Tres días.
Tres días que no pongo un pie fuera de la cabaña por la lluvia.
Tres días más lejos de casa, sin noticias y preocupada.
¿Cómo estará Bernabé? ¿Y la abuela? ¿Lateef? ¿Me seguirá buscando La Guardia? Espero que no.
Levi no debe tardar en volver. Salió hace dos horas camino al pueblo. Sí, lo sé, con esta lluvia y el lodo que debe de haber en el camino decidió salir a averiguar algo sobre La Guardia.
Estoy nerviosa por las noticias que traerá.
La puerta se abre de golpe y por ella entra él, empapado.
Le dije barias veces que no era necesario ir a buscar información, pero insistió.
-¿Qué averiguaste? -pregunto mientras le paso una toalla seca.
-Aún no han desistido, estos días de lluvia han retrasado su búsqueda.
-Eso es bueno ¿no?
-Sí, y no.
Levanto una ceja sin entender.
-Es bueno porque no la están buscando, pero es malo porque la lluvia no nos permite atravesar el bosque. -Se acerca a la chimenea.
-¿Tienes frío? -Tomo la toalla húmeda y la cuelgo en el respaldo de una silla.
-Algo, tendré que quitarme esta ropa mojada y darme una ducha caliente.
-Sí, será lo mejor, antes de que pilles un resfrío.
Levi pasa a mi lado rumbo al baño, el agua correr no tarda en escucharse. Aún no confío totalmente en él, prefiero mantener distancia pero estos días me permití acercarme. Lo he ayudado a hacer flechas para cazar. Al principio me costó, pero con practica y paciencia -también puede que Levi me haya ayudado mucho- logré hacerlas.
Tomo un par de varas de maderas, una navaja y me siento frente la chimenea. Esto requiere de mucha dedicación y concentrac...
-¿Todavía tiene problemas para tallarlas? -pregunta divertido.
-Esta es la tercera y he mejorado mucho. -No aparto la mirada de la vara-. Sigo sin poder dejarlas sin astillas. ¡Mierda!
Levi corre hasta estar a mi lado, toma con cuidado mi mano derecha y observa el corte que me gané con la navaja.
-Tendré que suturar. Tal vez le duela un poco.
-Solo has lo que tengas que hacer -digo adolorida.
Levi busca rápido los materiales para curarme. Cuando veo la aguja cierro los ojos asustada, nunca me han gustado.
-Bien, respira hondo, esto va a ser rápido.
Y así fue, lo único que sentí fueron unos leves pinchazos acompañados de delicadas caricias para calmar el dolor.
-Listo. ¿Qué tal estuvo? ¿Dolió mucho? -Noto su preocupación.
-Estoy bien, me duele un poco pero no es nada que no pueda aguantar.
Levi asiente convencido de mis palabras, se levanta con los elementos y camina hasta el tacho de basura para deshacerse de ellos.
-Levi -digo casi en un susurro mientras miro la herida.
Él se voltea y me mira curioso.
-Gracias. -Lo miro-. Gracias por todo.
-Siempre. -Sonríe tiernamente.
La noche cae rápido, y con ella mi sueño. Levi cocina algo rápido con los conejos que le quedan. Me ofrezco a ayudarlo pero se niega, dice que tengo que mantener mi mano herida lo mas lejos posible de todo para no contraer una infección. Y en parte tiene razón.
Estos días no hago más que pensar en mi familia, la angustia en mi pecho porque estén bien no desaparece. Me preocupa mucho como tomará todo Bernabé, ¿creerá que lo abandoné como hizo mi padre con ambos?
Suelto una larga bocanada de aire, estoy agotada de ¡todo! No comprendo lo que está pasando. Aún ni siquiera me creo el hecho de que haya un reino pasando el extenso bosque, y ni hablar de las personas que lo habitan en la aldea. ¡Todo es tan extraño! ¿Por qué tiene que pasar esto? ¿Por qué a mí?
Me pongo de pie y le doy la espalda a Levi una vez que le dije que me voy a la cama. Él simplemente respondió con un "buenas noches".
El camino hasta la puerta de la habitación no es grande -la cabaña en sí no es grande-, tomo el pomo de la puerta, lo giro y procedo a entrar.
-Es Akilah. -Volteo un poco mi cuerpo y lo miro a los ojos-. Mi nombre, es Akilah.
Él sonríe, una sonrisa que le llega hasta los ojos.
-Es un gusto señorita Akilah.
Cierro la puerta, me acuesto y me dejo llevar.
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Elementales- El Inicio
FantasiDespués de la muerte de su madre, y de que su padre los llevará a ella y su hermano pequeño a vivir en casa de la abuela para esfumarse de sus vidas, Akilah vive circunstancias sobrenaturales poco creíbles para el resto de las personas. Deberá enfr...