Fool's gold

Capítulo 12

Harry está aquí. Harry está aquí. HARRY STYLES ESTÁ AQUÍ Y ME ACABA DE VER RECIÉN LEVANTADA, ESO NO ES BUENO.

Tomo algo de ropa de una de las valijas (porque todavía no he desempacado, vaga se nace, no se hace). No quiero que parezca que me estoy arreglando para Harry, pero tampoco pareceré una vagabunda frente a él. Así que tomo una sencilla camiseta blanca, un jean y unas vans.

Me ato el pelo en una cola de caballo, me da pereza esperar a que se seque, además no luce mal. De hecho, me lo lavé ayer. Dejo que la lluvia artificial recorra mi cuerpo, pensando qué tengo que hacer ahora. No quiero parecer una loca, pero se me hará bastante difícil actuar normal frente a él PORQUE ES HARRY STYLES, POR SI NO HA QUEDADO CLARO.

Salgo de la ducha, me seco y me pongo la ropa. Me lavo los dientes, nunca le encontré un sentido a lavarse los dientes antes de desayunar, pero quiero quedarme arriba la mayor parte posible, muero de la vergüenza. Me desarmo la cola de cabello y cepillo un poco mi pelo.

Ya es hora de bajar, no puedo retrasarlo más, aunque de verdad lo desee. Tomo una larga bocanada de aire, la saco de mi sistema y bajo las escaleras.

-¿Te bañaste? -Me pregunta Gemma. La sonrisa malvada otra vez en su cara.

-Eh... sí.

-¿Por qué tan nerviosa? -Ahora finge inocencia. La fulmino con la mirada. Harry observa la escena con una sonrisa pícara.

-Yo sé que es por mí -Interviene él intentando hacer un chiste y siento mis mejillas arder. Gemma estalla en carcajadas. Que me trague la Tierra -¡Qué tierna te ves cuando te sonrojas! -Me dice apretándome el cachete y quiero que la Tierra no solo me trague, sino también que me digiera.

-Tengo hambre -Es lo único que logro decir.

-¿Por qué no desayunaste antes? -Me pregunta Gemma confundida. ¿Enserio tengo que responder eso?

-Quería eh... bañarme primero -Respondo bastante nervioas y me siento a la mesa, donde Martha inmediatamente me sirve una montaña de waffles con salsa de chocolate encima y un vaso de jugo de naranja -Gracias -Le sonrío y desaparece por la puerta de la cocina.

-Entonces, Sam... -Dice Harry sentándose en frente a mí en la enorme mesa del comedor. No me animo a comer, sé que es una estupidez, pero me da vergüenza que me vea. ¿Desde cuándo te importa eso?

-¿Mhmm? -Pregunto.

-Cuéntame sobre ti -Me atraganto con mi baba, porque, como dije, no estoy comiendo nada. Harry me dedica una sonrisa hermosa y no hago más que sonrojarme de nuevo y bajar la vista.

-Eh... -Hago una larga pausa. ¿Qué se supone que tengo que decir? Digo, mi vida no es lo suficientemente interesante como para contarle eso -Me llamo Samantha, tengo diecinueve años, graduada con honores, me encanta la música, solo escuchar, soy pésima cantando...

-Eres americana -Me interrumpe -. Tu acento me gusta -Sonrío como tonta y bajo la vista de nuevo.

-...tengo una hermana y mi mejor amiga me dio la oportunidad de venir aquí.

-La chica tiene mi bendición -Bromea y ambos reímos.

Hay un silencio bastante incómodo, en el que yo no sé qué decir y Harry me contempla. Agradezco haberme bañado.

-¿Quieres hacer algo hoy? -Pregunta de la nada. Me atraganto de nuevo y lo miro con los ojos bien abiertos. ¿Harry Styles quiere hacer algo conmigo?

-Eh... sí, claro.

-Bien, te dejaré para que desayunes tranquila -Me guiña un ojo y sube las escaleras.