Cartas a Draco |Draco Malfoy|

La Batalla de Hogwarts

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Narra Alice: 

Mi cabeza seguía doliendo, al igual que mi pecho, mis sentimientos me hacian sentir que para Draco mi esfuerzo no valía ni una mierda-Mierda ¡Te odio!-grite a mi misma, me sentía estúpida, una inutil y ahora el amor de mi vida estaba lejos de mí. 

Comencé a correr al recordar a Nagini y a Lord Voldemort, todo se había convertido en un campo de batalla, Oliver Wood estaba en su escoba con demás chicos de los equipos de Quidditch, hechizos por todos lados y me la encontre, su asquerosa cara, su horrible olor. 

-Te dije que te mataría...-

-No, dije que tu morirás primero-Alecto levantó su varita y me lanzó un maleficio, lo logré esquivar-¡Imperio!-esta quedó totalmente a mi merced, se trataba de mover, la manejaba cual muñeco de papel. Estábamos cerca de unas escaleras, en la punta de estas deje a Alecto, me acerque a ella y dije suavemente en el oido-Espero nunca encuentres paz...-La deje caer quitándole su varita, las escaleras se movieron haciendo que cayera en picada al piso. 

Comencé a correr de nuevo, tenía que llegar con lord Voldemort, vi como pasaban el trío de oro corriendo entre todo el desastre, ataque a quien pude y comencé a seguirlos, sabía dónde se dirigen. Pase debajo de un gigante, corrí de las arañas, entre a un pasillo donde estaba el trío observando como Greyback comía a una chica llamada Lavender, Hermione le arrojó un hechizo haciéndolo salir disparado por el ventanal detrás de él. 

Seguí corriendo hasta lograr alcanzarlos, no puede morir Draco, no puede, no pude.

Los cuatro llegamos a la entrada principal de Hogwarts, donde toda la magia comienza... Los dementores se acercaban a atacar, eran miles, pero un gran patronus los hizo retroceder, Aberforth Dumbledore lo hizo. Los tres salieron corriendo de nuevo y enseguida comencé a ir de nuevo tras de ellos, Hermione se dio cuenta que iba tras ellos, lanzó un expelliarmus haciendo que cayera lejos hacia atrás. Perdí la noción de nuevo, veía todo de color rojo, estaba tan hundida en todo, en mi muerte. 

Me levanté como pude y seguí corriendo con dificultades, no está el señor oscuro... Era el trío de oro, con el profesor Snape en el suelo, tenía mordidas y el cuello cortado, este lloraba mientras hablaba con Harry... Hermione y Ron se dieron cuenta de mi presencia y solo me dieron paso a él. 

-Tomenlas... Por favor-Se refería a sus lágrimas, hermione le dio a Harry un pequeño frasco de vidrio y ahí metió las lágrimas-Llevenlas al pensadero, mirenme-Nos dijo-Tienes los ojos de tu madre-Observando a harry-Y tu, su cabello y astucia... Siempre fuiste mi favorita-Esas fueron sus últimas palabras de Severus Snape, el hombre que vivió enamorado de mi madre hasta su último día. 

De nuevo lo sentimos-Han peleado con valentía... pero en vano-Dijo mientras sostenía mi cabeza intentando no escucharlo-Yo no deseo esto, cada gota de sangre mágica derramada es una grave pérdida por lo tanto, le ordeno a mis fuerzas que se retiren, en su ausencia, dispongan de sus muertos con dignidad, Harry Potter... Y mi hija Alice Riddle, ahora me dirijo directamente a ustedes, esta noche permitieron que sus amigos murieran, no solo por Harry, en lugar de enfrentarse en persona, no hay una peor deshonra, encuéntrame en el bosque prohibido y hagan frente a su destino... Si no acceden a esto, matare hasta el último hombre, mujer y niño que trate de esconderte Harry Potter, y matare a todo conocido y querido que trate de alejarte de tu deber Alice-

Los cuatro nos dirigimos de nuevo a Hogwarts, sin decir nada, sin mirarnos, evitandonos una pelea. Todo estaba destruido, la entrada, los edificios, piedras por todos lados... Al entrar al Gran Comedor, o lo que sobraba de este podías ver a los heridos y a los muertos,  todos nos miraban a Harry y a mí, una gemela Patel falleció, Lupin y Tonks, fallecieron pero tomados de la mano. 

A lo lejos distinguió a los Weasley llorando y abrazándose, Ron se agacho frente a un cuerpo... Draco se puse frente a mí parando mi caminar, no quería que lo viera

-Draco suéltame-

-No te gustara-Decía sin dejarme pasar

-Mierda, Draco quítate-Dije empujandolo un poco, me acerque junto a los Weasley, George me abrazó con tanta fuerza, sentía mi corazón en la mano, mi respiración se agitaba, mis ojos se llenaron de lágrimas al ver a mi amado Fred sobre el piso con los ojos cerrados, su respiración estaba desaparecida, mi corazón se partió en mil y un pedazos, me tiré de rodillas esperando a que despertara y dijera una broma del como lucía o que me dijera que saldríamos, esperaba que me abrazara como siempre, que dijera que me amara, solté el llanto abrazandolo fuerte-Por favor, no me dejes... Fred, te amo, no te vayas-Sentía unos brazos en mis hombros tratando de separarme de él-¡No! El no puede estar muerto, Fred no me dejes, por favor no me dejes...-Mi llanto se hacía cada vez más fuerte.

George me separo y me abrazo fuerte, Molly y Arthur estaban destrozados, todos los Weasley estaban destrozados... Faltaba un gemelo, el amor de mi vida se fue para que yo estuviera con el amor para mi vida. 

-Lo siento Señor y Señora Weasley...-Por primera vez Draco se dirigía a ellos con respeto, este me saco de los brazos de George y me llevó con él para consolarme. Pero era inevitable, Draco bien sabía los mis sentimientos por Fred-Un muro le cayo encima, lo trate de sacar de allí, fue tarde... Lo siento Alice-

-Lo quisiste salvar... Draco, a Molly y Arthur les hablaste con respeto, nunca lo habías hecho, eres un gran chico Draco, no necesitas demostrarme nada a mí o a tus padres, eres la persona más rica en mente y alma-Le di un pequeño beso en la mejilla-Tengo que despedirme de Fred-Draco tomó mi mano y me acompaño de nuevo con los Weasley, seguían aún en llanto, estaban destrozados al igual que yo. 

-Lo siento querida-Me dijo molly abrazándome, me disculpe con ella mil veces, con todos... Cuando termine de hacerlo de nuevo me agache para ver por una última vez a Fred, con sus ojos cerrados y su piel pálida, sus pecas y su nariz, bese su frente, su fría y delicada frente y me marché de ahí. 

-Draco... Quedate aquí, no vuelvas a ese asqueroso lugar, te juro que volvere y viviremos juntos, estaremos juntos y nos largaremos de aquí, necesito hablar con Harry...-

Entre a la oficina de los directores, sabía que estaba ahí con las lágrimas de Snape.

-En verdad eres mi hermana...-

-Es un asco saber que bese a mi hermano, no tenía ni idea...-Le dije entrando-Lo siento... El en este momento sabe que estoy aquí contigo, sabe que estamos hablando-

-¿A qué se refería con que eres su hija?-

-Intente complacerlo, hacer las misiones a la perfección, intenté no defraudar a mis padres... Siempre me cuidaron, y para mí ellos siempre serán mis padres, pero, la noche que me fui, el me dió su apellido, me dió sus deberes, soy un monstruo como él-

-Ey-Dijo acercándose a mi-No eres un monstruo, yo se lo que es la familia... Aún que nunca tuve una como tú, ahora eres mi familia-

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Holaaaaa, ¿Cómo van?:')

Yo llore

Travesura realizada.