Juguemos un juego

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—¿Qué hay de tus calificaciones? Háblame de tu universidad —, Jungkook se quita la chaqueta y camina hacia el sofá en el centro de la sala de estar. No le gusta venir a su mansión, ya que se tarda media hora en llegar desde el centro, y esto requiere mucho tiempo. En general, un edificio de tres pisos con un gran patio y una piscina aburre a Jungkook. Pero Jimin vive aquí, la única persona en este universo a quien ama de verdad el jefe de la Segunda Casa.

—No digas que viniste a este desierto solo para preguntar por mis lecciones—, bufó el omega sentado en una silla frente a él.

Es mediodía y Jimin acaba de despertarse. Se sienta en una silla en pijama y despeina su cabello ya enredado.

—Reese dice que empezaste a saltar lecciones otra vez—, Jungkook arquea las cejas y mira a su hermano con atención.

—¡Reese, Reese, Reese! Tu perro me cabrea. Todo lo que puede hacer es informarte —, dice el Omega indignado.

—Es su trabajo—, dice Jeon con calma. —Sé un buen chico, no me enfades y deja de andar con los alfas. Todavía eres un niño.

—¿Un niño?— exclama Jimin. —Tengo diecinueve años y tu perro me está mirando. Quiero tener citas, quiero divertirme, no me permites nada. Escriben sobre tus fiestas en las noticias, ¡pero yo vivo en la cárcel! ¡Te odio!— el omega ofendido se pone de pie y camina hacia la cocina.

—ChimChim—, le llama el alfa. —Entonces no actúes como un niño. Ven a mí.

—¡De ninguna manera!— el omega gruñe.

—Te atraparé—, se ríe Jungkook.

—Lo harás—, Jimin suspira fatídicamente y va hacia su hermano. Un omega con una expresión de dolor universal en su rostro se sube al regazo de Jungkook y le permite enterrar la nariz en su cabello.

—Estoy preocupado por ti—, dice el alfa en voz baja. —Eres todo lo que tengo. Por lo tanto, tengo que ser muy estricto, pero te lo prometo, tan pronto como haya un alfa decente, solo lo obedecerás.

—¿Cómo se le puede encontrar si no me permites reunirme con alguien, salir a citas?—, Jimin vuelve a indignarse.

—Todo tiene su tiempo. Él te encontrará. Mi hermano es el omega más hermoso del mundo, deja que tu alfa te busque, merodeando por el mundo, sufriendo un poco —, ríe Jungkook y presiona la cabeza de Jimin contra su pecho.

Jimin tenía cinco años cuando sus padres murieron trágicamente. Jungkook se dio cuenta de inmediato de que si los llevaban a un refugio, los niños serían separados. Por tanto, huyeron y empezaron a sobrevivir en las calles. Todas las noches, Jungkook sabía que debía regresar a la cabaña, a la que llamaban hogar, porque su hermano lo estaba esperando allí. Todos estos años, Jungkook sobrevivió precisamente porque tenía a alguien a quien regresar. El alfa se da cuenta de que Jimin es un omega joven y guapo y no vivirá para siempre con él, pero Jungkook está tratando de retrasar este momento de separación.


***

El día de Namjoon no ha sido bueno desde la mañana. Primero, los proveedores fallaron y el alfa tuvo que reprender a su gente durante media hora en la oficina. Luego hubo una reunión fallida con uno de los futuros socios.

𝐔𝐋𝐓𝐑𝐀𝐕𝐈𝐎𝐋𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀 | ⁺¹⁸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora