Seth
Con la mirada perdida en el techo, me levante y agarre cualquier camiseta. No era un tipo desordenado, pero me gustaba tener todo en orden. Suponía que era una costumbre. A papá no le gustaba que todo estuviera un desastre, así que me acostumbre a vivir de esa manera desde que era pequeño .Mirando mi celular me di cuenta que es temprano, solo faltaba cinco minutos para que diera las seis de la mañana.
Salí de la habitación y me dirigí a la cocina. Comencé a lavar los pocos trastos sucios que habían y hacer el desayuno.
Aunque era hombre, no podía simplemente ser un inútil que no hiciera nada y solo esperar a que una mujer hiciera las cosas que yo podía hacer. Tanto Elliot como yo para pensábamos de esa manera.
Además no podía hacerlo eso a mamá cuando ella llegaba cansada de su trabajo.
No me molestaba ayudarla, yo haría las cosas sencillas para ella.
Sin darme cuenta de la hora, mi hermano llegó entregandome las llaves de mi coche.
—Mamá subió directo a la habitación para ducharse. —aviso. Asentí dándole una señal para que se sentará mientras le servía el desayuno. —Gracias. Yo lávare después los platos sucios.
—Esta bien. —aunque no teníamos una regla sobre quien hacía cada cosa, sabíamos que hacer sin necesidad de decirla.
— ¿Te sucede algo? —preguntó de la nada. Lo mire sin entender. —Pareces un poco distraído.
—No te preocupes, estoy bien. —fue lo único que dije.
No quería hablar de esto con mi hermano, aunque quisiera compartirlo con alguien todo lo que sentía.
— ¿Te peleaste con Charlie? —lo mire con la ceja alzada y negué. —Bueno, si no es eso no entiendo. —rodé los ojos. Empezaría con sus teorías.
<<Si fuera por algo del boxeo tu solo entrenarias y entrenarias hasta el cansancio. —se encogió de hombros. —Entonces tiene algo que ver con Charllote. —me masaje la sien. Recordándome una y otra vez que era mi hermano y no podía golpearlo. —Ella es admirable, no te mando al infierno luego de que moliste a golpes a su hermano mayor. —se burló logrando que lance dagas con la mirada. —Y la familia de ella te acepta. Demonios hermano, tu tienes suerte...—sin poder soportar otra palabra de él salí dejándolo con la palabra en la boca. >>
Antes de irme de la cocina deje el desayuno de mamá servido.
—Buenos días mi niño. —saludo mamá cuando me la encontré bajando las escaleras. Me acerque a besar su mejilla.
—Buenos días madre. Tu desayuno está servido en la cocina junto a Elliot.
—Eres un niño tan bueno. —acaricio mi rostro. Bese su frente.
—Anda a comer antes de que se enfríe. —mamá solamente volvió a sonreír antes de dirigirse donde estaba mi hermano.
Camine hasta llegar a mi habitación y comenzar a envolver el regalo del papá de mi Lottie.
Hoy era su cumpleaños y todos estábamos invitados. Hasta mis amigos que poco a poco se fueron haciendo amigos de mi novia y de su hermano.
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Furia Black #1.5 Cristal Gris
RomanceCuando dos personas están destinadas a estar juntas ni la propia muerte es capaz de separarlas.