Capítulo 37

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Louis despertó en la mañana cuando perdió el calor del cuerpo de Harry, frunció el ceño y se quejó, haciendo un puchero abrió los ojos, viendo a su novio poniéndose la camisa de manera lenta mientras bostezaba.

-Amor- Harry lo miro y se acercó a dejar un beso sobre su frente – ¿Qué hora es?- Louis sonrió por la acción de su novio y se sentó en la cama frotando sus ojos con su puño.

-Awww, eres tan hermoso- el rizado tomo sus mejillas y lo lleno de besos mientras Louis soltaba pequeñas risas –Son las ocho, tenemos que ir a despertar a los demás y prepararnos- Harry cambio el tono al mencionar el plan y al castaño le recorrió un escalofrió.

-Bien, me cambio y vamos, desayunamos en la guarida con los demás- movió sus piernas hacia un costado de la cama y cuando se levantó el dolor en su espalda baja se hizo presente –Me cago en la puta- Harry lo miro preocupado y se mordió el labio.

-Lo siento, realmente fui muy duro en la madrugada- su novio tenia las mejillas rojas y a Louis le dio ternura la imagen, cojeando un poco se acercó a él y tomo su rostro entre sus manos.

-Y me encanta que lo hayas sido, me encanto lo que hiciste y era obvio que me iba a doler todo hoy, aun así yo te deje seguir y en ningún momento me negué a tu trato. Así no que no me pidas perdón, tendría que empezar a tener una silla de ruedas para el día siguiente cada vez que me quieras follar como un salvaje- Harry soltó una carcajada y lo beso.









Llegaron en silencio a la guarida encontrando a todo el mundo durmiendo, fueron despertando a todos con cuidado y cuando todos estuvieron bien despiertos comenzaron a desayunar. Louis estaba con Thomas en su regazo mientras desayunaba, se había apegado mucho más a su sobrino y le gustaba pasar tiempo conociendo a su hermana, también tenía mejor relación con los demás. No se sentía para nada incómodo con ellos y le gustaban las veces que se reían como si se conocieran de toda la vida.

Alexandre preparaba la trasmisión de video que se llevaría a cabo en menos de diez minutos mientras que los demás se alistaban para poder entrar en la sede con Luca y desde ahí al edificio.

-Bien, esto ya está, tendrían que irse-hablo Alexandre y Luca le asintió.

-Okey, no nos vamos a despedir porque nada va a salir mal y vamos a volver todos- Harry hablo firme y seguro, aunque no lo estuviera.

-¿Tienen todo lo que necesitan?- pregunto Zayn.

-Sí, esta todo en la camioneta que deje en la noche escondida en el bosque, según los informes de Mark, tengo que volver a la sede en unos minutos con tres solados más. Quiero que Shawn se ponga de copiloto, tienen los rostros de Liam y Harry grabados a fuego en la cabeza, no podemos arriesgarnos. Como solo miran a los dos que van adelante no vamos a tener problemas pero tenemos que irnos ya- Luca hablo y dejo un beso en la frente de su novia y su hijo. Camino hasta Alexandre y le hablo en el oído –Si me pasa algo, cuídamelos, pongo toda mi vida en tus manos. Ellos son mi vida- el rubio le asintió y estrecho su mano con la de Luca.

-Cuídense, por favor- Louis hablo asustado y Harry se apresuró en abrazarlo.

-Volvemos en un rato- murmuro el rizado sobre el cabello de su novio.

Todos se dieron un abrazo grupal, conteniendo las lágrimas o las ganas de rogarles a los chicos que se quedaran, que no era necesario pero, sabían que cualquier cosa que dijeran entraría por un oído y saldría por el otro.

Los chicos salieron rápidamente de la guarida y caminaron hasta la camioneta, una vez ahí suspiraron y Luca les paso una gorra a cada uno.

-No voy a poder ayudarlos a escapar, le doy las llaves de la camioneta a alguno de ustedes cuando lleguemos y en cuanto me recupere del desmayo voy a la guarida. Los quiero ver a todos, juro que si falta alguno me van a conocer muy enojado- Luca apretó sus puños en el volante y los demás asintieron.

In Another Life |LS|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora