El Amor En Tiempos Del Fin Mundo

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A las seis de la mañana el sol seguía oculto, el sótano estaba en completa calma. Jennie seguía durmiendo entre los brazos de Lisa y ésta despierta, sintiendo el respirar calmado de la diva.

Era verdad que nunca hubiera pensado que esto se haría realidad, tenerla tan cerca de ella, ser su soporte en esos días de caos donde el futuro era incierto y cada día tenía que atesorarse, el presente era lo que debía de ser lo más importante… aparte de sobrevivir.

Acarició su cabello suavemente, teniendo el cuidado de no despertarla. Es aquí donde aplicamos el cliché de que Lisa descubrió entonces que ver dormir a Jennie iba a convertirse en una de sus cosas favoritas; pero, no podemos culparla ¿o sí? Es increíblemente placentero observar las facciones en calma, donde el cuerpo despide un calor que te recuerda a casa porque nunca podrías sentirte más en paz. Lisa bajó el rostro y olió su cabello, se apretó un poco más a ella y la morena hizo un gesto de querer despertar pero sólo se agarró más fuerte a la playera de la ex rubia y siguió con su ligero roncar.

No había prisa por levantarse, faltaba una hora para que los primeros rayos pudieran asomarse y después de todo, la resaca que pudieran experimentar no era la más amable a esa hora.

Con la mente despierta Lisa se dio a la tarea de pensar en lo que ahora les esperaba. Lima estaba casi desierta y habían tenido la suerte de no perder a ningún miembro del grupo, ninguno había salido realmente herido y Minho se había ahorrado el drama. Pero nada es para siempre y ella sabía que más tarde, cuando llegaran a los límites de la ciudad los peligros estarían a la orden del día, nadie tenía el pleno conocimiento de defenderse de los zombies, eran inexpertos en muchas cosas y era posible que no terminaran el viaje como lo habían empezado: vivos.

Se acercó más a quien estaba a su lado, perder a Jennie no era una de las cosas que pudiera concebir su mente, por eso se hizo la promesa de protegerla a como diera lugar, ella era su prioridad.

Recordó a su padre transformado y le dieron ganas de llorar, las cosas no tenían por qué haber sido así, pero todos eran víctimas de las circunstancias y en casos como este uno debe de estar hecho a la idea de que todo puede ponerse realmente feo. "Matarlo" no era algo que estuviera en sus planes, hubiera podido dejarlo, aventarlo como hizo con el vecino de Jennie encerrarlo en algún lado y dejarlo a su suerte, pero veámoslo de este modo: nadie quiere que sus seres queridos queden vagando por un mundo tan hostil como se había convertido este. Si creemos que parte de ser humano es tener alma, ¿qué pasaría pues con la de ellos? ¿Encontrarían paz? Es muy difícil averiguarlo, por eso era mejor no dejar ninguna conexión que pudiera anclar al alma con el plano terrenal.

¿Y si tuvieras que hacerlo con ella? No, no lo menciones siquiera, sería dificilísimo, imposible. No podría, no quiero perderla, sé que es casi irracional tener esta idea de hacer una vida completa con ella, todo lo que hubiera soñado si nada de esto hubiera pasado: hacer el amor, aprenderme sus gestos, esos que solo se reserva para la gente a la que le tiene confianza, regalarle flores o llevarla a una cita, incluso casarme, ¿por qué no? Son expectativas muy grandes, pero las quiero. Sin embargo Manoban, tienes que pensar en toooooodo aquello que pudiera pasar y tienes que estar consciente de que esta vida a la que se van a enfrentar no es tan sencilla como lo hubiera sido entonces, de hecho, de habernos ahorrado los zombies tu mayor preocupación hubiera sido aceptar tu relación con ella, sacarla a flote, que la gente lo supiera… ahora tu preocupación es llegar a donde deben de llegar y luchar por mantenerse vivas, sólo eso, sin sueños, no hay más.

Este lado amargo de Lisa no era lindo, como este lobo estepario que relataba Herman Hesse, siempre enseñando los dientes, negándote a la alegría y los buenos porvenires, pero ella sabía que estando con Jennie las cosas estarían bien, que una sacaría fuerza de la otra para llegar juntas al destino que ahora les estaba preparado.