SEDUCIENDO A LA MUERTE +21 | YOONMIN |

Cap.11

POV SUGA:

Salí del lugar corriendo, todo estaba oscuro, parecía que nublaba dentro del hospital, no sabía si era real o no. Me dolía la cabeza por los fuertes zumbidos y los gritos de mi hermano repitiendo lo mismo una y otra vez.
Llegué hasta uno de los baños y me encerré en un cubículo, puse mis rodillas  en el suelo y abrace el inodoro para vomitar, vomité y vomité hasta que me dolió el estómago, pero no entendía el por qué.

—Bien, ya alguien sabe que eres un maricon.— Dijo ella poniendo sus manos en mis hombros —Vomita pequeño y asustado Yoongi, todo lo que estás vomitando es resentimiento.— Lancé una bocada de vómito

—Vete a la mierda.— Susurré —O te llenaré la boca de mierda.— Ella abrió su boca hasta romper su mandíbula

—Te gusta esconder tu sufrimiento en la grosería.— Soltó una fuerte carcajada —Alguien como tú no merece vivir, dime qué pensarían papá y mamá.— Acarició mi cabello —Estarían asqueados y deseosos de haber optado por el aborto.—

—CÁLLATE MALDITA PERRA DEL INFIERNO, HIJA DE PUTA, PROSTITUTA BARATA NACIDA DE LA MIERDA.— Empecé a lanzar golpes —Zorra parida por la coprofagia y la zoofilia.— No sabía de qué parte de mi cerebro salían esos insultos

Lucy apretó con más fuerza mi cabello e introdujo mi rostro en el inodoro lleno de vómito, me hundía hasta que ya no podía respirar y volvía a sacar mi rostro mientras repetía las palabras "Bastardo marica". Intenté salir de su agarre pero su fuerza era descomunal, pero qué se podía esperar de un demonio. Pasados unos minutos de sufrimiento ella desapareció.
Tomé fuerzas y me levanté del suelo, salí del lugar con la mirada baja y alguien me tomó del brazo. Ahí estaba Jimin con una expresión de confusión en su rostro.

—¿Qué ocurre Suga?, ¿por qué saliste a correr de esa manera?.— No dije nada, solo me quedé mirándolo —¿Hice algo mal?.— Las mariposas aun volaban a su alrededor y cuando me rozaban se sentía una caricia divina —Suga...—

—Iré a pedir permiso para ducharme.— Me solté de su agarre —Me siento algo sucio.— Al escucharme un puchero involuntario se formó en su rostro

—¿Sucio debido a mí?.— Lo observé de reojo

Salí de la escena sin decir nada más y me fui a mi habitación donde me esperaba Hwasa, juntos fuimos a las duchas y me duchó con una manguera a presión y agua helada.
Mi cuerpo quedó muy adolorido después de eso, pero ya no estaba sucio por las manos de Lucy. Me encerré en mi habitación y dormí lo que mi cuerpo pudo asimilar.
Tal vez ya era de madrugada y escuché que alguien estaba golpeando a mi puerta, me levanté para ver por la pequeña ventana y ahí estaba Jennie, sin preguntar abrí y ella entró de puntitas.

—Estoy pensando en suicidarme y no sé cómo hacerlo.— Dijo sentándose en mi cama —Necesito que me ayudes a escapar de éste sufrimiento, de verdad quiero morir.— Sus manos temblaban

—No te voy a ayudar a que te mates, matate tú sola.— Me crucé de brazos —No me metas en tus problemas, si tanto quieres morir busca la manera.— Me encogí de brazos —O lucha contra ello maldita cobarde.— Me senté a su lado

—Que irónico, un esquizofrenico diciéndole a una bipolar que luche por vivir.— Rió con tristeza —Ya no quiero luchar Suga.— Puso su cabeza sobre mi hombro

—Hazlo, nosotros los enfermos debemos luchar hasta para respirar sin enloquecer o caer en desesperación. Tú eres una chica linda, a las chicas lindas les va bien y pueden conseguir lo que quieran.— Giré mi cabeza un poco —O suicidate de una buena vez y  no ensucies las manos de los demás, hazlo tú sola.—

Ella se abalanzó sobre mí y me besó, se notaba la desesperación y rigidez en su acción, sus labios eran suaves como los de toda chica, pero si comparaba, los labios de Jimin eran más suaves y cálidos, el toque de la fría piel de Jennie no producía absolutamente nada en mí, pero el toque de Jimin me había hecho sentir un poco cuerdo por unos segundos. En ese momento me podía coger a Jennie sin quejarme pero a Jimin nunca le tocaría un pelo para tener sexo. ¿Qué es todo ésto?.