La Guerrera De Sangre.

Partida

Momo no tardó en regresar a su dormitorio y llorar pues en su cabeza solo le estaban retumbando las palabras de Eri, podía parecer exageración pero esas palabras solo estaban una y otra vez en su cabeza que solo pensó en una cosa, ir con su madre y poder sentir ese amor que solo ella le podía dar, al fin y al cabo , solo era un pequeño tropezón, no era como si la vida la fuera a tirar por un barranco del cual le fuera duro salir, ¿verdad?
Su madre sigue y siempre estará para ella, pues su madre Asami se lo había prometido, apesar de tener 17 años, Momo aún le gusta ser abrazada por su madre , un cálido beso en la frente y las canciones de su madre eran el pilar que la ayudaba a levantarse, cuando perdió contra Tokoyami, su madre fue la única que la apoyo y que estuvo para ella.

*Flashback*

El camino a casa fue silencioso, su chófer sabía muy bien de la rápida derrota que tuvo contra Tokoyami, por el espejo veía de reojo a Momo la cuál se veía perdida y sabía que el no era el indicado para hablar con ella por lo que decidió guardar silencio hasta que por fin llegaron a la mansión Yaoyorozu, el hombre de edad se detuvo pero se quedó adentro ya que empezó a llover y todavía tenían que caminar un poco para llegar a la entrada, era poco la distancia, 3 o 5 metros pero la lluvia era muy fuerte, suspiro y volteo a ver dónde debía estar Momo la cuál sin que el chófer la viera, ya se había bajado para adentrarse a la mansión, camino lento por lo que terminó toda empapada.
Al entrar se topo con las maids de la casa la cuál al ver a la chica toda mojada le extendieron unas toallas las cuales fueron rechazadas por la azabache.

Maid: Debe secarse o pescara un resfriado.

Momo: Descuiden, estoy bien.

Las maids al ver la cara de Momo, toda empapada y triste, la dejaron pasar muy preocupadas, Momo camino hasta llegar a las escaleras aunque cuando estaba por subir, su madre la alcanzó a ver.

Asami: Momo.

Esa dulce voz con la que hablaba, de verdad que no entendía como su padre y ella se casaron, sabía la verdad, el que había en casa no era su padre pero decidió olvidar el tema y tratarlo como tal, aunque por obvias razones, siempre quiso saber de su verdadero padre pero decidió callar, pues pensaba que podrían golpearla como fue costumbre en su niñez o peor, que golpearan a su madre.

Momo: Estoy cansada mamá, quiero ir a mi cuarto, hoy si que fue un día pesado, me voy.

Momo dio una sonrisa forzada y dio la vuelta pero no pudo ni dar un paso porque su madre le tomo de la muñeca impidiéndole avanzar.

Asami: Si crees que me vas a engañar, te equivocas.

Momo no aguanto más y abrazo a su madre la cuál no tardó en colocar sus manos sobre la espalda de su hija, la pequeña azabache se dejó caer y su madre tuvo que tumbarse al suelo , Momo quedó en el suelo tirada y su cabeza quedó en el regazo de madre la cuál solo sentía como su pierna se mojaba por las lágrimas de frustración de su hija pero poco le importo pues solo acariciaba con gran dulzura el cabello mojado de Momo.

Asami: Lo vi pero , mejor cuéntamelo tú.

Momo: Vaya, hasta mi madre vio mi fracaso, no tarde ni un minuto, Tokoyami es fuerte y no me molesta que ganará él, me frusta que no haya podido dar pelea, yo sé que no siempre voy a ganar pero quiero dar todo de mi para así, perder con honor, pero mira, fui tan patética que no pude hacer nada.

Asami: Ese chico es talentoso

Momo se levantó de golpe y la vio a los ojos enojada.

Momo: ¿Quiere decir que sabías que iba a perder?

Asami solo se sorprendió y soltó una risilla que solo enfureció a Momo.

Momo: Madre ,ni tú crees en ...