EVA
Ya llevábamos una semana en Córdoba y no estaba yendo tan mal como había pensado. Todos los días íbamos a calas y playas con los niños y nos divertíamos mucho.
Las cosas con Hugo también iban mejorando, siempre estaba pendiente a mí y se comportaba genial. Cada día que pasaba me replanteaba perdonarle, pero como no estaba segura hablé con Sam para que me ayudase a elegir.
*LLAMADA CON SAM*
Eva: entonces, qué hago? - pregunté, llevábamos media hora hablando de Hugo y todavía no había llegado a una conclusión.
Sam: vuelve con él, pero aún no, deja que siga tratándote como una reina, que cuando te tienen dejan de tratarte así - dijo haciéndome reír.
Eva: eso voy a hacer. Tú qué tal estás? Se lo has dicho ya a Flavio?
Sam: todavía no.
Eva: y a qué esperas? Al final lo va a notar y se va a enfadar.
Sam: relaja fiera, que no me has dejado terminar. Voy a decírselo esta noche, vamos a ir a su restaurante favorito.
Eva: y ese ideón? Eso no se te ha ocurrido a ti sola eh.
Sam: que va. Te iba a preguntar a ti porque ya tienes experiencia, pero como no fueron buenas, le he preguntado a Anaju, que es la romántica del grupo.
Eva: ya decía yo que era demasiado bonito para ti.
Sam: bueno, habló la romántica, te recuerdo cómo se lo dijiste a Hugo las tres veces?
Eva: no, no hace falta - dije riendo - suerte.
Sam: igualmente, ponte guapa que a las 21h mi hermano te recoge - dijo antes de colgar y dejarme sin la opción de preguntarle sobre el plan de Hugo.
*FIN DE LA LLAMADA*
Pasé toda la tarde preparándome, estaba más nerviosa que la primera vez. No sabía qué ponerme, pero al final opté por un vestido de flores.
Como me había dicho Sam, Hugo llegó a las 21h, fuimos a mi restaurante favorito y luego a la cafetería en la que estuvimos después de conocernos.
Más tarde, dimos un paseo por el puente romano de Córdoba. No habíamos tocado ningún tema espinoso durante la cena, pues no queríamos montar un pollo en medio del restaurante si acabábamos mal. Pero durante el paseo, llegó el momento de hablar de lo que pasó.
Hugo: Eva, quería explicarte todo.
Eva: te perdono - le interrumpí.
Hugo: enserio? - asentí y corrió a abrazarme y besarme - pero Eva - dijo tras unos segundos.
Eva: Hugo, no hace falta, de verdad. Olvidémonos de todo.
Hugo: déjame explicártelo todo.
Eva: si tú quieres yo te escucho. Pero nada de lo que me digas me va a hacer cambiar de idea, te lo perdono todo, borrón y cuenta nueva.
Hugo: segura? - volví a asentir - bien. Todo lo que te dije es verdad, quería que me pillases con esa chica, pero justo antes de hacerlo me arrepentí. Por eso la escondí en el baño, el plan no era ese.
Eva: y por qué no me lo dijiste?
Hugo: porque me merecía que me dejases por haber pensado hacerte eso, pero cuando me enteré de que estabas embarazada todo cambió. Quise explicártelo, pero ya era demasiado tarde. Entendería que no quisieras verme más, pero tenía que decirte la verdad si quería volver contigo.
Eva: da igual.
Hugo: qué?
Eva: que no importa, te perdono eso también. Te arrepentiste, no? - asintió - pues eso es lo importante.
****
X: Eva Barreiro? - preguntaron al otro lado de la línea, eran más de las tres de la mañana cuando recibí la llamada.
Eva: sí soy yo - respondí medio dormida. De fondo se escuchaban sollozos, no sabía de quién pero me sonaban.
X: sus amigos han tenido un accidente, es usted el contacto de emergencia de Samantha Cobo y Flavio Fernández? - en ese momento se me fue todo el cansancio. Los lloros del fondo eran de Samantha y entre los sollozos se la escuchaba gritar el nombre de Flavio mientras le pedía que aguantase.
