De nuevo tú (Hero Fiennes)

3.

-¡Grace! -me grita Payton desde el living, me encuentro en mi habitación -Te esta buscando Aday. 

Al escuchar a mi amigo decir que Aday ha llegado, salgo para recibirlo. El departamento donde estamos no es muy grande pero cabemos los tres a la perfección. Después de irme, perdí contacto con todos pero luego de un tiempo, Payton, ex novio de mi amiga Paddon, logró encontrarnos por redes sociales y comenzamos a hablar de nuevo. Me contó que al terminar su relación con mi amiga, prefería alejarse, justo como lo hice yo y, como mi hermano y él se llevan bien, decidió invitarlo a vivir con nosotros. Solo teníamos un problema, el departamento solo contaba dos habitaciones, una era mía y otra de Lan, así que usamos el estudio para acomodarle una habitación pero él no se queja. 

-No tardes mucho -me mira serio Payton-, es tarde -habla en dirección hacia Aday y rueda los ojos. Para nadie es un secreto que Pay no soporta a Ady pero no me quiere decir el motivo. 

-No le hagas caso -suelto tomando de la mano a Aday.

-Ni tu hermano me trata así -me limito a encogerme de hombros. 

-Ellos nunca hablan conmigo acerca de ese tema, Ady. No les hagas caso -lo jalo hasta que llegamos a mi habitación.

-¿y bien? -suelta mientras se sienta en la silla giratoria de mi pequeño escritorio. 

-No le había tomado importancia a contarte sobre este tema -suspiro- sinceramente no era algo que tuviera que importarte -me tomo unos segundos antes de seguir hablando, siento su mirada vacía sobre mí. Me recuesto en mi cama mirando hacia el techo-. Hero y yo si nos conocíamos -comienzo a hablar-, y tuvimos una relación -siento la voz cortada, recuerdo todo lo que pasamos, como estaba tan enamorada de él y Hero ni en cuenta, todo lo que vivimos y sufrimos-, fue una relación extraña -tomo aire-. Él era coordinador y yo una estudiante, común y corriente -suelto con una pequeña risa-, y sabíamos que no podíamos estar juntos pero aún así lo intentamos -me detengo un momento cuando veo que Aday se levanta de la silla y se acerca a mi cama. Se sienta y estira los pies para que yo pueda recargarme sobre él. Con sus manos acomoda mi cabeza sobre él y comienza a acariciarme el cabello. 

-Cuéntame todo lo que tengas que contarme -me dice una vez que estamos acomodados-, no te voy a juzgar y veo que todo este tema te pone mal -siento que los ojos comienzan a cristalizarse pero continuo, necesito sacar lo que siento.

-Gracias -susurro-, pero había alguien que no nos quería juntos, que quería a Hero con ella y esta persona movido cielo, mar y tierra para separarnos, habíamos logrado superarlo hasta que esta chica -suelto el aire-, me amenazó. Estuvo muy feo y por las buenas decidí hablar con el director para que me diera la baja y poderme venir para acá -cada vez me cuesta más trabajo hablar, siento que en cualquier momento se me salen las lágrimas-. Me despedí de él y de todos mis amigos con una nota, no fui lo suficientemente valiente para darles la cara a todos, sobre todo a él.

-¿Lo querías mucho, no? -pregunta aun jugando con mi cabello. Asiento. 

-Como no tienes idea -me sorbo la nariz-, por eso nuestras miradas al toparnos nuevamente aquí -Aday se queda unos minutos en silencio, debe estar procesando toda esta información que le acabo de soltar-, él quería que habláramos, ¿sabes? -rompo el silencio. 

-¿de? -como puedo, doy media vuelta para poder verlo sin levantarme de donde estoy. 

-Supongo que hablar del porque me fui pero no quiero, Aday. No estoy lista -es entonces cuando me rindo, las lágrimas comienzan a salir a mares. Y no las puedo controlar. 

Él toma mi pequeño cuerpo entre sus brazos y me obliga a sentarme. Me acerca a su cuerpo y me abraza hasta más no poder. 

-No sabes lo bien que le haces a mi vida, lo bien que siento de estar contigo -como puedo hablo, estoy muy feliz.

-Me hace muy bien que tengas la confianza tan depositada en mí como para contarme estas cosas, Grace -dice sin soltarme.

-No quiero que esto afecte en nuestro trabajo, Ady -me separo lentamente.

-Siempre y cuando a él no se le ocurra pasarse, yo estoy bien 

-¿te quedas? -lo miro y le hago ojitos para que acepte. 

-Si quiero pero mañana abrimos -hago puchero, el rueda los ojos. 

-Pues nos paramos temprano, me llevo mis cosas y nos alistamos en tu casa. 

Mi mira y se que esta pensando en la posibilidad de aceptar y sé que no se puede negar. 

-Tu ganas -me muevo rápido para festejar mi victoria-, pero nos vamos temprano, Grace. Porque tengo mil cosas que hacer en la empresa y explicarle a Hero lo que quedó pendiente. 

-¿segundo día y ya le vas a enseñar a abrir? -me sorprendo. Se encoje de hombros.

-Al parecer Fran confía mucho en él -suelta el aire.

En la mañana, salimos tan temprano de casa que ni tiempo me dio de despedirme de los hombres de la casa, me limito a escribirles en el chat. Ya estamos llegando y por lo general solemos ser los primeros pero esta vez, alguien nos ha ganado. 

Hero se encuentra recargado sobre un muy bonito carro deportivo color negro, jugando con las llaves del auto. Estoy impresionada y estoy segura que Aday también, pues él es fan de toda esa onda. Aday estaciona la moto justo a un lado del auto, nos quitamos los cascos y Hero nos observa, arquea una ceja en cuanto me ve, sé que está sorprendido.

-Veo que eres puntual, Fiennes -es lo primero que dice al bajar de la moto. Hero se limita a guiñar un ojo. Oh no. Aday se tensa, le molesta que lo reten y Hero solía hacer ese gesto en modo retador. Rápido me pongo entre ellos y como puedo quito el seguro de la puerta para poder entrar al trabajo. Todos los administrativos solemos tener llaves de los lugares.

-Aday, ya hablamos -le hablo bajo, Hero va unos pasos atrás de nosotros.

-Él empezó -dice como niño chiquito.

-No caigas en provocaciones -él rueda los ojos y asiente. Estamos afuera del almacén así que me despido-, nos vemos en un rato -me pongo de puntitas para darle un beso en los labios-, tengo que abastecer todos los módulos -el asiente y entra a su almacén. Una vez que lo perdí de vista, me dirijo hacia Hero.

-Tú no sabes como es él, Hero. Por favor, basta -él me mira con una expresión nula.

-Tú novio no me da miedo -me quita la mirada y la posa en un punto ciego.

-¡Basta! Vamos a trabajar todos en donde mismo y no quiero que se haga un ambiente laboral pesado y tóxico -no dice nada-, yo no sé que quieres, que estas buscando, no te entiendo -me devuelve por fin la mirada, mirada que siento nuevamente vacía-. Para mí, eres una persona completamente extraña, distinta, eres otro. Para mi punto de vista, yo te acabo de conocer ayer, justo como todos -esto hace que se le tense la mandíbula-, y tu deberías hacer lo mismo -lo miro, no pestañea, no hace absolutamente nada-. Olvidarte de todo y empezar de cero. Somos compañeros de trabajo y nada más. 

Termino y doy media vuelta sin darle oportunidad a que hable, aunque dudo que lo hubiera hecho. Me encamino hacia los módulos de atención al cliente y me tomo las sienes con los dedos indices. Esto será más difícil de lo que creí.

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Tercer capitulo y esto ya empieza a ponerse I N T E N S O.

¿cómo les pareció? MUCHAS GRACIAS POR LEER <3

Por cierto, en la imagen les deje el auto de Bebito Hero ggg.