It Made Me Think Of You // Supercorp AU

Epílogo

Lena

Tres años después...

—Dios mío —murmuro, con la boca llena de crema de vainilla, fresas y pastel de limón.

—Todavía me gusta más el chocolate —proclama Kara.

—Bueno, absolutamente podemos hacer diferentes capas, un sabor para casi todos —dice Julian, uno de los propietarios de la pastelería más exclusiva de Los Ángeles y el casi ganador de la competencia del Reality show, Cake Clash, solo hace pocos meses.

—Bueno, tendremos que tener vainilla para tu padre —declara Kara.

—Y terciopelo rojo para tu mamá —agrego.

—¿Cuántas personas dijeron que iban a estar en la recepción? —pregunta el pastelero.

—Los invitados confirmados están actualmente en ciento ochenta y siete —informa Barry, nuestro planificador de bodas.

Julian asiente y saca un bloc de dibujo. En cuestión de segundos, ha elaborado este pastel de cinco niveles, y nos dice:

—Este tamaño alimentará hasta trescientos. Por supuesto, la capa superior no se come.

—No hasta su primer aniversario —interrumpe Barry.

Julian continúa diciéndonos qué sabor tendrá cada una de las capas.

—Y para el chocolate con chocolate y chocolate —dice con un brillo en los ojos—, podemos hacer que sea el pastel de la novia. No todos hacen un pastel de novias, pero sin duda es una opción.

—¡Diablos, sí! —acepta Kara.

—Creo que lo tenemos, entonces —declara Barry.

Nunca he estado tan emocionada. No puedo evitar recordar cuando Diana estaba tan entusiasmada con la degustación de pasteles, y una parte de mí estaba triste porque le había roto el corazón como lo hice. Sin embargo, lo superó bastante rápido y se casó solo nueve meses después de que me fuera. Por supuesto, su vestido no era del tipo ajustado que había planeado para nuestra boda, especialmente porque ocultaba una barriga floreciente en su segundo trimestre. Estoy segura de que su padre estaba muy orgulloso. Se casó con Steve Trevor, un prometedor senador en la arena política, y, francamente, los dos son perfectamente adecuados el uno para el otro. Al menos según la página seis de The Times.

Kara y yo no fuimos tan rápidas para llegar allí, a una propuesta de matrimonio. Pude trabajar de inmediato en la película con Decker, cuatro meses de filmación, dos de los cuales fueron en Irlanda (De lo cual estaba tan emocionada) La primera película lanzada solo ocho meses después y fue un éxito de taquilla instantáneo.

Gracias a Dios, porque ya habíamos filmado la secuela. Y Kara estaba locamente ocupada con su nuevo papel como editora. Ha sido divertido verla asumir los desafíos y verla crecer. Finalmente, hace cinco meses le pedí a Kara que se casara conmigo. Hice la pregunta en la fiesta posterior a los Oscar organizada por la revista Catco, justo después de ganar el Oscar a la mejor actriz secundaria. La emoción de mi estatua de oro ocupó el segundo lugar de la felicidad que sentí cuando Kara dijo que sí.

Inmediatamente nos pusimos en marcha planeando nuestro gran día. Elegir la fecha, el lugar y la lista de a quién invitariamos. Padrinos de boda. Flores. E incluso sabores de pasteles.

Cuando salimos de la pastelería, Barry nos recuerda la cita para la floristería en dos semanas.

—Y tengo noticias fabulosas —dice, prácticamente lleno de orgullo—. A Anton Max le gustaría diseñar sus vestidos de etiqueta.