In Another Life |LS|

Capítulo 3

Zayn había entrado sigilosamente a su cuarto y al comprobar que Louis no estaba dentro corrió rápidamente a dejar su bolso con ropa sucia, por estar cavando, en el fondo de su armario. Justo en ese momento entró un Louis cabizbajo al cuarto. El moreno cerró la puerta de su armario y lo miró.

Se asustó al verlo con los ojos completamente rojos y con lágrimas en sus mejillas. Rápidamente se acercó y le tomó el rostro entre sus manos.

-Dime quién fue y te juro que lo hago mierda Lou- Zayn se había vuelto bastante protector con el más bajo desde que había despertado y se había enterado toda la verdad. Quería cuidar del bebé de su otro mejor amigo.

-Y-yo ya se quien es el chico de m-is s-sueños- murmuraba sin dejar de llorar y cuando Zayn dejó caer sus manos, el castaño se sentó al borde de su cama.

Zayn había quedado completamente en blanco con lo que había dicho su mejor amigo. Louis había despertado, sabía toda la verdad finalmente. Iba a poder tener una ayuda para salir de este lugar lo más pronto posible. Podría haber saltado de felicidad por lo que había dicho Louis pero antes de él diga algo, el castaño hablo.

-Él mató a mi madre, Zee. Mi padre me contó todo, la mató delante mío- ¿Qué carajos acaba de decir su amigo? -Mi madre era buena con la gente de fuera del muro, con los salvajes. Un día salió a buscar gente que podría ayudar y la encontró este maldito y la mató.– Louis rompió a llorar nuevamente haciendo que Zayn reaccionara y lo abrazara contra su pecho.

Lo sabía, no había forma de ganarle a Mark. Sabía que ese hijo de puta voltearía todo a su maldito favor. Zayn quería romper toda la jodida habitación por culpa de la frustración que estaba sintiendo. Que tonto pensar que algún día iba a salir de acá.

Termino soltando varias lágrimas que se secó rápidamente y cuando miro hacía abajo vio que Louis se había dormido en su pecho, tiró de él hacía atrás, lo recostó sacando sus zapatos y tapando su cuerpo con sus sábanas. Con lentitud se acercó y dejó un beso en su frente llorando un poco más mientras se separaba del castaño.

Volvió a su armario y de su cajón sacó su caja secreta. Sabía que lo que haría sería un riesgo pero realmente ahora, ya todo le valía mierda.

De la caja sacó una perla, la cual pertenece a Louis. La había encontrado hace unos meses en la peluquería donde trabajaba, y la había guardado al no estar muy seguro de dársela a su amigo.

Esa perla representaba el pequeño casamiento que habían tenido Louis y Harry hace cuatro años en la casa del árbol de Zayn. Mark no sabía de la existencia de esa perla. Por lo tanto no habría tanto riesgo.
La guardo en una pequeña cajita brillante y sacando su ropa sucia cerró nuevamente su armario, dejó la caja junto a una nota en la mesita de noche de Louis y volvió a su lugar para seguir cavando, necesitaba descargarse y llorar. Necesitaba llorar muchísimo.
 
Cuando Harry se despertó el sol se estaba ocultando y tenía a su lado a Tessa que lo había sacudido levemente.

-Perdón pero, Lottie dice que vengas a comer algo y que si vas a dormir que sea en una cama- rodo levemente los ojos ante sus palabras, Lottie siempre lo trataba como si fuera su hijo.

-Gracias Tessa, ya voy- le sonrió antes de que la chica entrara en la cabaña. Miro nuevamente el cielo y se levantó estirándose, haciendo sonar sus huesos. No era buena idea dormir en el suelo.

Entró a la cabaña y le dejó un beso en el cabello a Lottie antes de sentarse a su lado para comer. En la mesa solo faltaban Gemma y Liam. El segundo nombrado apareció por las escaleras con los ojos hinchados y rojos.

Harry supo inmediatamente que había estado llorando.

Apartó una silla a su lado y golpeteo esta para que Liam se sentara, todos en la mesa seguían con sus conversaciones lo más felices sin darse cuenta que uno de ellos había caído nuevamente.

Una vez se sentó Harry lo miró y le susurró.

-¿Estas bien?

Liam negó y se abrazó rápidamente a su amigo rompiendo en un llanto desgarrador el cual hizo que todos en la mesa se callaran y lo observaran. Harry lo abrazó rápidamente acariciando su espalda y dejándole que le empape la camisa con las lágrimas.

-M-mañana cumplimos t-res añ-ños de novio con Zayn y lo necesito a mi lado- Liam no paro de llorar mientras murmuraba como podía las palabras. Harry les hizo una seña a los demás para que se acercaran y los rodearán en un abrazo.

Eso hicieron, sin rechistar y tratando de contener las lágrimas.

Siempre había días malos para alguno del grupo y entonces ahí estaban los demás dándoles el apoyo y la motivación que necesitaban. No tenían permitido caer todos juntos en el abismo de la tristeza, todos habían perdido a alguién pero si se derrumbaban todos juntos, nadie los iba a poder levantar de nuevo.

Luego de treinta minutos de llanto, Liam pudo calmarse y los demás se apartaron volviendo a sus lugares. Harry miró a Lottie que era la única que no había podido con sus lágrimas, desde el embarazo estaba mucho más sensible y si veía a alguién haciendo pucheros se largaba a llorar de inmediato.

El rizado tomo su mano y le dio un apretón aún sin solar a Liam, espero a que él se aparte. Cuando lo hizo se secó las mejillas y miró seriamente hacía Harry.

-Gemma me dijo que acababa de terminar un aparato para poder vigilar lo que hay dentro del muro, solo necesitamos en Alexandre lo programe- sonaba realmente desesperado y a Harry se le rompió el corazón.

Alexandre asintió y habló.

-Si quieren puedo hacerlo ahora, estaría listo para que salgan medianoche- miro a Harry esperando su asentimiento.

Harry no sabía por qué pero todo el mundo le pedía permiso para hacer las cosas importantes o no se llevaba a cabo ningún plan si él no lo autorizaba antes, lo habían tomado como una especie de líder del grupo y realmente lo ponía nerviosa la situación en la que estaba.

Asintió hacía Alexandre y éste se marchó hasta su "despacho" para poder empezar todo.
Segundos después Gemma entró sonriendo de oreja a oreja y se sentó en el lugar donde antes estaba Alexandre.

-Acabo de terminar el aparato que nos va a permitir ver que hay detrás de ese maldito muro- sonaba bastante emocionada pero Harry le bajó la emoción en un segundo.

-Ni te emociones tanto, por qué no vas a venir con nosotros.

Gemma casi se rompe el cuello para poder mirarlo.

-¡¿Qué?! ¡¿Cómo no me vas a dejar ir, idiota?! Fui yo la que estuvo día y noche sin dormir para poder crear esa mierda.

-No me interesa Gemma, no vas y punto. No quiero tener problemas como la última vez- La última vez Gemma había sido demasiado impulsiva y casi la matan, no podía permitir que eso volviera a pasar.

Su hermana se levantó furiosa tirando su silla en el proceso y lo apuntó con su dedo índice.

-TU NO ME DICES QUE HACER STYLES, SOY MAYOR Y ME PUEDO CUIDAR SOLA. ¡¿PENSAS QUE CON AMABILIDAD VAMOS A CONSEGUIR NUEVAMENTE A MAMÁ, A LOUSI?! PUES NO, YO SI QUIERO ESTAR DEVUELTA CON MI MADRE NO SE LO QUE TENGAS PLANEADO PERO NO LA QUIERO VER MUE…

-¡¡Ya basta!!- Todos se quedaron sorprendidos, Harry nunca había gritado, pero Gemma logró sacarlo de sus casillas -¡Es mi jodida madre también, Gemma! ¡Y TAMBIEN LA QUIERO CONMIGO, PERO NO SE COMO DECIRTE QUE LA VIOLENCIA NO ES LA SOLUCIÓN! Ya dije que no vas y el tema queda cerrado.

Gemma había empezado a llorar y Harry se acercó para poder atraerla a su pecho. Ella luchó y lo insultó diciéndole que se apartará, pero Harry hizo caso omiso a sus palabras y dejó que lo golpeé todo lo que quiera. No iba a soltarla.

Luego de varios minutos lo único que se escuchaban eran los sollozos de Gemma que había dejado de luchar contra su hermano y se había aferrado a él como si en cualquier momento le fueran a sacar a su hermanito menor. Harry la tenía bien aferrada a él también, eran lo único que tenían ambos y tenían que ser fuertes juntos.
La rubia se terminó apartando de su hermano y Harry le tomó las mejillas sacándole las lágrimas con sus pulgares.

-No quiero que te pase nada, te juro que voy a hacer todo lo que este en mis manos para traer a mamá sana y salva. Pero necesito que no estés en peligro tú también- Harry susurraba tratando de convencer a su hermana mayor de que se quedara.

Gemma suspiró y terminó asintiendo.