Luna quiere ser madre

8

Harry despertó en medio de la noche por una pesadilla que lo hizo sobresaltar del susto, alarmado tomo el mapa del medeorador. Aunque dudó, "No debería, pero..." Por unos segundos pensó que no era necesario hacerlo, "Pero ¿y si está en problemas?" Dejó de dudar y abrió el mapa. -Juro solamente que mis intenciones no son buenas- El mapa entonces mostró los planos de Hogwarts. Rápidamente busco con la mirada en nombre de Draco, lo encontró en su dormitorio dentro de la sala común de Slytherin.

Cuando Harry trato de cerrar el mapa para volver a dormir, ya que se sentía más tranquilo, el nombre de Draco se puso en movimiento. Harry sobresaltado prestó más atención al mapa, "Tal vez solo va al baño(?" Pero la solo idea se fue al garete cuando el punto que señalaba la posición de Draco salió de su respectiva sala común, Harry se levanto de la cama de un brico. Tomó de su baúl su capa y con mapa en la mano se escabulló de la habitación.
Mientras salía de su sala se puso la capa y corrió en dirección a Draco, su capa lo hizo tropezar más de una vez y de milagro no se cayó al suelo ya que con el mapa no habría podido detener una caída, que probablemente, sería qdolorosa.
Harry de lo rápido que había caminado por los pasillos por fin se encontraba a solo unas cuantos metros de Draco, lo veía andar sin demasiada prisa, Harry miraba atentamente la forma tan sensual que Draco tenía para andar, con un elegante movimiento de cadera que era tan exquisito a la vista de Harry, " Deseo tocarlo..."
Sus pensamientos se vieron interrumpidos por un fuerte empujón que lo acorraló en la pared.

Al levantar el rostro visualizó a Draco, pero este no le miraba a él, volteó su rostro a él lugar donde Draco mantenía su vista y pudo ver que en la esquina de un pasillo una silueta rodeada de luz se les acercaba, Harry rápidamente cubrió a Draco con la capa, a Draco no le sorprendió ver a Harry, lo que le sorprendió fue que Harry lo arrinconara con él. –PERO QUE...– Harry lo callo con una mano. Entonces se apareció Filch, Draco se apretó inconscientemente a Harry, –¿Por donde fueron?–
Harry no pensaba desaprovechar la oportunidad y se pego más a Draco, Filch fue tan oportuno e inoportuno a la vez. Ya que gracias a él Harry podía sentir el cuerpo de Draco pegado al suyo, pero Filch no parecía querer darse por vencido, ya que se estaba apegado a las paredes buscando a estudiantes desafortunados, para colmo llegó su gata y está parecía que si podía olerlos.

"Mierda" Harry entonces vio una oportunidad de escape, sintiendo mucha vergüenza cuando obligó a él cuerpo de Draco a subirse sobre el, –Sigueme el rollo si quieres salir de esta– susurró Harry al sentir que Draco trataba de protestar y de soltarse. La situación que ambos atravesaban era bastante incómoda, sus entrepiernas se rozaban, pero quién sentía mucho más el contacto sin duda era Draco. Su pijama era de seda fina, muy fina.

Harry sujetaba firmemente las piernas de Draco y este rodeaba el cuello de Harry con sus brazos, cuando Filch se alejó de la pared, Harry corrió para pasar por ahí, la gata los iba a seguir, pero Filch la atrapó, la cargó y se la llevó en dirección contraria a la que Harry corría mientras cargaba a Draco.
Harry corrió con Draco en sus brazos hasta llegar cerca de la biblioteca.

Harry podía sentir su miembro muy adolorido y cada que rozaba la intimidad de Draco, haciendo que  mordiera con fuerza su labio. Por otro lado, Draco término apoyando su cabeza en el hombro de Harry, tenía los ojos cerrados fuertemente y al igual que Harry mordía su labio para oprimir sus gemidos, no le estaba prestando nada de atención a lo que ocurría a su alrededor, solo se concentraba en que su miembro no se erectara. Harry ya no podía más tenía su calentura al topé, y aunque Draco no se estaba dando cuenta de su boca salían pequeños jadeos, gemidos y suspiros, "Por las barbas de Melín, no puedo más"

Empotró salvajemente a Draco, sintiendo los calambres que se extendían por todo su cuerpo haciendo que Harry tambalearse de placer, –Ahg– Escuchar el gemido ahogado de Draco solo puso a Harry más caliente.
Draco ni siquiera estaba pensando en lo que ocurría, solo abrió su boca y dejó salir todo lo que había estado reprimido.

Severus aunque ya había hablado con Narcissa seguía preocupado por Draco, quien el año siguiente cumpliría 15 años, y por ende su vida corría peligro. Severus no podía dormir, el solo hecho de pensar en todas las cosas que podrían pasar si se descuidaba más de la cuenta, o peor aún, si el Lord descubría sobre el origen de Draco, está última posibilidad era la que más le atormentaba.  El Lord no se andaría con estupideces, sabía que el haría de Draco su arma más poderosa. Y aunque lo mantendría aquí, Draco no sería feliz cumpliendo las órdenes que le mandaría el Lord, Severus sin darse cuenta en realidad fue cerrado los ojos y se quedó dormido, Severus tenía la ventana ligeramente abierta y por ello pequeños rayos de luz de luna entraban a su habitación.

–Maldita sea suéltame– forcejeaba con todas sus fuerzas tratando inútilmente de soltarse, –No te metas, esto no es asunto tuyo– una voz de catacumba se escucho, logrado que Severus se distrajera –¿Quien eres?– Severus pregunto con la esperanza de que le volviera a contestar, pero nada, el silencio era lo único que se hacía presente ante el, entonces Severus comenzó a mirar en los alrededores buscando alguna persona que lo estuviera viendo, pero nada, ya algo desesperado se removió con más fuerza y casi logra soltarse, pero ahora lo detiene la voz –Eso no es lo importante, no te metas Severus, o vas a terminar terriblemente mal– –¿Es una amenaza?– Para sorpresa de Severus la pregunta salió en voz alta –Es mas bien una advertencia– Sin más una nube negra se encargó de rodarlo.