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Hero.

"No sé que estás buscando, que quieres" sus palabras resonaban en mi cabeza, una y otra vez. 

-Yo tampoco sé que es lo que quiero, Nic -dije, echándome a la cama.

-¿Dijiste algo, amor? -Me dijo Alana desde la ducha. Y negué, como si ella pudiera verme. 

-¡No! -exclame recargando mis brazos por detrás de mi cuerpo. En seguida ella salió del baño de mi habitación, envuelta en una toalla. 

No dijo ni una sola palabra, se acerco a mí. Puso las piernas al rededor de mi cuerpo y comenzó a besarme frenéticamente. 

-Que bueno que tienes el departamento solo, Hero -contestó agitada. No respondí y seguí en lo mío. 

-¿te llevo a tu casa? -pregunte cuando acabó todo el asunto. Ella asintió tomando su ropa del suelo.

Alana es mi novia, unos meses después de que Grace se fuera de la ciudad, Alana entró a trabajar al instituto, comenzamos a llevarnos y ella me daba señales de que yo le gustaba, yo no quería empezar nada con nadie, porque creía que Grace en algún momento regresaría pero no fue así, entonces fue cuando decidí darle la oportunidad a Alana. Físicamente, es en exageración atractiva y me quiere mucho. 

Cuando le dije que me vendría para acá por una nueva oportunidad de trabajo, ella no dudó en acompañarme, me comentó que sus papás eran de aquí, así que se esta quedando con ellos y yo, pues estoy rentando un departamento. 

-No sé porque no aceptaste quedarte en casa de mis papás -me mira desde el asiento del copiloto-, conmigo.

-Alana -le echo un vistazo rápido-, ¿cómo crees? -ella se encoje de hombros. 

-No les hubiera incomodado -dice.

-No me siento preparado para conocer a tus papás -rio.

-Espero estes conciente que pronto los tendrás que conocer.

-Lo sé -termino y sigo conduciendo El trayecto a su casa en automóvil son como 15 minutos aproximadamente. Al llegar a su casa, ella se despide y sale de mi auto.

Manejo rápido y pensativo, las palabras de Grace siguen en mi cabeza ¿o es ella la que esta en mi cabeza?

Es la mañana de un viernes cuando despierto y caigo en cuenta que es mi primer día con apertura yo solo. Lo que quiere decir que Aday no llegará hasta después; he visto la hora y es tarde, ni me molesto en bañarme porque sé que si lo hago, llego tarde. 

Ya pasaron algunos días desde que entré a la empresa, el ambiente entre los tres, sigue tenso y debo decir que es incomodo estar en un lugar así pero el trabajo es. sin duda, bueno. 

Lo primero que hago al llegar a la empresa, es dirigirme hacía el almacén, en la empresa las cosas funcionan de manera extraña, la semana empieza hoy así que hay cientos de cosas por hacer, entre ellas, comenzar el reporte semanal que se debe entregar con reportes y cientos de cosas. Suspiro, Aday nunca me enseñó a hacer esto. 

Comienzo por prender la computadora y según recuerdo, se debe abastecer todos los productos a todas las áreas.

-¡Aday! -grita emocionada alguien de la cual reconocería la voz a distancia. Es Grace. La miro cuando se asoma por la puerta, puerta que por cierto nunca cerré. -Ah -se le apaga la voz-, eres tú -se escucha decepcionada al verme a mi frente al computador.

-¿tiene algo de malo? -arqueo una ceja.

-Necesito el reporte con las cantidades que abasteciste para saber cuanto puedo sacar del sub almacén -Rueda los ojos y se cruza de brazos en el umbral. La miro. 

De nuevo tú (Hero Fiennes)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora