Capítulo 16

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- y cuando esperabas con nosotros en la habitación hasta que nos quedábamos dormidos – escuchó Conway la voz de Gustabo apenas y tuvo consciencia, pero decidió mantener sus ojos cerrados para seguir escuchándolo – te extraño viejo – susurró el rubio soltando un suspiro - a pesar de todo - comentó en el mismo tono de voz recargándose por completo en el sillón.

- lo siento – respondió el superintendente al darse cuenta que el chico no continuaría hablando, asombrando al menor y haciendo que se levantará del sillón inmediatamente avergonzado por sentirse descubierto – lamento haberte dejado lidiar con todo solo – confesó el mayor tratando de ver a los ojos a su hijo, pero Gustabo no quería seguir escuchando así que comenzó a caminar hacia la salida – te amo hijo – el rubio se quedó estático en la puerta a punto de abandonar la habitación, pero al escuchar esas palabras de su padre su pecho dolió, dolió muchísimo, hacía tanto que no tenía una muestra de afecto de parte de su padre ni siquiera una conversación donde no se terminaran gritando, que sentía que se pondría a llorar en ese mismo momento pero tenía tanto resentimiento en su corazón que salió de la habitación sin contestar ni dirigirle la mirada aguantándose las lágrimas e intentando ignorar sus propios sentimientos.

Conway sabía que no sería tan fácil que su hijo lo perdonará, lo descuido tanto y le llegó a decir cosas horribles que en realidad no pensaba, pero por el calor del momento las escupió como si fueran veneno, se arrepentía tanto de no haber tratado lo suficiente de arreglar antes la relación con su hijo, pero aún no era tarde y haría lo que fuera necesario para ganarse de nuevo su cariño.

En ese momento recordó a Horacio, ese muchacho que tenía sus ojos de diferente color, como su Daniel y sin perder más tiempo se levantó de la camilla en la que estaba acostado tomó su celular que se encontraba en la mesa que estaba al lado y salió con pasos seguros de la habitación.

Al poner un pie en el pasillo la mirada de Greco se dirigió a su posición, el hombre se encontraba hablando con Gustabo pero su hijo no le dirigió la mirada, tan solo segundos después lo vio salir del hospital mientras Greco se mantenía en su posición esperando a que el superintendente se acercará.

-Buenos días superintendente ¿Cómo se encuentra? – preguntó Greco una vez el mayor se acercó a su posición.

-De puta madre – contestó el super y mirando al interior de la habitación que horas antes le pertenecían al joven Horacio, pero encontrándola vacía - ¿Dónde está...? – preguntó un poco desconcertado.

-¿Horacio? – el superintendente tan solo asintió – a no se preocupe no huyó ni nada de eso – respondió Greco sonriendo y el super volvió a asentir aunque en realidad no era eso lo que le preocupaba – antes de darlo de alta la encargada del área de psiquiatría quería hablar con él – informó el inspector – ya sabe por lo de sus heridas y eso – lo último salió con una voz tan suave que a Conway le dieron escalofríos de tan solo pensar en todo lo que sufrió el chico – Volkov fue con él, parece que el chico se siente seguro con el ruso – confesó el barbudo como dato extra.

-Bien – comentó Conway y un silencio un tanto incómodo se creó entre ellos, si bien el super sabía desde hace bastante tiempo de la relación que mantenía el hombre con su hijo, respetando siempre la decisión de Gustabo, no podía negar que creó cierto coraje contra Greco por haberse aprovechado de su niño, por que como todo padre no creía que hubiera una persona digna de su criatura y que el de barba fuera 4 años mayor empeoraba un poco las cosas.

Por parte de Greco, de por si su jefe lo intimidaba un poco antes de estar en una relación con su hijo todo empeoró cuando su noviazgo se hizo algo formal, en un inicio intentó hablar de ello con Conway, a pesar de la poca relación que tenía padre e hijo, creyó que era buena idea dejarle a su padre en claro cuáles eran sus intenciones con el menor, pero su jefe se lo tomó a mal pues apenas comentó que se acaban de hacerse novios, Jack lo amenazó que si seguía en la oficina lo despediría, desde entonces no era capaz de mencionar algo relacionado con su noviazgo.

SERENDIPIA || VOLKACIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora