Catorce

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— ¿Cómo puede estar tan tranquila? Hyejoo desapareció y ella va por la vida como si nunca hubiera pasado nada.

Yeojin se quejó en voz baja observando a la distancia a la castaña, la veía reír junto a un pequeño grupo de personas que realmente no conocía, la extraña combinación entre lo rara pero atractiva que era Yujin la hacía encantadora ante los demás, pero no ante los observadores ojos de la menor del grupo.

— No podemos culparla de nada— habló Heejin a su lado haciendo que alejara la vista de la castaña—. Sé que extrañas a Hyejoo y estás preocupada, todas lo estamos, Yeojin; pero no puedes culparla solo porque sí.

— Yujin es mala y ustedes lo saben.— Golpeó la mesa en un acto de desesperación llamando la atención de su grupo de amigas—. No podemos quedarnos cruzadas de brazos.

— Yeojin, no puedes meter tu guerra personal en un tema tan serio como la desaparición de Hyejoo.

El ambiente se volvió tenso ante el comentario de Sooyoung, Yeojin sabía que tenía una mini guerra con Yujin —aunque la castaña ni siquiera estuviera enterada— pero la situación iba más allá, había algo demasiado raro en la chica y sabía que no era la única que lo pensaba pero quizá si la única que quería hacer algo al respecto. En silencio asintió clavando la mirada en su comida, la sonrisa cínica y ojos brillantes de la castaña estancados en su mente como un ciclo interminable.

— Lo lamento.

Lentamente al ambiente volvió a ser el mismo, sabía que todas en la mesa estaban preocupadas por el paradero de Hyejoo y que probablemente tenían la misma teoría que ella, pero habían hecho un acuerdo silencioso para dejar todo en manos de la policía y lo único que podían hacer era esperar. La ponía en conflicto el como intentaban hacer parecer que todo estaba bien y que nada nunca sucedió, viviendo en su propia fantasía.

— Hey, está bien.— Jiwoo tomó su mano dándole una sonrisa, sus ojos siendo igual de lindos que siempre aunque el momento no fuera el mejor—. La detective Park nos dará noticias pronto, ¡Estaremos bien!

Sonrió un poco ante la tierna imagen de Jiwoo, la consolaba un poco saber que a pesar de todo sus amigas seguían ahí, Heejin también le había dirigido una suave sonrisa; lentamente ignoró sus impulsos para intentar unirse nuevamente a la conversación, no fue sencillo pero logró hacer que la tensión en el ambiente desapareciera por completo y que sus amigas volvieran a sus fantasías perfectas donde estarían bien.

Yeojin tenía la corazonada de que no lo estarían.

La detective Park había hecho las mismas preguntas a cada una de ellas y le había prometido que darían con su amiga cuando se lo imploró casi de rodillas y al borde del llanto. Hyejoo era lo más cercano que tenía a una relación de confianza más allá de lo típico en una amistad, la consideraba su familia y aún así la pelinegra eligió a Yujin sobre ella, fue un golpe de traición demasiado fuerte, lo suficientemente fuerte para generar un odio incontrolable hacia la castaña; eran tantos sentimientos negativos en su interior que habían comenzado a nublar su juicio, no tenía control sobre sus propios pensamientos y acciones.

Y conocía a alguien más que tampoco tenía control sobre sus propios pensamientos, ¿Sería muy malo de su parte aprovecharse de ello? No, era lo que tenía que hacer si quería a Hyejoo de nuevo a su lado.

— Hey Nayeon, ¿podemos hablar después?

No sabía si realmente estaba metiendo su pequeña guerra personal, pero algo muy dentro de sí le decía que todo estaba mal, su inconsciente la mantenía en constante alerta cuando Yujin se encontraba cerca y no podía evitar mirarla constantemente. En el fondo se sentía como una acosadora, pero le gustaba convencerse de que estaba jugando muy seriamente al detective.

Deathly | Son HyejooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora