Pretty Little Liars (Jason Dilaurentis)

T2-E16-DEJA QUE EL AGUA ME RETENGA

Después de la desastrosa noche, las chicas y yo decidimos dormir juntas y fuimos a la casa de Spencer, Hanna estaba frente a la chimenea calentándose y no quitaba su vista del fuego -Toma una aspirina- le dijo Aria y no lo pensó dos veces para tomarla - ¿Una cobija? – ofrecí y Hanna la aceptó con gusto, se la puse en la espalda y Emily llegó con el bolso de Hanna en sus manos -Ten tu bolso. Creo que Caleb llamó, tu teléfono estuvo sonando- le dijo -Hanna, sé que todavía no estas lista para hablar sobre esto, pero el comisario dijo que estaban listos para revisar el lago mañana a primera hora- le dijo Spencer -Lucas no está en el lago- dijo Hanna firmemente -No llegó a la orilla- dije con cautela -esperamos...-

-Sabe nadar ¿De acuerdo? – Hanna me interrumpió y creí mejor morderme la lengua, no era momento para alterar más a Hanna -Está en alguna parte, puedo sentirlo- dijo en casi un susurro sin quitar la vista del fuego -Oigan, aun no puedo creer que Lucas estuviera con A- dijo Aria - ¿Por qué no? Jenna hizo lo mismo con Caleb- dijo Spencer -Sabe que Lucas es amigo de Hanna- dijo Emily -No, eso lo entiendo, solo que... No creí que Lucas fuera así de violento- dijo Aria y se hizo un profundo silencio, hasta que Hanna volvió a hablar en casi un susurro -Pude serlo. Lucas fue el que destruyó su monumento- la miré boquiabierta y Hanna se mordió el labio casi sintiéndose culpable -Lo supe el día que salí del hospital-

- ¿Por qué no nos dijiste? – bramó Spencer -Le prometí no decirlo- dijo simplemente - ¿Por qué? – quise saber -Para protegerlo, ya pasó por demasiado y Allison en serio lo torturaba- dijo Hanna -Tal vez es hora de protegerte a ti- le dijo Spencer -Me duele la cabeza- dijo Hanna y se llevó las aspirinas a la boca, rebuscó en su bolso y sacó una botella con agua llena de tierra, pero no se dio cuenta de ello - ¡No lo bebas! – dije, pero fue demasiado tarde pues ya le había dado el trago -Ay, muy tarde- dijo con una mueca de asco - ¿Cómo llegó eso aquí? – cuestionó Aria -Su bolso estaba afuera en el auto- dijo Emily -Sí, pero estábamos aquí- dijo Aria -Pero Lucas no, tal vez solo quiere terminar lo que empezó- dijo Spencer tomando la botella entre sus manos, un mensaje llegó al teléfono de Hanna y lo leyó -No sabe bien el agua del lago ¿O sí? Ahógate con ella perra. A- y como si no fuera ya lo bastante tétrico, una tormenta de relámpagos empezó a inundar la noche.

...

-Sé que A estuvo en la casa del lago- dijo Spencer mientras vaciaba el contenido de la bolsa sobre la barra de su cocina - ¿Estaba esto en el ático? – pregunté viendo los aparatos electrónicos que aún seguían empaquetados -La foto de las muñecas que Caleb descifró fue tomada en la casa del lago- reafirmó Emily -Se sentía cómodo ahí- dijo Aria -Mi familia nunca usa la casa después de un día del trabajo, es el sitio perfecto para una guarida del mal. Y miren, vean la fecha de esto- dijo Spencer extendiendo un pequeño ticket, Hanna lo tomó y leyó -Fue por la fecha que Caleb y yo estuvimos ahí- dijo Hanna - ¿Estaba en la casa cuando Caleb y yo estuvimos...? –

-Ah, ¿Fraternizando en el sillón de mi abuela? – ironizó Spencer molesta y yo luché por no soltarme a reír -Oigan ¿Quién se lo dijo? – preguntó Hanna un tanto molesta - ¿Y eso que más da? En esa casa hay cuatro habitaciones con varias camas- dijo Spencer y Hanna rodó los ojos con fastidio - ¿No vieron a nadie u oyeron algo? –

-Em, estábamos ocupados-

-Sí, estaban ocupados- volvió a decir Spencer, pero esta vez sonaba más molesta -A ver ¿Dices que Lucas subió al ático como si ya hubiera estado ahí? – preguntó Aria -Quiso limpiar los rastros de Garrett y Jenna y esto- Spencer tomó de vuelta el ticket y se lo mostró a Aria -Una dirección, Smittys 801 de la calle Imperion-

- ¿Pero Smittys qué? ¿Restaurant? – pregunté - ¿Calle Imperion no es Filadelfia? – preguntó Hanna - ¿Quieren que vayamos ahí después de la escuela? – preguntó Spencer a lo que yo asentí enseguida -De acuerdo, sí, yo voy- se apuntó Aria - ¿Está bien si no voy? Aún tengo el sabor del lago en mi boca- dijo Hanna.