FUGITIVA Vegebul [Libro 2]

8. Error imperdonable

Hoy no hay advertencias. Lean sin miedo 😅

Amber. Marzo de 2009

Kakaroto paso esas dos semanas cuidándome. Más que nada vigilando que mis heridas sanen. Tanto Leticia como Milk iban a verme y se molestaron bastante cuando supieron lo que hice en mis brazos. Pero sabían que yo no estaba bien, y me apoyaron.

Todas teníamos válvulas de escape, algunas se drogaban, otras bebían en exceso y otras se acostaban con todo el que podían, como era el caso de Kale. Era una chica muy bonita, que se dejaba dominar por su novia Caulifla. Kale me agradaba, pero Caulifla no le permitía acercarse, porque tal vez sentía celos, así que para mantener la paz, me alejaba de ellas y me juntaba con las otras chicas.

Todo se estaba organizando para la gala aniversario de la Hermandad de la Flor de Loto. Por suerte para Kakaroto mis heridas sanaron a tiempo, justo antes de que el emperador regresara. No quería que lo culparan de mis idioteces.

Cuando llegaron nos reunió a todas en la sala y se dispuso a revisarnos, una por una. De inmediato notó mis cortes recién cicatrizados en los brazos. Y solo pronunció una frase.

—Tu y yo hablaremos sobre esto.

Continuó revisando al resto de las chicas hasta que terminó. Las hizo retirarse a todas, menos a mi. Cuando estuvimos solos me indicó que tome asiento y comenzó a interrogarme.
—¿Porque dañaste así tus brazos?

—Fue un momento de debilidad. Lo lamento amo. No volverá a suceder.

Comenzó a caminar en círculos por la sala. —Dime algo, ¿No soy bastante permisivo contigo?

—Si. Amo. Le agradezco todo lo que hace por mi.— bajé mi cabeza y acepté el regaño.

Tocó mi mentón con su repugnante mano obligandome a verlo a los ojos  —¿Entonces porque hiciste eso? Eres mercancía invaluable, ¿crees que alguno de mis clientes, querrá comprarte si tu piel está en ese estado?

—Lo siento amo. No estaba pensando.

—Se que tu mente es inestable a causa de mis tratamientos. Tal vez esto sea culpa mía.—Reconoció.
—Lo arreglaremos.

—¿A que se refiere con arreglar?

Tomó su teléfono personal, y mandó llamar a alguien.
—Deberas maquillarte eso. Nadie quiere unidades defectuosas. Ve a comprarte ropa que te cubra eso y maquillaje, mucho maquillaje. No hay tiempo que perder.

—¿Ire sola?

—Solo porque eres especial para mi, te permitiré que vayas acompañada. Date prisa.

—Quiero que Vegeta me acompañe.

—De acuerdo. Jeice y Zarbon los llevarán. No intentes nada estúpido o habrá consecuencias.

—No lo haré amo. Gracias por consentirme.

De camino a la tienda de ropa, intenté hablar con Vegeta. Ya que desde que ingresó al vehículo, se mantuvo en silencio, estaba furioso.

—Lamento si hice que te molestaras.—comencé.

—¿Tienes alguna idea de porque estoy molesto?

—Imagino que es por mis brazos.

—Hiciste todo esto por el, ¿No es cierto?

—Yo no hice nada, fue Melissa.

—Dijiste que si te permitía hacer esto con Kakaroto, tendrías todo bajo control. Entonces iluminame, ¿qué fue lo que pasó? ¿No quiso acostarse contigo? ¿O lo encontraste teniendo sexo con alguien más?