TENGO FRÍO, yang jungwon.

ꗃ capítulo 6

❝ VIAJE ❜❜

jungwon esperaba a hanna, sentado en la parte de atrás del auto, mientras sus padres planeaban alegremente el horario de actividades por realizar ese mismo día de campamento.

el pelinegro veía la puerta de la casa de su novia, por la que jamás ha entrado. para él, la entrada era la ventana junto al árbol de la habitación de la chica, se había vuelto un experto escalando, olvidando de su pequeño miedo a las alturas. en fin, se había vuelto una costumbre entrar por su ventana como un ladrón. jungwon dejó escapar una ligera risa recordando como uno de los vecinos de hanna, lo confundió con un ladrón, fue un buen momento de confusión.

hanna salió de su casa, cerrando la puerta detrás de ella. llevaba su maleta, no tan grande. jungwon salió del auto para ayudarle a su novia, yendo hacia ella con una sonrisa de oreja a oreja.

─amo-, ¡hanna! ─se corrigió inmediatamente como escuchó que salía ese apodo amoroso. de hecho, hanna lo observó con sorpresa pero después con alivio luego de reparar ese pequeño error. ─¿estás preparada?

─¡por supuesto! ─asintió con entusiasmo. ─gracias por haberme invitado.

─es lo menos que puedo hacer por ti, vamos. ─jungwon tomó la mochila de hanna, guardándola en el maletero del auto, abriendo la puerta de este para que su novia entrara al vehículo.

─¡qué caballeroso! ─exclamó hanna riendo. jungwon se encogió de hombros, restando importancia al momento.

─es lo menos que puedo hacer por ti ahora, sin que nadie sospeche de nuestra extraña actitud. ─al contrario del rostro alegre de jungwon, su voz había sonado molesta, haciéndole sentir un malestar en el pecho de la joven.

─has hecho mucho por mi, jungwon.

hyomin iba al hospital más cercano, tomando el primer autobús que llegó sin percatarse de si era el correcto, estaba preocupada y necesitaba pensar. entre más largo sea el trayecto, mucho mejor.

mentiría si no aceptará que sus manos no sudaban frío con el simple pensamiento de hanna enferma, odiaba tanto que su amiga sea tan terca pero al mismo tiempo, reprimía ese sentimiento de coraje por la inquietud persistente.

de alguna manera, hyomin logró saber donde tenía planeado hanna hacer sus análisis médicos, gracias a que había ojeado su libreta a escondidas. pero también era fácil de deducir, el hospital más lejos de su dirección era el mejor para no levantar sospechas de algún conocido. hyomin deseaba con fuerza poder decirle sobre esto a jungwon o hasta a las madres de hanna, era preocupante el estado de su amiga y aunque le hizo una promesa, le importaba un carajo.

quería ver a su amiga sana y salva, por más cliché que sonara.

unos cuantos minutos después, hyomin pagó el pasaje y bajó del transporte público. se detuvo ante el inmenso edificio de concreto, doctoras y enfermeros salían de este, enfermos en sillas de ruedas, sujetando bastones, entre otros. era una gran variedad de personas, de todo tipo. pareciera que hyomin nunca fue a un hospital y es así, le repugnaba el olor que emanaba el lugar.

olor a muerte y productos químicos. gran lugar.

hyomin se abrió pasó entre las personas, llegando a la recepcionista, que la recibió con una sonrisa serena.

─¡buen día! ¿en qué puedo ayudarla? ─preguntó como si fuera un robot, seguro que ya ni pensaba en sus palabras, era en automático su respuesta.

─vengo por unos análisis médicos. ─hyomin levantó la mirada, intentando parecer lo más convincente. no sabía cuál era exactamente su objetivo, pero quería seguir con esto de alguna manera, sacando provecho a sus clases de teatro.

era completamente irónico, casi hyomin ríe con pensarlo, ella odiaba esas clases, le parecían ridículas pero gracias a la insistencia de su querida amiga hanna, siguió participando.

─¿son sus análisis? ─preguntó la recepcionista buscando en los archivos de la computadora.

hyomin pensó por un momento, ¿mentiría? nunca lo había hecho por las enseñanzas de sus madres.

─sí. mi nombre es seo hanna. ─contestó, obviamente mentiría. era una situación de vida o muerte. “lo siento madres, les he fallado. ¡qué mala soy!”, pensó dramáticamente.

la recepcionista asintió, volvió su mirada a la pantalla brillante de la computadora, dando clicks por aquí y por allá, con cada click se acababa la paciencia de hyomin.

─ya veo, ─la recepcionista miró con detenimiento por un momento hasta devolver su atención a hyomin. ─iré por tus resultados, ¡espera aquí!

hyomin asintió moviendo la cabeza, tragando saliva,  pensó que plan iba a fallar, pero resultó mejor de lo que esperaba. pasaron unos cuantos minutos para que regresara la recepcionista con los análisis en su mano.

─toma, ─dejó los análisis en el escritorio y hyomin los guardó en su mochila, agradeció con una sonrisa. ─espero que te vaya bien, ¡buen día!

hyomin se despidió con una reverencia, saliendo del lugar lo más pronto posible. tenía tantos nervios que no podía emitir alguna palabra, sentía que un nudo en su garganta. se sentó en la primera banca que vio, sacó los papeles y no vio el resultado, prefirió respirar hondo y observar los datos básicos de su amiga.

─sangre, tipo b, presión, etcétera, etcétera. ─la mirada de hyomin fue acercándose a los resultados, esperando a que viera lo mejor.

Leucemia mieloide aguda.
Estado: avanzada.

─no...puede ser. ─el labio de hyomin tembló al hablar, su respiración se entrecortaba y sus ojos se llenaban cada vez más de lágrimas. ─mierda hanna, ¿qué haremos? ¿qué harás?

@jjaewonis - 2021