Caminamos bajo la atenta mirada de la luna en un completo silencio. Su mirada se enfocaba en la oscuridad del cielo y las estrellas que lo iluminaban.
— No creí que fueses el tipo de tía que admira las estrellas por la noche— dijo sin detenerse.
— ¿Y qué tipo de tía creías que era?
— Alcé la vista encontrándome con su mirada y pude apreciar como sus ojos azules brillaban de una manera especial a la luz de la luna— El tipo de tía de nuestra edad.
—Reí— La mayoría no se molestan ni en prestarle atención a lo que nos rodea.
— Alzó la vista al cielo— Cada día se nos brinda una de las muchas maravillas de la noche y la mayoría no saben apreciarlo.
Se detuvo y con un movimiento rápido se sentó sobre la arena. Hice lo mismo sentándome junto a él y me enfoqué en las olas del mar.
— ¿Por qué te has cambiado de instituto?— pregunté al reparar en ello.
— Dejó escapar un leve suspiro— Nos mudamos.
Parecía que hablar de ello le molestaba así que decidí cambiar de tema.
—Desde que hemos venido a aquí no ha habido momento en el que no estuvieses escuchando música,—sonreí— ¿Qué sueles escuchar?.
—Soltó una breve carcajada y se tumbó sobre la arena— ¿Te suena de algo Arctic Monkeys?
—Sonreí al escuchar aquello— Una de mis canciones favoritas es de ellos.
— Volteó a mirarme incrédulo—¿Cuál?
—Why'd you only call me when you're high.
— No está mal Ashley
—Aunque creo que prefiero la de I wanna be yours.
—También es una de mis canciones favoritas— se sentó nuevamente con su brazo sobre una de sus rodillas y me miró con aquella sonrisa divertida suya que comenzaba a destacar en él— Tampoco creí que escucharias canciones de ese estilo.
—Solté una carcajada y me incliné hacia él— Déjame adivinar, ¿creías que mi estilo de música se ceñía al reggaeton y al trap?
—Asintió— Me estás sorprendiendo Ashley
— Yo no puedo decir lo mismo de ti Blake.
— Su expresión se tornó sería—¿Y eso por qué?
— Desde que te vi supe que eras diferente,—sonreí y volteé a ver la arena— y se ve que no me equivoqué.
— Al escuchar aquello su rostro se relajó y nuevamente una sonrisa se dibujó en él— ¿Y no ser como el resto lo consideras bueno, Ashley?
— De la manera en la que tú lo eres sí, al menos es lo que puedo decir por ahora—Lo miré y vi como una sonrisa se dibujaba en su rostro.
— Buena respuesta, pero tendrás que conocerme para poder afirmarlo.
— Sonreí— Entonces tendré que seguir conociéndote.
— Eso parece— se tumbó en la arena e hice lo mismo.
El silencio nos envolvió de nuevo. Y nos mantuvimos de esa manera, observando las estrellas y la oscuridad que las rodeaba durante varios minutos más.
— Theo se incorporó obligándome a hacer lo mismo— Mañana tendremos que madrugar,—rodó los ojos— la propuesta de Alison para ir a la playa.
ESTÁS LEYENDO
La Melodía De La Noche
RomanceEllos dos disfrutaban de la oscuridad de la noche, de la paz que les brindaba y de su silencio; el habitual silencio que solía incomodar a la gente se convirtió en su melodía favorita