𝐁𝐨𝐤𝐮 𝐧𝐨 𝐡𝐞𝐫𝐨 ✧ Escenarios

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No puedo engañarlos, perdí la cuenta de cuanto tiempo llevo siendo amiga de Bakugo, pude ver como mucha gente en su vida lo rechazaba gracias a su personalidad explosiva, tuve la posibilidad de sentir su dolor pero como pude ver toda esa negatividad también pude ver lo que pocos logran conocer de él, lo bueno que tiene Katsuki Bakugo.

Siempre hemos logrado complementar bastante bien, ambos tenemos personalidades similares, nunca me sentí inferior a él, siempre vi a Katsuki como un igual. Luego llego Kirishima que se volvió el cable a tierra de ambos, nos ayudo bastante, logramos juntos mejorar como personas.

Aunque últimamente nuestra relación se ha tornado extraña, en los años jamás nos había sucedido esto y en cierta parte hacia que mi pecho doliera. Muchas veces bromeamos de manera "pesada" Bakugo me seguía el juego molestándome por mi estatura o una que otra característica de mi persona pero ahora cuando intentaba jugar con el de esta forma solo respondía fríamente con un "lo sé" "no puedo cambiarlo" "que no te moleste". Cuando lo invitaba a un intento de combate cuerpo a cuerpo me decía que trabajaba mejor solo. Cuando lo esperaba junto a Kirishima a la salida fingía no vernos y se iba solo haciendo que solo nosotros camináramos a casa juntos. Podía soportar todo esto por parte de él porque lo quiero mucho pero me preocupaba ¿qué pasaba que no me podía decir? ¿acaso estaba teniendo problemas con alguien? mi prioridad siempre ha sido su bienestar.

Hoy se supone que saldríamos al Mall juntos pero nuevamente cancelo, obviamente yo no cancelaría por ello, Kiri quería ayuda para comprar ropa, el pequeño tendría una cita y claramente no le negaría ese placer. Pasamos la tarde buscando la ropa indicada y terminamos comiendo mucho helado, al finalizar el día me dejo en casa, el clima había cambiado de manera abrupta como mi relación con Bakugo. 

Tenia mi casa sola, ni un solo ruido, me parecía triste, siempre tenia a uno de mis dos amigos gritando en ella, mi madre dedicaba su vida al trabajo por lo tanto mi eterna compañía era la de ellos.

Entre tanta tristeza sentí como comenzaba a llover ¿acaso el cielo estaba llorando por mi? No tarde mucho en preparar un té, tomar unas mantas y sentarme a ver alguna película, de alguna forma tenia que llenar el vació que me otorgaba el silencio en mi hogar. 

La hora iba pasando y junto a ella la cantidad de películas que estaba viendo, grande fue mi sorpresa cuando en plena película de terror sentí como tocaban la puerta de mi casa, caí de rostro al suelo por el susto. Claramente no iba a abrir, me encontraba sola y se podría prestar para cualquier accidente pero eso cambio cuando escuche una voz tan conocida gritar.

Bakugo: ¡abre la puerta idiota! me estoy mojando aún más. 

Corrí a abrirle la puerta al chico que tenia sufriendo mi corazón. Sentí una espada pasando por mi pecho al ver lo mojado que estaba y la cara de tristeza que tenia, nunca la había expresado de manera tan clara, eso logro dejarme atónita.

Bakugo: ¿planeas dejarme aquí? porque hoy no me siento con la paciencia suficiente para tolerarlo.

-dios no, pasa, por favor.