Un poco de paz

C18: Tienes un ouch

¡Buenas a todos! los dejo con 2 capítulos más... esta historia se pone intensa🧐. ¡Disfruten!

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Jiang Cheng se despierta en su propia cama, en su propia Secta, asfixiado y empapado en agua.

Jadea y recupera la conciencia, habiendo dormido como un muerto después del día que tuvo, y tose a través de su ahogamiento cuando su garganta y pulmones rechazan el repentino ataque. Una vez que está respirando, (aunque sonando como un perro viejo), mira a los dos niños al lado de su cama. Jin Ling sostiene una cantimplora de la cual se escapan pequeñas gotas que no lograron bloquear sus vías respiratorias y Lan Yuan sostiene un montón de vendajes desenvueltos.

" ¿Qué creen que están haciendo?" Sisea, se pasa una mano por la cara y hace que el agua gotee por su cuello. Mueve las piernas hacia el costado y hace una mueca cuando la cama hace un sonido de chapoteo. Todo el maldito asunto va a tener que dejarse secar.

"Tienes un ouch", le dice Jin Ling con total naturalidad.

"Tienes razón", muerde, poniéndose de pie y arrastrando los pies detrás de una pantalla para cambiarse. Deja un rastro detrás de él como si una nube de lluvia se hubiera instalado sobre su cabeza. "Intentar ahogar a tu tío dejará un ouch".

"Eso fue un accidente", grita Lan Yuan, sonando horriblemente avergonzado. "Estábamos tratando de limpiar la herida antes de ponerle vendas, pero la cantimplora pesaba demasiado".

Jiang Cheng ahoga un gemido en las mangas empapadas, luego se quita la tela de la piel para reemplazarla con batas de día más limpias, frescas y secas. Luego sale de detrás de la pantalla y cruza los brazos sobre el pecho, mirando a sus sobrinos con tanta irritación como pudo evocar.

"No estoy herido".

"¡Pero hay marcas en tu cuello!" Jin Ling exclama con un pequeño salto. "A-Yuan dice que habrán sido hechas en la cacería nocturna".

Jiang Cheng se congela. Agarra sus brazos con tanta fuerza que sus nudillos comienzan a ponerse blancos. Gira sobre sus talones hacia un espejo y se baja el cuello de la bata. Franjas de color que van desde el amarillo pálido hasta el morado oscuro decoran su cuello, bajando por el escote. Solo se vuelven más prominentes a medida que su rostro se pone rojo.

"Son sólo moretones", tose, colocando el cuello de la bata en su lugar. Afortunadamente, todos los más notables se mantuvieron lo suficientemente bajos como para ser ocultos por la ropa de día, pero con la ropa de dormir, habían quedado horriblemente expuestos.

No es de extrañar que los chicos pensaran que estaba herido. Parecía que un leopardo le había pisado la garganta.

"Voy a hacer que ustedes dos estudien con Lan Qiaolian si creen que pueden sanar los moretones con agua", resopla. Luego, tropieza un poco en su marcha hacia el cofre donde guarda la ropa de Jin Ling. Si hace eso, ella le preguntará de dónde vienen los moretones, y definitivamente no es lo suficientemente ingenua como para pensar que provienen de una cacería nocturna.

Separa la túnica de Jin del pecho y aprieta la mandíbula. Luego, las deja caer de nuevo en el cofre y deja que la tapa se cierre con un ruido sordo.

"Vamos", les dice a sus sobrinos, todavía temblando nerviosamente con las manos llenas de vendajes y una cantimplora. "Vamos a buscar algo para ponerse".

Con la cantidad de jóvenes discípulos que recibió Yunmeng Jiang, no hay escasez de túnicas de tamaño juvenil. Lleva a sus sobrinos al guardarropa de su Secta y encuentra túnicas que les quedan bien. Después de eso, los lleva al pabellón flotante y desayunan bajo la atenta mirada de Liu An.