CAPÍTULO 23

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-Estas bien?...-noto la preocupación en su voz...en el aura de mi amigos en si- Estas segura? puedes hacer esto ahora?

Mi corazón está por salirse de mi pecho de lo acelerado que está en este momento. Mis piernas tiemblan como gelatina, y creo que estoy clavando mis uñas en los brazos del pobre Camilo de lo fuerte que sujeto su brazo...

Hace unos días, luego del picnic en el parque con María y su familia. Cuando volvimos a trabajar esa misma noche, Jonh nos tenia buena noticias.

La compañía Morales celebrará la inauguración de un centro médico que ellos hicieron para ayudar a los que no tienen hogar y fueron afectados por las bajas temperaturas del invierno y demas.
Obvio no perdimos oportunidad. Cada familia tiene una invitación, así que no es necesario infiltrarse...Aun que eso sería más divertido, pero que más da...__
Vamos en representación de nuestras familias, pero nuestro principal objetivo es conseguir información, la investigación...Y Julián.

Estamos frente la entrada de la clínica. Son al rededor de las 13:50pm. En unos minutos harán la ceremonia de cortar la cinta que está puesta a unos centímetros de la puerta principal y luego se pasará adentro para que podamos ver las instalaciones, después creo que habrá una pequeña fiesta.

-Esta ida...es mejor llevarla a casa.-Hana se pone a mi lado y me saca los lentes oscuros que me puse para tapar un poco mi rostro.

-No iré a ningún lado- salgo de mis pensamientos y la miro fijo- Estoy bien...-suspiro, le quito los lentes y vuelvo a ponermelo.

Estamos a un costado viendo como ya parecen haber llegado todos los invitados y la prensa, que estuvo aquí mucho antes que todos nosotros, como siempre.

Mis amigos están a mi alrededor, no se alejan de mi ni por un momento. Temen que me vuelva a pasar lo que me pasó en la fiesta de mis abuelos, cuando vea a Julián de nuevo.
Pero está ves estoy decidida, me determine a no flaquear como esa ves. Tengo que ser fuerte, tengo que poder siquiera verlo a los ojos.
Ya no puedo seguir huyendo, o derrumbandome cada ves que lo vea o sepa serca. No puedo, no debo, no quiero.

¡No quiero!

La ceremonia da comienzo y en nuestro campo de visión aparece el mismísimo Tristán Morales. Y digo asi por que el no suele ir a muchas galas...en si sólo aparece en público cuando se trata de su imagen y la de su compañía.

Tristán Morales, 52 años de edad, altura aproximadamente 1.90, cabello negro como el carbón, cuerpo tonificado y rostro bien masculino, intimidante y neutro...
No se sabe casi nada de su vida antes de que se casara con su ex esposa, madre de Julián, quien falleció hace 18 años. Luego de eso, se volvió a casar con su actual esposa, con la que tiene dos hijos, una hija cuyo nombre es Sofía Morales y un hijo del cual no hay muchos datos ni fotos, pero por lo que pudimos conseguir, gracias a nuestros contactos importantes, es que se llama Mateo Morales.
Después no hay fotos, ni nada que pueda decir que el joven tenga contacto con su familia.

__Tal ves sabe lo loco y psicópata que es su medio hermano y huyó...No lo culpo__

Junto a él sube una mujer, Emilia Morales, 45 años. Altura aproximada __sin tacones__ 1.75, melena rubio ceniza y  buen físico. Rostro bien definído.

Muchos papeles de esa familia parecen estar alterados. Ya que no hay mucha información de su pasado, sólo desde hace 18 años en adelante, y muy poco. Muestran sólo lo que quieren mostrar.

Hacen todo el discurso delante de los invitados y la prensa, sacan todas las fotos necesarias para que mañana a primera hora aparezcan por las noticias, diarios y revistas de todo el país y los alrededores.

Misión; Corazon Que Late ( Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora