† Capítulo 28 †

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Maeve Andrews

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Maeve Andrews

Cuando llegué a mi habitación, cerré la puerta, di un suspiro y me recargue en ella.

Me pregunté ¿cómo es que lo había hecho otra vez?

Navegue en mis recuerdos.

Le había prometido a Minnette que no lo haría de nuevo, me sentía tan decepcionada al fallarle.

Toqué mi vestido de noche, ya no estaba empapado pero si húmedo, así que me cambié de pijama y me recosté en mi cama. No podía creer que seguía respirando, todo debido a él.

Él.

No conocía ese lado de Shaw, más que su lado frío y despiadado.

¿Él en realidad me había ayudado?

Seguía sin creerlo.

Alejé esos pensamientos de mí y decidí por esa noche dormir.

†††

Oí la campana sonar y abrí los ojos con dificultad, restregué uno de ellos, sentía mi cuerpo pesado, cada parte de mis músculos dolían, me levanté quedando sentada apoyando mis brazos en la cama e hice una pequeña mueca de dolor. Tenía días de descansos por lo tanto podía permanecer en mi celda todo el día. A excepción de mis citas psicólogas con la madre superiora Eleonor.

Pero me era aburrido el sólo persistir en esa habitación.

Me levanté, me di una ducha y me vestí.

Salí de mi celda y me dirigí al coro. Mientras bajaba las escaleras, pude escuchar las voces lejanas que provenían de allí, tenía tiempo, aún no comenzaban.

Divisé a Dalilah, se encontraba de espaldas hablando con Haydee y otras hermanas.

Todos se percataron de mí, en principal Dalilah al ver que Haydee dejó de hablar y me dio una mirada de indiferencia.

― ¿Maeve? ―Dalilah se aproximó a mí.― No deberías estar aquí.

― Lo sé,― bajé la mirada ―pero no quiero seguir perdurando en esa celda.

― Créeme que te echo de menos; pero no quiero ser egoísta, debes reposar.

― También te he extrañado― le sonreí levemente.

Sean y Stevie aparecieron minutos después.

Él no venía con ellos.

¿Dónde estaba? ¿Por qué no había asistido al coro?

― ¿Maeve?― giré mi cabeza nuevamente hacia Dalilah.

― Sólo... no quiero seguir sintiendo una inútil ― le informé dando un suspiro.

― Bien, lo que creas que es mejor― me obsequió una enorme sonrisa.

Después del coro, ayudé a la hermana Olivia en la cocina durante la mañana, por la tarde Dalilah me notificó que estaban haciendo la actividad de bordados y me pidió de mi colaboración que por supuesto acepté.

Secretos Oscuros en Isolated TownDonde viven las historias. Descúbrelo ahora