Un paso a la felicidad.

232 40 5
                                    

ㅡ¿Me escuchas?ㅡ La voz de su pareja lo sacó de un profundo trance del cual no se dio cuenta.

Trató de despabilarse y prestarle atención, así que asintió desinteresadamente, porque en realidad, no lo estaba haciendo.

ㅡ¿Quieres ir a la fiesta de Mako?

Para sus adentros hizo una mueca de fastidio y cansancio, no, claro que no quería. Pero siempre terminaba arrastrado de igual forma.

ㅡNo deongie, hoy no.

El contrario asintió lentamente, soltando un suspiro resignado, bebiendo el batido.

ㅡIré solo, entonces...

A Minhee no le importó, si su novio quería salir era libre de hacerlo, no fue ningún problema. Después de todo, últimamente las cosas le valían la mismísima mierda.

Al volver a casa quiso llorar. Se sentía tan solo, tan vacío. Y cayó luego en cuenta, su mejor amigo se sintió el triple de mal que él en su momento. Frotó con frustración su rostro, importandole poco el hecho de lastimarse con las pulseras.

Jungmo, Jungmo, Jungmo.

Su mente repetía una y otra y otra vez. Sentía una opresión en el pecho, estaba roto.

Después del beso habían pasado uno, o dos meses quizá, no sabía. Pero lo había visto por los pasillos y en clase, solo. Tenía un aura solitaria dentro del salón, la mayoría del tiempo su rostro era inexpresivo. Sin embargo, fuera se la pasaba con Wonjin. A veces con HyunSuk. Le molestaba que siguiera con él.

No sabía qué hacía, con quién, si estaba bien, si comía bien, si estaba sano, no sabía nada de su presencia.

Y debía admitir que su relación con Seongmin iba mal. Minhee no lo quería a su lado, Seongmin tampoco. Entonces, ¿qué era ese círculo entre ellos?

Se había dado cuenta, era un imbécil. No hay palabra que describa la clase de persona que fue. Pero, su consuelo, es que para ese momento se había dado cuenta. Nunca sintió nada por Seongmin, no se asimilaba a sus sentimientos por Jungmo. Nunca sintió amor, tan solo admiración y atracción. Jungmo no era como Seongmin, y pese a que sentía cariño por él, no podía fingir más.

En realidad, nunca estuvo enamorado de él. Era tan solo una máscara ante la negación. El Minhee de antes no aceptaría estar enamorado de su mejor amigo, pero el de ahora, quería gritarlo. A pesar de ser demasiado tarde.

A pesar de que se dio cuenta tarde del amor que siempre recibió y la miseria que dio. A pesar de todo y todos, él se dio cuenta.

Amaba a Jungmo.

Y lo había hecho sufrir tanto que, el perdón no era suficiente, el perdón no lo sanaba todo, y tenía miedo. No podría con él, con sus demonios y pecados que le gritaban que por su culpa, había destrozado a alguien que amaba. No podía.

Era tan grande la culpa, que sintió sus ojos sangrar del llanto, ya no podía.

Quería huir, y huiría como un cobarde.

Minhee ya lo había perdido todo. Huiría sin más.

Esperando aunque sea, madurar lo suficiente para volver a él, para decirle todo lo que sentía.

Su epifanía le había dejado en claro todo lo que hizo y todo lo que debía hacer. Era cuestión de tiempo.

he ✧ minimo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora