It Made Me Think Of You // Supercorp AU

Capitulo Cinco

Kara

Paso la próxima semana conociendo las oficinas de Catco. Quién es quién, y las páginas web intracomunitarias para comunicaciones, y dónde encuentro mis asignaciones de trabajo, etc. Los días son rápidos y largos, pero estoy en la luna con mi nuevo empleo. En mi primera semana, ayudé a elegir las tomas que había tomado del desfile y ayudé a organizar el diseño, pude hacer una sesión de prueba para una serie sobre nuevas tendencias de calzado para una diseñadora de alta gama, así como una sesión en el estudio con cuatro modelos internos para las nuevas tendencias de camisetas. Hay peluqueros y maquilladores. Tengo equipos a los que llamar para gestionar las luces. Cuando compartí mi idea de un juego simulado para la sesión de zapatos, un equipo lo construyó para mí. ¡Durante la noche! Soy como una niña en una tienda de golosinas.

Y si fuera posible, el fin de semana es más emocionante que el trabajo de estudio. Grabo dos shows más antes de la Semana de la Moda y una de las reporteras del personal me reserva para ir con ella a filmar un acto de música en un club nocturno.

Cat aparece con curiosa regularidad, mirándome como un halcón. Al principio, me preocupa que estoy usando demasiado a los diversos empleados o algo así, pero todos me aseguran que ese no es el caso. Casi siento que Cat está haciendo todo lo posible por hacerme sentir bienvenida. Aunque, eso es mejor que la alternativa.

Estoy terminando una sesión con dos modelos calientes que muestran sus increíbles dotes, cuando —sorpresa, sorpresa— Cat aparece. Tal vez me esté vigilando mientras trabajo con los chicos, asegurándose de que no me estoy comportando como la chica que fue despedida.

—Está bien, chicos. Creo que obtuve lo que el cliente necesita. Estuvieron geniales —les digo, teniendo mucho cuidado de sonar completamente profesional.

—Buen trabajo —dice Cat, dándome un toque en el hombro.

—Gracias. Me encantan las cosas aquí—respondo y me alejo de Cat para empacar mi cámara y lentes en su estuche.

—Bueno. Nos gusta tenerte aquí. ¿Estás lista para la próxima semana?

—¿La Semana de la Moda? ¡Será mejor que lo creas!

—Excelente. Te conseguí el acceso al backstage que querías.

—¡Estupendo! ¡Gracias!

—Cualquier cosa que necesites —responde, subrayando cualquier cosa, su voz un poco más baja que antes. El teléfono de Cat suena y mira la pantalla—El deber llama —dice un poco triste. Toca mi hombro de nuevo, me da un buen apretón y luego arrastra su mano por mi brazo antes de irse. ¿Acaba de checar mis bíceps? ¿Me está probando para ver si soy gay? ¿Verificando si me estremezco con el contacto femenino? No es una mujer fea. No por mucho, pero ella es mi jefa. Y no soy gay. Por otra parte, tal vez estoy leyendo mal las cosas.

Tan pronto como Cat sale del estudio y la puerta se cierra, Brainy, el chico de la iluminación comienza a reír.

—¿Qué?

—Parece que alguien ha inspirado a Cat a volver al juego.

—¿De qué estás hablando? —pregunto con una risita nerviosa, tratando de sonar casual sobre las cosas, no asustada por lo que Brainy sugiere.

Brainy deja de doblar el cable que está enrollando.

—Parece que Cat te está coqueteando.

—Cállate —me burlo, haciendo mi mejor esfuerzo para no sonar ofendida—. Quiero decir, no me ofende, pero...

—Sin faltarle el respeto. Quiero decir, eres gay, ¿verdad? Al menos esa es la palabra que circula.

—Correcto. Quiero decir, sí —respondo con la mayor confianza posible, encogiéndome de hombros como si no me importara. Y no lo hace. Realmente no.