Monstruosa Realidad (MitsuBoru)

ANTIGÜO DOLOR 🧧

Estaba parado sobre una extraña colina que tenía la forma de un rostro. Para ser más preciso, era el rostro de mi papá hecho de piedra. Yo permanecía allí, con el viento acariciándome, sentía sus helado dedos rozar mi cara.

Frente mío se extendía un pueblo o una aldea cuyos edificios tenían los más variados tamaños. El ruido de la gente viviendo sus propios mundos se hacía sentir, era el mismo viento quien los traía directo hacia mí.

Yo llevaba puestas ropas extrañas y armas de ninja. Si, era un ninja. No sé cómo conozco ésto pero estoy seguro de ello. Como tampoco sabía el motivo de mis lágrimas, producto de una infinita tristeza que albergaba mi alma misma.

¿Por qué estaba llorando? ¿A qué se debía este lamento que salía de mi ser? Preguntas sin respuestas. Me abracé a mi mismo en un intento por sentir aunque más no sea un poco de aquel sentimiento que habia perdido. El amor. Si, eso era.

Estaba experimentando una pérdida que me partía el alma y no me dejaba respirar. El echo de respirar me dolía intensamente. Me estaba asfixiando, ya no podía seguir viviendo.

Súbditamente supe el motivo de mi tristeza. Mitsuki. La visión cambió y ahora me encontraba en el interior de esa aldea, en sus transcurridas calles. Él y yo frente a frente. Mitsuki vestía extrañas ropas también, ropas ninjas.

Su expresión era dura y hasta cruel. Sus palabras, cual cuchillas afiladas, se incrustaron en mi corazón despedazando mi alma misma.

"Lo nuestro acabó Boruto. Ya no quiero seguir contigo porque simplemente ya no te amo".

Aquello despedazó mi ser. Mitsuki se perdió entre la multitud y por más que lo quise retener a mi lado él...se desvaneció frente mío como si de niebla se tratara.

Ahora volvía a estar sobre el rostro de piedra de mi padre lamentandome la pérdida de quien tanto amaba. Mitsuki ¿por qué me hiciste esto mi amor?

Repentinamente una mujer apareció frente mío. Una pelirroja con lentes, de piel blanca. Su mirar era espeluznante debido a la crueldad intensa.

Sujetándose las gafas dijo:
- Te lo dije Boruto pero no quisiste creerme¿verdad?. Mitsuki es mío, me pertenece solo a mí.
- Karin maldita ¡¿Con qué lo amenazaste?!
-¿A-Amenazarlo? - ella rió como una hiena - Nunca necesité hacer tal cosa ya que Mitsuki me ama solo a mí.

Luego desapareció como si de un fantasma se tratara. Sus palabras acabaron haciendo añicos la poca resistencia que me quedaba. Sin Mitsuki ¿para qué seguir viviendo?

A lo lejos pude ver a mi papá. Vestia un pantalón negro, una extraña campera naranja y negra y una capa blanca con letras en la espalda que decian
"Septimo Hokage"

Aquel con quien siempre solía discutir con el único propósito de llamarle la atención. Lo quería tanto pero...lamentablemente ya no podía seguir viviendo.

- Lo siento mucho....papá - saqué la espada que solía llevar siempre y atravesé mi corazón - Adiós papá....hasta la próxima vida.

Sentí que mi cuerpo caía al vacío pero los protectores brazos de mi papá me sujetaron. Sin embargo nada pudo hacer ya que estaba muerto. Si, ví a mi padre sujetar mi cuerpo sin vida y gritar mi nombre con total desesperación.

Su dolor fue destructivo, pude verlo. Pero ya estaba echo. No sabía cuánto me quería él hasta ahora.
- En la próxima vida volveré a ser tu padre....Boruto. Y te juro que no pasará un instante sin demostrarte lo mucho que me importas hijo. Perdón por haber sido tan mal padre...hijito.

Papá. Cuánto lo siento. Pero en ese preciso instante lo supe. Conocí la verdad detrás del supuesto abandono de mi amado Mitsuki. Lo ví todo.

"Mitsuki. Estás bajo su control. Cómo pude ser tan idiota"

"Boruto ¿qué fue lo que hiciste mi amor? Me dejaste a su mercer ¿por qué?"

"No te preocupes Mitsuki. Resiste. Yo volveré por tí, no importa dónde estés. ¡Te encontraré y te liberaré! ¡Solo esperame! ¡Mitsuki!"

---💔---💔---

En ese momento desperté sobresaltado. Estaba llorando en verdad. Miré atentamente a mi alrededor y supe que estaba en la habitación del castillo de Mitsuki.

¿Qué fue todo eso? ¿Un sueño? ¿O un recuerdo?Pero recuerdo ¿de otra vida? Instintivamente miré mi pecho en busca de aquella herida. Nada.

Respiré aliviado. Pero seguía llorando. Mitsuki ¿acaso tú....eres ese monstruo que ví anoche? Significa que no fue un sueño sino un recuerdo de mi vida anterior. En ese caso Karin también es real. ¿Dónde está esa maldita arpía?

Tenía que hablar con Mitsuki pero no ahora, no todavía. Lo primero de todo era...ver a mi papá. Debía irme. Cuando estuve listo salí de la habitación. Mitsuki no estaba por ningún lado, así que opté dejarle una nota. El gato blanco apareció con sus dos colas.

- Entregale a Mitsuki - le dije como si pudiera entenderme -Debo ver a mi padre pero volveré a la tarde. Esa belleza de ojos dorados no se librará de mi. Cuídalo mientras no estoy ¿de acuerdo? - el gato maulló mientras ronroneaba.

Tomé mi mochila y me dirigí a la puerta principal. Por suerte las puertas rejas estaban abiertas. El felino me acompañó hasta afuera.
- Dile que volveré ya que necesito decirle algo muy importante.

Sin esperar más salí del castillo rumbo a casa. Me urgía ver a mi papá ya que ahora estaba seguro de haber recordado aquello.
- Papá - murmuré secándome las lágrimas.