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Caída.

— Mami.

—¡Cariño! ¿Cómo has estado? ¿Muy atareado, verdad?

Sí, las tareas.

Y los problemas.

—De hecho, sí, tenemos demasiados coloquios—Expliqué— Lo bueno es que las veré hoy en la noche... Solo llamaba para preguntarte si debo llevar algo.

Ella hizo soniditos raros,  jamás perdía la costumbre.

—¡Trae una sprite!

—Mamá Lisa la odiaㅡ Recordé, reparando en las diferencias entre ellas y esbozando una sonrisa.

—Ah, no te preocupes, dijo que venía con ganas de todo menos de beber cosas suaves. Los extraño mucho~ ¡Ya quiero verlos!

—Yo también... Bien, debo colgar ma, nos vemos.

—¡Nos vemos! ¡Besitos!

Colgué.

Mi hermosa familia, hoy en la noche vería a mis mamás como pocas veces.

Aún seguía cansado, mental y emocionalmente, pero teníamos todavía dos pruebas de educación física y me daba miedo lanzarme desde la cúspide de una iglesia.

Lo último fue broma.

O no.

—¡A la cancha!— Gritó el entrenador Seo.

La mayoría fue corriendo, yo apenas y podía caminar por el dolor en mi costado. Odio esto. Tal vez no sería tarde para dedicarme a vender zanahorias.

—Pruebas de pista y pruebas de campo, se dividirán en los siguientes grupos. 150 metros;  Ham Wonjin, Whang Yeji, Song Minjae, Koo Jungmo y Kang Minhee. Pruebas de campo...

Y dejé de oírlo, rechistando me acerqué al grupo de los nombrados. Me hubiese ido mejor en las pruebas de campo, quizá y se me caía el martillo por la cabeza, que suerte tendría.

Minhee me escrutaba con la mirada, mientras que yo  simplemente lo ignoré en todo momento.

—¡Hola! Mi nombre es Ham Wonjin, puedes decirme Wonjinnie, Wonnie o Daeji, pero no Wonjin. Me pone sensible que me llamen por mi nombre.

Habló demasiado rápido.

—Mi nombre es Jungmo— Me presenté—Te diré Daeji, puedes decirme... Jungmo— El asintió efusivamente.

Fuimos hacia la salida, los demás alumnos estaban en el centro con los elementos pesados, lejos de nosotros.

—Todos a sus posiciones — Me coloqué en el medio— Detrás de la línea, si se pasan es considerado nulo. Las reglas son no cruzarse de andarivel, no empujar al compañero, no salir antesㅡ Espetó en ultimátum.

Minhee estaba justo a mi lado, para mi mala suerte. Sentía su mirada muy fuerte y era molesto.

—A sus marcas. Preparados. Listos— Pausó por unos segundos, que ganas de hacerme desconcentrar— ¡Ya!— Disparó hacia el cielo.

Que miedo ¿Por qué tenía que correr? Era abrumador intentar ganarle a los atletas de mis compañeros. La idea de tener un perro llamado lechugas que viviese conmigo en el campo mientras cultivo zanahorias es tentadora.

Ya no quiero estudiar, Jungmo el verdulero próximamente.

Yeji, oh, Yeji ¿Por qué corre tan rápido? Me hace ver como un caracol. 

Estábamos doblando la curva cuando el idiota de Minhee se cruzó de carril, haciéndome trastabillar. Fuertes ganas de decir groserías me invadieron, por eso odiaba atletismo, siempre lo malo me pasaba a mi.

Caí tan fuerte que raspé mis codos.

Wonjin, quien venía corriendo, saltó por encima mío y casi me revienta el cerebro.

Nadie paró a ayudarme, no podían.

Quería golpearlo, se había vuelto insoportable últimamente. Parecía odiarme.  

Tenía tierra en mi cuerpo, ni siquiera me di cuenta de que al rodar salí de la pista, quedando regado por el campo. Me quedé mirando apenas el cielo, adolorido y con la cabeza dándome vueltas.
    
—Ouch, amigo, ¿estás bien? 

Solté un ligero sonido sarcástico, pero terminé por sonreír.

—Por supuesto, estoy descansando.

El chico rubio devolvió la sonrisa y me extendió su mano. Gracias a su fuerza, logró levantarme en cinco segundos.

—Gracias.

—Un placer ayudarte. Ven, el entrenador dijo que vayamos a la enfermería — Explicó, agitando una nota que traía.

Escuché los gritos de mis compañeros, aparentemente Yeji ganó la carrera.

Vi como Minhee se dirigía hacia Seongmin luego de terminar. Estúpido ¿ni siquiera le importó que por su culpa me haya caído y golpeado?

El chico que se hacía llamar por Allen, me dejó sobre la camilla, luego la bonita enfermera de cabellos rojos limpió mis heridas con agua oxigenada.

Tan hermosa y dulce. Debía de admitir que de chico tenía un crush con ella.

—Estás como nuevo, niño porcelana. Aunque parte de tu cuerpo está sonrosado por lo blanquecino que eres ¿tomas sol? Tomar algo de sol es bueno para la piel— Explicó a la vez que guardaba ciertas cosas en su botiquín.

—Gracias señorita YooA. Casi nunca lo hago, creo que me quedaré con aspecto fantasmal hasta el final de mis días— Bromeé y salí luego de despedirme.

Mi rostro ya estaba limpio.

Me sorprendí al ver a Allen todavía ahí, reposado sobre la pared.

—¡Ya saliste! Es bueno que estés bien, parecías un chorizo descuartizado en medio del campo— Dijo con expresión neutra, a lo que solté varias carcajadas.

—Si, después de todo el golpe de Minhee no fue tan brusco.

Comenzamos a caminar de nuevo hacia la siguiente prueba, Allen parecía querer decirme algo, pero tenía el presentimiento de que estaba buscando las palabras correctas.

Titubeaba de la forma menos discreta, por eso es que me di cuenta.

—¿Es tu mejor amigo?

Buena pregunta, muy repentina por cierto.

ㅡ Creo que sí, y creo que no.

Me causaba confusión esta relación, no tenía la seguridad de que habíamos roto completamente nuestros lazos, pero tampoco nos dirigimos la palabra hace ya tres días.

Es un nuevo récord.

—Larga historiaㅡ Agregué, como para que comprendiese que ni yo mismo sabía.

El asintió.

—Es loco... ¿No?

—¿Qué lo es, Allen?

—Que Seongmin utilice al chico para darme celos.