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Llegó el esperado amanecer a las 5:30, Draco fue quien obligó a todos a ponerse de pie y a cambiarse. Aun que bueno, no todos estaban a la labor.
–Melín, noooo– Blaise se aferró a sus sabanas, Pansy y Theodore se levantaron con cuidado, observando como el rostro de Draco se volvía rojo y sus venas se marcaban en su cuello.

Sin decir nada Theo y Pansy fueron cada uno a sus respectivas habitaciones, dejando a Draco y a Blaise solos en la sala, no iban a intervenir, menos viendo el rostro de Draco. Rogarían por el alma de Blaise, era lo más que podían hacer.

En la sala ya se encontraban listos casi todos los Slytherin, Draco y Pansy charlaban con los de primero, los niños habían sido muy amables con ellos y Draco no pudo evitar encariñarse con los pequeños. Pero jamás lo confesaría, por lo menos eso quería creer.

Con todos listos, Draco encabezó la marcha hacia el comedor seguido de sus fieles amigos.
Entraron en perfecto orden, como hacía un tiempo que no hacían. Pansy estaba algo cansada, por ello comía con mucha lentitud, casi igual que sus amigos, aunque ellos lo hacían por la costumbre y no por cansancio como ella. Pansy en realidad acostumbra a comer con bastante ánimo, esto llamó la atención de Blaise.

El desayuno transcurría con sobrada  normalidad y calma, por lo menos en el lugar donde Parkinson.

En la mesa de Slytherin había casi absoluto silencio, sin más ruido que el liguero traqueteo de los cubiertos chocando entre si, la de mesa de Gryffindor, por su lado, se escuchaba gran cantidad de gritos y risas escandalosas que hacían que los pelitos de la nuca de Pansy se erizarán de completo desagrado. En hufflepuff solo charlaban animadamente, pero con tranquilidad y en la mesa de los cuervos también había bastante tranquilidad.
Pero por más que Pansy se lo repetía, tratando de convencerse a si misma, no podía evitar que su piel se erizara sin razón aparente. Ella tenía un mal presentimiento.

Tan metida en sus pensamientos estaba que no sintió que alguien se acercaba a ella.

Dio un pequeño respingón cuando sintió una mano tocarle el hombro –¿Te encuentras bien, Pansy?–  Pansy se relajó al instante, la voz la reconoció. Se volteó, viendo a un preocupado Blaise mirándola interrogante–Melín, si, me has espantado– Blaise sonrió ligueramente avergonzado, la soltó al momento en que su sonrisa se borró.

–¿Te encuentras bien?, te ves bastante pálida– Pansy suspiro pesadamente –Seguramente se deba a la fantástica noche de ayer– Blaise noto el tono pícaro de ella –¿Como puedes hablar así?– Pansy solo alzó sus hombros y apartó su plato, no tenía tanta hambre como creía al principio. –¿No tienes vergüenza acaso?–

–Si, estoy bien– Blaise asiento poco convencido, pero ya no insistiría hasta más adelante, solo si continuaba así.

–Como tu digas– Pansy simplemente ignoro lo dicho por Blaise, se empezaba a sentir agobiada, tanto que su rostro empezó a tornarse rojo al punto que alguno que estaba en la mesa lo notifico a sus amigos.

Todo paso tan rápido que ella no sabía muy bien si estaba alucinando o solo fue lo que pasó. Pansy trato de tomar un vaso y servirse algo de agua, pero el vaso reventó cuando su mano lo rozo, esto evidentemente alertó a los Slytherin, Pansy ya no podía respirar correctamente, trato de soltarse la corbata pero sintió que algo la jalo hacia Draco. Su cuerpo choco violentamente contra Draco quien la atrapó apesar de la sorpresa.

Todos en su alrededor estaban en shock, las demás mesas solo los miraban con algo de inquietud o sorpresa. Y apesar de él escandolo en la mesa, los profesores no parecían notar lo que ocurría. Con una mirada todos los Slytherin rodearon a Pansy y a Draco, Draco le quitó la corbata y desabrochó solo dos botones, pues había demasiadas personas a su alrededor, mientras Theo iba junto a Severus para que pudiera socorrer a Pansy. Severus no dijo nada, solo se levantó y camino con suma lentitud hasta la mesa de Slytherin, Draco sostenía a Pansy con la cabeza en alto, mientras Blaise sostenía una bolsa cerca de la boca de Pansy, para que pidiera vomitar. El círculo se abrió, dando paso a Severus y a Theodore, por alguna razón cuando solo le faltaban unos 2 metros para llegar junto a Pansy está se desmayó.

*Muchas horas después*

Pansy se levantó sobresaltada, no reconocía el lugar donde estaba, tampoco recordaba el como había llegado ahí.
Su mente estaba el blanco total, y siendo sincera era muy complicado que recordará algo más allá de lo ocurrido ayer. Bueno ahora que lo pensaba, ayer se había quedado hasta muy tarde con los chicos ayer si no había dormido.

–Joder, ¿me dormí en clases?– Pansy sintió terror, como podía quedarse dormida en clase, un escalofrío recorrió todo sus cuerpo.

¿Que se supone que debería hacer?

Su madre la iba a matar, eso la aterraba de sobre manera, se acurrucó en la cama y por unos segundos su mente se encontró en paz...

Una paz que no duró...

Flashback:

–MAMA, SUÉLTAME, SUÉLTAME, POR FAVOR, POR FAVOR, MAMI, NO LO VOLVERÉ A HACER, ME DUELE MAMI, ME ESTAS LASTIMANDO– La persona que debía amarla y protegerla, esa persona era ahora la persona que la suguetaba del cabello. Con tanta fuerza que sentía como de a poco sus cabellos eran arrancados. –Oh~, claro que no volverás a hacerlo, yo te enseñaré modales– Un fuerte golpe lleno la habitación, tan repentinamente como se escuchó, dejo de hacer eco.
La pequeña no tardó en sentir un ardor en su mejilla y rápidamente unas lágrimas se acumularon en sus ya aguados ojos. –¿Si ves lo que pasa cuando no haces caso? Te voy a dar tu merecido, niñata insolente– La niña miro con terror a su "madre" está tenía su rostro desfigurado en una mueca asquerosa. Era entre ira y una sonrisa, esto lleno de terror a la menor quien miro la puerta entreabierta de la habitación, esperaba que su padre llegará y la salvará.

Fin del Flashback.

Pansy empezó a llorar, era algo doloroso, tanto que la herida se sentía aún reciente apesar de los años.
El llanto de Pansy era silencio, pues solo un par de lágrimas salían. Su cuerpo temblaba, solo de pensar en lo que su madre era capaz de hacerle. Tenía miedo.
Su llanto subió un poco más de tono, sus sollozos, aunque suaves, eran perfectamente audibles entre las cuatro paredes del lugar. Su madre era su mayor temor, fue por ella que también le desarrollo una fobia a los tiburones, jamás olvidaría ese día.

¿Como olvidarlo? Su padre lo presenció todo, pero no hizo nada, agachó la cabeza y se dio la vuelta.
Jamás olvidaría el dolor de los golpes, junto a las maldiciones de su madre. Pero sin duda lo más doloroso fue ver cómo su padre, su mayor héroe, actuaba ajeno a su sufrimiento.

Para ese momento el llanto de Pansy era alto, desgarrador y descontrolado. Odiaba su infancia, pero todo cambio un día en el cual los malfoy's aparecieron el la mansión de su familia.

Exigieron verla y su madre se puso rabiosa, hubo mucho griterío y ella estaba muy asustada, se metió debajo de su cama y se quedó ahí, sin hacer ni un solo ruido. Todo se volvió borroso después, su madre ahora ya no la golpeaba, más bien la ignoraba. Su padre se podía decir que también hacía lo mismo, pero ahora estaba casi siempre con ella.

En esos momentos su mente de niña inocente, pensó que sus padres le están dando una segunda oportunidad. Ella recuerda emocionarse tanto que comenzó a llorar de felicidad, corrió junto a su padre y lo abrazo, este correspondió al abrazo al instante.

Pero con su madre todo fue diferente, Pansy siempre había sido una niña muy obediente, por lo que jamás había cometido una sola infracción a las normas de su madre. Pero ella no pensaba así.

Pansy fue corriendo a abrazar a su amada madre, está se puso tensa de inmediato y puede recordar que ella se puso a la defensiva, pero antes de que pudiera atacarla, el timbre sonó. Su madre la apartó con violencia.

Pansy ahora abrazaba su almohada con fuerza.

La mirada de asco de su madre se quedó tallada en ella para siempre, se quedó en su lugar clavada. Desde ese día en su familia se jugaba ha ser la familia feliz y funcional. Pero Pansy se conformaba con eso, migajas del cariño de su adorada madre.

Solo con eso ya era feliz.

Luna quiere ser madreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora