Del odio al amor solo hay un paso. -Bueno eso dicen

Capítulo 11

NARRA CAMERON:

Me despierto por los rayos de sol de la ventana, cuando consigo abrirlos del todo, veo a Maria con su precioso cuerpo y sus ojos cerrados expresando paz, realmente no se que m está haciendo, me tiene complentamente loco. Me pongo de lado y la observo detenidamente. Cojo un mechón de su pelo y se lo pongo delicadamente detrás de la oreja, perfecta, relativamente es perfecta.

-¿Qué me estas haciendo Maria?.- digo en un susurro. 

Ella se está despertando, cuando ya abre definitivamente los ojos me topo con su azulada mirada, con ese brillo increíble, al verme sonríe, yo no puedo evitar sonreír y le sonrío, realmente a sido la mejor mañana de mi vida, he hecho el amor con la persona que estoy totalmente enamorado desde pequeño, pero esto no va a ser suficiente para conquistarla, ya que le he hecho bastante daño y le he metido bastante mierda por así decirlo. Quiero conquistarla, no quiero, lo necesito, pero tendré que pedir ayuda ya que nunca he hecho eso. 

Después de tanto pensar María y yo bajamos a hacer la comida.

-¿Que quieres que te haga para comer?

-¿Tú? ¿cocinar?.- dice ella riendo. 

-Pues sí yo sí se cocinar,venga, ¿que te cocino?

-Lo que tu quieras, sorprendeme, pero no me quemes la casa.- dice riendo aún.

-Tranquila,tranquila, tu pon la mesa y vete a ver la tele.

María ya ha puesto la mesa y se ha ido a ver la tele, aunque parezca extraño si se cocinar, cuando miro todo lo que tiene decido hacer ternera con una salsa deliciosa. A María le gusta la ternera muy echa, siempre le ha gustado así.

-¡Maria ven, ya está lista la comida!

Cuando viene se queda mirando la comida.

¡WOW! Tiene una pinta deliciosa. dice sentandose para comer.

Estubimos comiendo y estaba deliciosa, nos pusimos a ver pelis y reímos, no salimos para nada, María llamó a Matt para ver como iba con sus nervios por la cita con Carmen. 

NARRA MATT: 

 Estoy que puedo morir de los nervios, aún no sé que le voy a decir, paso por ella en una hora y seguro que no sabré que decirle y pensará que soy idiota. Decido vestirme para que se me pase la hora más rápido. Me ducho, decido ponerme unos pantalones negros, una camiseta roja y una chaquta amaricana, y por supuesto unas vans. Cuando me visto me voy a por Carmen, mientras voy a por ella los nervios vuelven y me comen por dentro. Llego a su puerta, tomo aire y llamo a la puerta. Escucho unos pasos ir hacia la puerta, y... la abre ella, estaba preciosa y eso que siempre esta preciosa, llevaba un vestido negro brillante con unos tacones y su pelo más planchado de lo habitual ya que ella tiene un pelo Divergente como dice ella. 

-¡WOW! Estas realmente preciosa.- digo mientras que ella se sonroja un gesto muy adorable por mi parte.

-Tu tambien estas muy guapo.- dice sonriendo y yo la sigo. 

-¿Nos vamos señorita?- le señalo mi brazo para que se agarra a él riendo y asintiendo. 

Llegamos al coche le abro la puerta y ella sin parar de sonreir, rodeo el coche y llego al asiento del piloto.

-Espera una momento, no creeras que que verás donde vamos, ¿verdad?.

-Pues.... si que lo pensaba.dije muy convencida.

Anda ponte esto.-digo entregandole una cinta para que se la pusiese en los ojos.

Estábamos llegando, y veo que Carmen se está desesperando porque no ve.

-Tranquila ya casi estamos.- digo y ella asiente ansiosa y ese gesto me parece adorable ya que parece una niña pequeña.

Llegamos al restaurante en la playa, baje y ayude a Carmen a bajar por la cinta, cuando estábamos frente a la mesa le quité la venda y se le ulimunaron los ojos, en verdad ese sitio era precioso, era una pequeña terraza de memoria encima de la arena con vistas a la playa, en resumen precioso. Me dirigí a la mesa y nos sentamos.

-Es-es-es precioso.- dice tartamudeando diciendome que está nerviosa y yo también.

-Esto no es lo único precioso que hay aquí.

Cenamos reímos, me empazaban a entrar nervios e intentaba que ella no lo notase, era ahora o nunca, pensé. 

Nos paramos en frente de la orilla, veía su rostro gracias por la poca luz de la luna.

-Bueno.. Carmen... yo....- digo rascándome la nuca, joder, parezco un estúpido.-desde hace tiempo, me he fijado en ti y... pues... me empezastes a gustar... así que... ¿te gustaría ser mi novia?- digo cogiéndole la mano esperando su respuesta.

-Matt... yo....-empieza a decir, parece que me va a decir que no y bajo la cabeza decepcionado.-¡Me encantaría ser tu novia!- le abrazo y le doy vueltas mienstras ella suelta grandes carcajadas, ¡oh díos mío! aún no me lo puedo creer, estoy saliendo con Carmen, soy tan feliz...

-Te quiero Carmen.

-Te quiero Matt.

Y nos besamos. 

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LO SIENTO MUCHO, HE TARDADO UN  MONTON PERO NO PODIA POR LOS EXAMENES Y ESO, BUENO ESPERO QUE OS GUSTE.

BESOS Y ABRAZOS MARÍA.