ¿A qué crees que se referiría?

Me quedo pensativa, "la ley del más fuerte", "robarle el manjar a las bestias", yo tampoco logro entenderlo.

Entonces, el chico situado justo delante de Marta se gira, uniéndose a la conversación:

-Sea lo que sea, me puedo esperar cualquier cosa de este sitio... Cuando al jefe se le ocurre algo especial, podéis esperar que se derrame mucha sangre. Aquí las vidas no son valoradas, lo digo por experiencia. Llevo 2 meses en este lugar, he visto cosas demasiado traumáticas, mucha gente muere cada semana, y no importa, para nada.

Un escalofrío me recorre la piel, el chico me observa fijamente, igual que lo hizo Marta, su mirada penetrante consigue que me ponga nerviosa... Exactamente igual que con Marta. Entonces me doy cuenta, ojos y cabello castaños, alto, pecoso...