La vida de una Kamisama (Pausada)

~Cambios aparentemente irreversible~ part-2

-D-de acuerdo... *dije algo distraída y nerviosa desde el vestidor, pues solo quedaba yo con ropa*

Me empecé a desvestir pensando en una y mil cosas a la vez, sin percatarme de la realidad. Se abrió la puerta que separaba el baño del vestidor.

-Yuu-chan, ya estas? *dijo asomándose*

-Eh? *salí de golpe de mis pensamientos y mire a Ghinro* N-no... Aun no mires!

La lance mi toalla a la cara y esta cerró la puerta riéndose, cubrí mi cuerpo desnudo con la toalla, respire hondo y entre al baño. Ghinro ya estaba metida en la tina, el agua la cubría hasta los hombros. Me miraba feliz.

-Venga metete a la tina Yuu-chan *extendió su mano hacia mi*

-Vale... pero cierra los ojos *me agarre a su mano*

Ella accedió e inmediatamente los cerró, me quite la toalla y entre a la tina sentándome entre las piernas de Ghinro.

Para bañarse había escondido sus colas. Abrió los ojos y me tumbo en su pecho, ahora mas blandito, me abrazo por la cintura y me beso en el cuello.

-G-Ghinro... *dije mirándola*

-Pe-Perdona... *bajo la cabeza y me aparto con intenciones de levantarse* N-no.. quería...

-No te levantes *la abrace con fuerza* no me molesta en absoluto que te veas como una mujer!!

-Pero es extraño! *me dijo mirandome a los ojos*

-Pero yo te amo! Te veas como te veas!! *la di un corto beso en los labios*

-Yuu... chan... *se dejo caer en el agua*

Se volvió a sentar más calmada, en su cara volvió a aparecer una amplia sonrisa, yo me tumbe en su pecho, feliz, mientras sentía como ella me acariciaba el pelo. Estuvimos así un rato hasta que fue hora de empezar a lavarse.

Ghinro salio de la tina y se sentó en el banquito, cogió el gel y se empezó a enjabonar el cuerpo, mis mejillas se sonrojaron al mirarla, mi mente no podía parar de pensar en como se vería cuando volviera a ser un hombre... sera posible que tenga una mente pervertida.

-Yuu-chan *me llamo la rubita* sal de la tina para que pueda enjabonarte

-T-tu me enjabonaras?.. *le pregunte sonrojada*

-Si tu quieres...

Queria, pero mi vergüenza no me dejaba levantarme. Ghinro se acerco a mi y me ayudo a salir de la tina. Me senté en el banquito y la ojiazul se echó en las manos gel y empezó a enjabonarme la espalda. Sus manos finas y cálidas acariciaban con suavidad mi piel, cerré un poco mis ojos disfrutando de aquellas caricias. Me echo hacia atrás posandome en sus pechos, pasaba sus manos por mi abdomen, hasta que se detuvo.

-Que ocurre?..

-No te asustes, de acuerdo? *me susurro al oído*

Asenti con la cabeza, me beso en el cuello mientras subia sus manos lentamente por mi tripa, se sentía bien hasta que, sentí algo extraño y nuevo para mi, que me hizo arquear la espalda hacia delante. Grinro estaba masajeando con suavidad mis pecho...

-Ha-haa... Hahaha..

-Que tal se siente? *me pregunto al oído*

-Pa-para.. se si-siente extraño...

-De acuerdo.. *me beso en la mejilla*

Mientras que ella buscaba el champú yo termine de enjabonarme lo otro, aun sonrojada como un tomate. Después la rubia me lavo el pelo jugando con él, mas tarde cogió el champú nuevamente para enjabonarse ella.

-Espera, yo quiero lavar tu pelo *dije quitándole el champú de las manos*

-G-gracias... *asintió con la cabeza*

Su cabello no había cambiado en absoluto seguía pareciendo finos hilos de seda de oro, era tan suave y sedoso...

Mientras, ella terminó de enjabonarse, para después enjuagarnos las dos juntas, con la manguera, como dos niñas pequeñas en el día del agua.

-Yuu-chan, ven aquí! *grito Ghinro apuntándome con la manguera* No te vas a escapar!

-Kya~! Socorro! *decía entre risas, corriendo por el baño*

Cuando terminamos nos fuimos las dos juntas a mi habitación, envueltas hasta la cara con las toallas, aun riéndonos por culpa de aquellas tonterías a la hora de quitarnos el jabon. Mientras Ghinro secaba mi pelo, yo buscaba un kimono para ella, pues aunque fueran sus kimonos ahora era una chica y se le veían mal sus kimonos masculinos.

-Ponte este rojo *le saque uno que yo casi no usaba pero que a ella le quedaría genial*

-Tu crees... *dudo un poco y cogió otro kimono* de acuerdo, pero tu te podrás este azul aurora.

-Hm.. Trato hecho *dije feliz*

Nos pusimos los kimonos, las dos nos veíamos hermosas, nos peinamos mutuamente, Ghinro me hizo una corona de trencitas y yo a ella le hizo una coleta pequeña con el resto del pelo suelto y se la trence. Ya listas bajamos a ver si los pequeños espíritus habían vuelto y a preparar la cena para todos.

(Listo me tarde bastante en escribirlo pues no quería que fuera yuri del todo, pero quería mantener el romance entre ellos, después de todo yo apoyo a las parejas homo y no me hubiera importado convertirlo en yuri, yo lo e escrito asi pensando en los lectores. Espero que les haya gustado, voten, comenten y compartan pliz n.n)