|Primer libro de la trilogía: El rompecabezas|
La confianza es tan difícil de conseguir. Es como plantar una pequeña semilla y esperar día tras día a que crezca un poco más. Pero a la vez es tan fácil de perder, como es de fácil arrancar una flor de...
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FINAL PARTE 1
Los padres de los chicos estaban teniendo un viaje lento y lleno de ansiedad, pero por suerte sin complicaciones. Para su fortuna el matrimonio Lambert se sabía el camino de memoria por lo cual no llegaron a perderse y eso les ahorraba demasiado tiempo, ya que cada minuto era muy valioso. No podían darse un tiempo para descansar o parar a comer algo, porqué en esos cortos minutos algo grave les podía estar pasando a sus hijos.
—Estamos cerca —le decía Miranda a Elaine. Ella no le prestó atención, tenía un gran dolor en el pecho que no podía siquiera expresar.
Toda esta situación era demasiado para ella. Se culpaba a si misma de todo lo que pudiera sucederle a Emily, ya que como su madre tenía el deber de protegerla, pero ¿cómo iba a saberlo? Ella solo envió a su hija a un viaje donde pasaría su último verano con sus amigos. No creyó que la estaría enviando al peligro.
La cabeza le dolía de tanto pensar en su hija, se preguntaba ¿cómo estará? ¿la habrán herido? ¿estará sola? ¿encerrada? No obtener respuestas la torturaba.
Mientras tanto su hija se encontraba teniendo un ataque de pánico. Después de la noticia de la muerte de Tyler, Emily comenzó a quedarse sin aire y sus amigos no sabían cómo contenerla, ya que ellos también estaban muy mal.
Alex la sostenía en sus brazos mientras madison buscaba algo que les ayudara, en la mochila de Ty.
—Respira, Em. Respira conmigo —le decía Alex, intentando aguantarse las lágrimas—. Cuenta hasta cinco y luego suelta el aire. Estarás bien, estamos contigo.
La castaña tardo varios minutos en reaccionar, y cuando finalmente lo hizo, se apartó de Alex y comenzó a caminar.
—¿A dónde vas? —le pregunta el chico mientras la sigue.
—Tengo que encontrarlo —contesta sin mirarlo. El castaño intenta detenerla, pero ella se zafa de él y comienza a correr.
Al cabo de unos minutos se topa con el charco de sangre que anteriormente los chicos vieron. Se guía por las huellas y avanza un poco más. Pero cuando a llega al lugar, ya no hay nada. Alex llega detrás de ella y mira hacia todos lados en busca del cuerpo de Tyler, pero no está. Se lo llevaron.
—Sus lentes —susurra Emily con la voz quebrada. Se acerca al objeto y lo toma con delicadeza. Cierra los ojos con fuerza al recordar a su novio—. ¿Por qué? ¿¡Por qué tenías que dejarme!? —le reclama a la nada. Se deja caer al suelo.
—Lo siento —le dice su amigo sentándose frente a ella—. Tenía que haber detenido todo su plan desde un principio —ella lo mira desconcertada—. Él no desapareció porqué quería, lo hizo para vigilar al asesino y así descubrir al cómplice —la chica lo mira sin decir nada—. Perdóname.