➹Epilogo➹

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El marcador del tablero indicaba 180 Kilómetros por hora y yo sentía que iba a no más de cuarenta. Siempre mantenía la calma en las misiones, pero hoy no me lo podían pedir, mejor que ni se atrevieran a decírmelo, porque era capaz de arrojarlo por la ventana. 

Yoongi: - Eri vamos bien de tiempo, alcanzaremos a llegar pero si no bajas la velocidad la policía se sumara a la persecución, y allí seguro no llegaremos.- 

- ¡COMO CARAJOS JUNGKOOK DEJA QUE LARA CONDUZCA!.- Me queje indignada.

Yoongi: - Se lo prometió si ella volvía a caminar sin ayuda, ahí tienes las consecuencias.- Bufo Yoongi al mismo tiempo que yo.

El auto conducido por Lara que iba delante de mi serpenteaba entre la fila de autos frente a nosotros y yo solo podía imaginar la cara de horror que debe llevar Jungkook a su lado. Y es que es su culpa por cumplirle cada capricho a su novia. 

Yoongi: - ¡Mierda! entro en la calle de sentido contrario.- Yoongi me miro a los ojos y solo lo escuche decir.- Ni lo pienses Eri, ni se te ocurr...-

Voltee el volante todo lo que daba a la izquierda y entré en la misma calle de sentido contrario que Lara. Eso nos daría varios minutos y kilómetros de ventaja. 

Llegamos a nuestro destino y todos bajamos de nuestros respectivos autos, estoy casi segura que tanto a Yoongi como a Jungkook le tiemblan las piernas en este momento. 

Lara: - Si alguno necesita vomitar ahí hay un árbol.- Dijo Lara y rio con burla, sabiendo como había afectado el que ambas fuéramos al volante. 

- Ya muevan el trasero que Woo no esperará a nadie.- Les riñe para que comenzaran a caminar. 

Subimos las escaleras a toda marcha hasta el piso seis, ya que los ascensores estaban todos llenos, casi corrimos por el pasillo hasta que divisamos a Adalia y Taehyung en medio de este.

Taehyung: - Imagino que los dos autos a casi doscientos kilómetros por hora y en sentido opuesto al transito que reportaban los policías en la radio eran ustedes.- Nos comento el chico apenas llegamos a su lado.

Lara: - Tan inteligente mi cuñado.- Lara le sonrió y le apretó las mejillas a Taehyung. 

Jungkook: - Esto es algo de lo que no quiero volver a hablar, ahora a lo que vinimos por favor.- 

- Ada ¿Cómo esta ella? alguna noticia?.- 

Adalia: - Aun nada, esto puede tomar tiemp...-

Enfermera: - ¿Familiares de Wang Mei?.- Interrumpió una enfermera tomándonos a todos por sorpresa.

- Nosotros.-  Dijimos al unísono. 

Enfermera: - Pueden venir conmigo. -

Caminamos tras la mujer vestida de azul, la cual nos llevaba hasta la sala de visitas. Allí nos encontramos con una gran vidrio y tras el una imagen hermosa y enternecedora, la más bonita que había visto hasta ahora. 

Hoseok cargaba a un pequeño bultito entre sus manos, al lado de la cuna que debía pertenecer a Jung Woo-Luhan. 

Una cosita tan pequeña que Hoseok podía cargarlo con una sola mano, pero este estaba tan concentrado en cargarlo de la manera correcta y sin lastimarlo, que se veía  como si de un tesoro se tratarse, Y lo era, claro que lo era. 

Hoseok camino hasta estar a un paso del cristal, y nos mostro a su pequeño hijo con toda la emoción y orgullo que podía sentir un padre al tener al fin a su recién nacido en sus brazos, el cual fue nombrado como el hermano menor de J-Hope. Era un bebe blanco como algodón, sus mejilla eran regordetas como las de su madre y una nariz fina y hermosa como la del padre. Tenia lo mejor de ambos. 

Clanes. (Re subiendo) terminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora