It Made Me Think Of You // Supercorp AU

Capítulo Veintiuno

Kara

Todo mi viaje de regreso a Brooklyn transcurre en un montón de pensamientos. No soy realmente gay. No soy realmente heterosexual. Aparentemente, solo quiero estar con Lena. Pero eso es un callejón sin salida. Ella está con Diana. Finalmente me convenzo de que con el tiempo superaré a Lena y tal vez comenzaré a ver a Gayle después de la mudanza. O alguien más. Tal vez me convierta en monja.

Empacar tu vida es algo extraño. Estoy cada vez más entusiasmada con la idea de mudarme a California, pero pasar por los diez años de cosas que he acumulado en mi apartamento en Brooklyn es un viaje y medio.

Lo más alarmante es que casi todo me recuerda a Lena. Desde la estantería que me ayudó a construir, hasta los boletos de películas a las que habíamos ido juntas...incluso una estúpida botella en el que Lena y yo nos embarcamos el fin de semana que se mudó a la ciudad.

¿Cuándo terminará? No tengo idea, solo sé que tengo dos semanas hasta que comience mi vida en Los Ángeles. Dos semanas para pasar mí tiempo en Nueva York.

La pregunta es, ¿llamo a Lena e intento arreglar las cosas? ¿Ayudará?

*****

Lena

Sentada en la sala de llamadas para mi audición el jueves, nada puede matar mi zumbido. Sí, estoy rodeada de otras seis chicas que podrían pasar fácilmente por Rose, la protagonista. Claro, reconozco a un par de chicas de algunos trabajos de televisión. Pero tengo este en la bolsa. Lo sé. Tengo mis líneas, pero ni siquiera las reviso. Tengo todos los matices de la escena memorizados.

Una por una, las chicas son llamadas, todas saliendo más nerviosas que cuando entraron...pero no dejo que me afecte.

Finalmente, escucho:

—Lena Luthor.

Sigo a la chica linda y nerd a la sala de audiciones.

La sala me pone los nervios de punta al instante, ya que no solo hay tres cámaras configuradas para filmar la audición, sino que Chloe Deker está en la mesa con otro hombre y una mujer. ¿Es habitual que la directora, especialmente una tan famosa como Chloe Deker, esté en una audición de primer nivel? Rápidamente descarto los nervios, recordándome lo preparada que estoy. He estudiado las líneas, la directora y su trabajo. Estoy lista para esto.

—Gracias por venir, Srita. Luthor—dice la Srita. Deker

—Gracias por recibirme.

—Vamos a hacer una rápida sesión. Mira a la cámara de la izquierda aquí. Indica tu nombre y edad.

Me vuelvo hacia la cámara y hago mi mejor esfuerzo para parecer relajada y confiada y luego digo:

—Soy Lena Luthor, treinta y dos años—Espero un latido más mientras veo que el operador de la cámara manipula el dispositivo y observo que está volviendo a enfocar para tomar mi foto de cuerpo completo, luego vuelve a disparar.

—Perfecto. Mi asistente, Dan, leerá la parte de Mason. Estás enamorada. Profundamente enamorada. Tienes ojos solo para él. Él se va de la ciudad y no quieres que te deje —instruye.

Había estado practicando estas líneas con una intención similar la semana pasada, pero mientras Deker resume la escena, todo lo que puedo imaginar es a Kara.

Yo. Enamorada de Kara. Ojos solo para ella. Se va y no quiero que me abandone.

La realidad irónica del arte que imita mi propia vida me golpea en el estómago.

—Bueno. Cuando estés lista —susurra Deker dramáticamente.

Asiento y respiro hondo, aguanto un momento y luego lo dejo salir mientras caigo en el personaje. Pretendiendo que Dan/Mason es Kara.

*****

Estoy hecha pedazos por el resto del día.

¿Cómo podría haber desempeñado la audición de esa manera? No. Estoy Enamorada. De. Kara

Hago todo lo posible para sacar la audición de mis pensamientos, pero no tengo mucho éxito en hacerlo. Curiosamente, siento que la audición fue lo suficientemente bien. Siento que es la mejor audición que he hecho.

Pero cómo... ¿por qué tenía a Kara en mente? Me convenzo de que es la historia. Pero debería haber tenido a Diana en mente. Nos vamos a casar.. Y no siento nada por Kara. ¿Qué carajo?

Esa noche, acurrucada en el sofá mirando una película con Diana, de repente estalla.

—¡Oh, claro! —Y corre hacia la puerta principal, regresando un momento después—. Te conseguí esto —chilla, entregándome una caja larga y delgada y recostándose en el sofá.

—¿Qué es esto?

—Un regalo —Sus ojos bailan alegremente mientras le quito la caja—. ¡Ábrelo!

Cuando lo hago, encuentro una corbata de seda blanca brillante.

—Para tu traje, de la boda —explica vagamente.

Toco los extremos puntiagudos... con la forma de la que Kara me había atado. De repente, es como si estuviera en su desván hace dos semanas con ella atándome la corbata. Un momento tan íntimo... ella atándose también esa corbata.

—Parece que te gusta —Diana frota su mano sobre mí. —Ha pasado más de una semana desde que...ya sabes —ronronea Diana.

Sí. Lo sé. Más de una semana desde que tuvimos sexo. Y era lo último en el mundo que quería. Con ella de todos modos.

Trato de controlarme mientras Diana me desviste y se deslizaba hacia abajo para llevarme a su boca, se sentía tan mal. Peor que eso es que la única forma en que puedo seguir así es recordar la boca de Kara en mí. Y mi boca en ella. Yo follándola.

Y ella follándome.

Estoy tan jodida.

*****