Deathly | Son Hyejoo

Diecisiete

Con una máscara externa de calma Yujin observaba disimuladamente por la ventana, a pocos metros Hyejoo jugaba con sus manos esperando pacientemente mientras su corazón latía con furia en su pecho; Hyunjin había salido hace tan solo 10 minutos y de momento todo estaba demasiado tranquilo, tenían el sentimiento de que algo iba mal, desde su posición podía observar al trío de detectives perdiendo el tiempo frente a su hogar, la más pequeña del grupo observaba con atención la estructura e incluso por un pequeño momento, juró hacer contacto visual con la castaña pero tan rápido como llegó se fue.

— Oye, oye, oye, veo algo— habló con rapidez la castaña colocando a Hyejoo a su lado con un movimiento rápido.

La atención de las mujeres dentro del auto había cambiado totalmente, dejando de lado su principal objetivo ahí, incluso la detective Kim había despertado de golpe y todo el sueño que podía tener desapareció aparentemente. Con menos disimulo que antes las observaron discutir un poco, la pequeña detective Park señalaba de manera insistente la estructura de su hogar, pero la castaña a su lado y la rubia en el asiento trasero continuaban hablando sin parar, en un determinado momento la paciencia de la detective se acabó y sin esperar a que Chaewon estuviera de acuerdo con ella la obligó a arrancar el auto.

— Se fueron, es hora— anunció tomando la mano de Hyejoo y llevándola con rapidez hasta la puerta—. El auto de Hyunjin está fuera, iremos lo más rápido posible y volveremos, ¿queda claro?

— Más claro que el agua.

Cuando el pomo de la puerta se encontró atrapado entre los dedos de Yujin, Hyejoo la observó de una manera tuvo que detenerse, podía ver el claro miedo en esos ojos que le encantaban, su labio inferior temblaba un poco e incluso podía sentir su mano entrelazada con la suya sacudirse levemente, la azabache estaba aterrada.

— Estaremos bien, te lo prometo— sentenció presionando sus labios contra la frente de la pelinegra—. ¿Estás lista, Hye?

— Si es contigo, siempre.

Compartiendo una sonrisa salieron a toda velocidad de su hogar y subieron con rapidez al auto negro que las esperaba, Yujin se aseguró de colocar el cinturón de seguridad de Hyejoo antes de decidirse a avanzar, el auto avanzó casi a la misma velocidad en la que latían sus corazones, siendo totalmente ajenas a los ojos curiosos que las observaban.

— ¿Sabes en dónde están?

La pregunta rompió el tenso ambiente que las rodeaba, recostándose en el asiento de cuero Hyejoo tomó su tiempo para responder la pregunta, el nudo en su garganta no le permitía responder de inmediato y tuvo que obligarse a sí misma a calmar sus nervios y permitir que el miedo abandonara su cuerpo dando paso a la adrenalina.

— En mi habitación, hay una carpeta con todo rastro de mi existencia.

— Yo cuidaré la entrada en caso de que algo suceda.— Giró el volante hacia la derecha entrando a la calle donde el hogar de Hyejoo se encontraba—. Haremos esto rápido, iremos al lugar donde está Hyunjin y podremos salir de aquí... Si es que la idiota logra escapar.

Asintió en silencio jugando con la llave en su mano, dando una mirada rápida notó que el auto de su madre no estaba ahí y seguramente su padre no había pisado su hogar en un largo tiempo, el exterior de su hogar estaba un tanto descuidado e incluso las plantas que su madre tanto amaba estaban a nada de morir. Yujin estacionó justo frente a su puerta, bajó del auto sin esperar demasiado y procurando mantener su identidad lo más segura posible (lo que cubrirse con su cabello le permitía), la pareja entró a la casa.

Fueron recibidas por un silencio abrumador, el interior estaba mejor cuidado que el exterior pero aún así Yujin podía notar un poco algo de polvo  y suciedad en el lugar, caminando se acercaron a las escaleras por donde Hyejoo iría directamente a su habitación, mientras subía los escalones la madera crujió debajo de sus pies provocándole escalofríos, por alguna razón la castaña se sentía incómoda en ese lugar, demasiado incómoda. Se limitó a vigilar la puerta ignorando la constante presión en su nuca y su necesidad de salir del lugar, de acuerdo a la información que tenían, la madre de Hyejoo salía todos los días en ese horario y volvía entre una y dos horas después, era su única oportunidad de tomar todo lo necesario.