EVA
Cuando llegué a la habitación llamé a Samantha, necesitaba criticar a su hermano y no se me ocurría otra persona mejor con la que hacerlo que ella.
*LLAMADA*
Sam: sí? - respondió después de un par de tonos.
Eva: por qué preguntas si me tienes agregada? - siempre hacía lo mismo.
Sam: ya te he dicho que le da más emoción si no miro quién es - explicó.
Eva: y yo también te he dicho que el día que contestes a alguien que no quieras dejará de ser interesante.
Sam: toda la razón, pero hasta que pase lo seguiré haciendo, sobre todo si te picas tanto - soltó una carcajada - qué te hace llamar a tu mejor amiga a la cual tienes tan olvidada? - era cierto que estos últimos días no la había llamado mucho.
Eva: te recuerdo que soy una amistad ausente - me excusé.
Sam: una qué? - preguntó extrañada.
Eva: no te voy a mandar mensajes ni a estar llamándote siempre, pero eso no quita que esté para ti y te quiera.
Sam: ohhh - dijo enternecida - no he entendido el concepto pero yo también te quiero - dijo provocando nuestras risas - pero entonces, para qué me has llamado?
Eva: para hablar contigo.
Sam: sobre mi hermano, verdad?
Eva: pues sí, a que no sabes lo que ha hecho? - pregunté sin esperar respuesta.
Sam: te ha llevado a Córdoba junto a los niños con la excusa de las vacaciones y no le ha dicho a mi madre que ya no estábais juntos?
Eva: era una pregunta retórica - aclaré - y cómo sabes eso?
Sam: quién crees que tuvo la idea?
Eva: SAM - le grité - por qué?
Sam: le habrías perdonado en Madrid?
Eva: no, pero tampoco pensaba hacerlo aquí. Y menos ahora que sé esto.
Sam: las dos sabemos que en cuanto estéis los cuatro pasándolo bien te acordarás de lo bien que estábais y se te hará imposible seguir enfadada - dijo sin que le faltase razón.
Eva: bueno, te recuerdo que no fui yo la que quiso romper la relación.
Sam: todos nos equivocamos, o tengo que recordarte lo de Lucas? O cuando mentiste a Hugo durante dos años con el tema de la paternidad? O cuando le ocultaste tu embarazo?
Eva: no hace falta. Fue un error y Hugo me perdonó - me defendí.
Sam: exactamente, él te PERDONÓ - dijo haciendo énfasis en la última palabra.
Eva: y por eso yo también tengo que hacerlo? - pregunté indignada.
Sam: tú tienes que hacer lo que sientas, no lo que quieras sentir - me quedé tan ensimismada con la frase de Samantha que no me di cuenta de que Hugo había entrado a la habitación hasta que se puso delante mía y chasqueó sus dedos mientras me llamaba.
Hugo: Evaa - dijo chasqueando y volví de mis pensamientos.
Sam: ese ha sido Hugo? - preguntó Sam al escuchar su voz.
Eva: sí, tu madre ha tenido la maravillosa idea de que durmamos juntos.
Sam: pásamelo - pidió.
Eva: es Sam - le di el teléfono al rubio que se encontraba en frente.
Lo único que conseguí escuchar de lo que dijo Samantha fue: "como cuando volváis no te haya perdonado no dejaré que te quedes en mi casa" a lo que Hugo respondió con: " tranquila", luego Sam le dijo otra cosa a lo que el rubio le respondió que me llevaría.
Poco después colgó y me devolvió el móvil, se fue a poner el pijama, que consistía en tan sólo un pantalón, y al volver se tumbó a mi lado mientras yo le daba la espalda.
Eva: ya me ha contado Samantha vuestro plan - dije girándome para quedar enfrente suya, en una cama tan pequeña casi rozábamos nuestras narices - y que sepas que no va a funcionar - dije sonriendo.
Hugo: esa es tu opinión, lo que pase ya se verá - sonrió también y me volví a girar - que descanses preciosa.
Eva: igualmente.