De nuevo tú (Hero Fiennes)

25.

-¿qué te parece si paso por ti mañana para irnos juntos a la junta? -me pregunta Hero estacionandose afuera de mi casa.

Desde que regresé había estado muy atento y no me decía el porqué. Él insistía con que pronto me enteraría.

-Temprano por favor -dije abriendo la puerta para salir del auto.

-Nos vemos mañana, entonces. Descansa -guiño un ojo y entonces salí del auto.

Abrí lentamente la puerta de la casa y me encontré con mi amiga sentada en el sillón, mirándome seria y con una ceja arqueada. No le había contado nada aún porque sabría como se pondría.

-¿Me quieres explicar por qué te trajo Hero a casa? -estaba cruzada de brazos y moviendo un pie sin cesar. Sonreí temerosa y negué rápidamente -uhmm -se quejó-, dejame reformular. Explícame porque te trajo Hero

Me quedé en silencio unos segundos pensando que decir y como decirlo.

-uno siempre vuelve al lugar donde fue feliz -dije riendo para quitarle seriedad al asunto pero al parecer ella no estaba riendo, sino que se veía más molesta.

Solté lentamente el aire.

-Llevamos algunos días hablando de nuevo -dije acercándome al sillón donde ella estaba-, al parecer los días que me fui le sirvieron a él para algo porque ha estado más atento conmigo.

-Obvio -dice ella exaltada mientras me siento a su lado-, se dio cuenta que te estaba perdiendo.

-quizá -suspiré-, pero se dio cuenta que no me quiere lejos de él -me encogí de hombros.

-Ay, Nichols -Paddon negaba continuamente con la cabeza -Yo ya no diré nada -se encoge de hombros-, al fin y al cabo es tu vida, tus decisiones y yo solo puedo apoyarte -se acercó a mi y me abrazó.

Sin duda era mi mejor amiga. Cuando nos separamos le sonrío de lado y ella hace lo mismo.

Cuando despierto todavía ni siquiera amanece, así que con toda la tranquilidad del mundo, hago mis cosas, me baño, me arreglo y desayuno para estar lista justo cuando el auto deportivo de Hero se estacione afuera de casa.

Paddon aún no se despierta cuando abro la puerta para irme, así que dejo una nota en la mesa del comedor, donde le digo que me fui a la junta y que en la cocina le dejé el desayuno preparado.

Apenas comienza a salir el sol cuando subo al auto, Hero sonríe y me saluda de beso en la mejilla. Parece que viene aún adormilado y yo sonrío por eso porque se ve muy tierno.

Al llegar a la empresa, todos están sentados en el lobby, esperando que comience la junta. Están todos los operativos y administrativos, así que mis nervios comienzan a salir pues tengo que hablar de los nuevos proveedores y de los nuevos procesos.

Hero abre la segunda puerta de cristal y esta rechina, por lo que todos los presentes nos voltean a ver. La mayor parte de los presentes están boquiabiertos y murmuran cosas que no alcanzo a oír, suelto lentamente el aire que no sabía que estaba conteniendo.

Quizá venir con Hero no fue buena idea.

Él me toma por los hombros, haciendo que camine delante de él, seguro que después de esto, toda la empresa va a estar hablando y al principio era lo que menos queria. Entramos a la enorme sala de juntas que esta en una orilla de la empresa, aquí cabemos todos los trabajadores y sobra espacio, por lo general esta sala se utiliza para eventos que algunas veces llega a tener la empresa.

Por lo general, todos los administrativos tomamos asiento en la primera fila. Asi que tomo asiento en un lugar adelante y Hero se sienta a un lado de mi.

-¿Café? -pregunta y me limito a asentir. Se levanta del lugar para ir a la pequeña mesa que tienen en una orilla de la sala de juntas, en la cual hay café, té y galletas.

Observo a lo lejos a Hero preparando el café y entonces vuelvo a escuchar murmullos de los presentes por lo que me obligo a voltear a la entrada de la sala. Aday está llegando y hace una entrada de película. Se quita los lentes de sol y los coloca en su cabeza y después se acomoda la chaqueta de cuero.

Inmediatamente comienza a buscar lugar y le ruego al cielo que no escoja sentarse a mi lado, no sería una buena elección, aparte hay muchos más asientos disponibles. Cierro los ojos esperando lo peor y entonces siento a alguien pasar por enfrente mío, lo que sigue es que puedo sentir a alguien sentándose a mi lado, esperando que sea Hero que me ha traído el café.

Despacio abro los ojos y me quedo fija mirando hacía el frente. Así que por los rabillos del ojo logro ver a ambas personas, Hero a mi lado izquierdo y Aday a mi lado derecho.

-Lo que me faltaba -susurré.

La junta comienza con Fran explicando de los temas que se van a tocar. Cada administrativo explica lo que le toca, hasta que llega mi turno. Les cuento de los nuevos proveedores pero no profundizo pues eso es algo que tocaremos más tarde en la oficina. Y lo que si explico a profundidad son los nuevos procesos.

Después de alguans horas de mucha platica, información e incomodidad que pasé gracias a Hero y Aday, me levanté para salir lo más rápido posible de ahí.

-Grace -dijeron ambos cuando estaba casi en la puerta de salida. Suspiré y lentamente me giré.

No quería entrar nuevamente en conflictos por este par y sé que para evitar eso tenía que hablar con uno de ellos.

-¿vas a casa? -preguntó Hero y rápidamente negué.

-Me toca apertura, es fin de semana -dije obvia y él asintió recordándolo.

-Yo también me iba a ofrecer para llevarte -Aday se encogió de hombros.

-Ninguno de los dos trabaja hoy ¿o qué? -pregunté extrañada. Ellos asintieron.

-Yo regreso en una hora -se apresuro a decir Hero.

-Y yo cierro -se encogió de hombros Aday -como siempre -solto con una risa.

-Excelente -murmuré-. Nos vemos más tarde entonces -les guiñé el ojo y salí de ahí.

Caminé hacía la oficina para empezar mis pendientes, cuando la voz de mi amiga me sacó de mi trance.

-Tienes que hacer algo al respecto -rió divertida. La miré sin entender.

-¿por? -pregunté con una mueca en el rostro.

-¿Cómo que por qué? -ella seguía riendo-. Solo a ti se te ocurre llegar con Hero y sentarte con ambos hasta adelante.

-Pff -solté un soplido-, eso no fue planeado, yo estaba sentada ahí con Hero y Aday llegó ahí -me encogí de hombros. Ella rodó los ojos divertida. Parecía que mi situación le causaba mucha risa.

-Si sabes que toda la empresa hablará de esto ¿no? -solté llevándome las manos a la cara. Ella soltó un sí por lo bajo.

-Pero no te apresures a tomar una decisión solo por presión -Clarissa se encoge de hombros y le sonrío.

Ella tenía razón.

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Yo de nuevo por aquiiii