Seth
Termine de vestirme y le asegure de llevar todo. Pase por la cocina para despedirme de mamá, no la vería en la noche porque pensaba quedarme en el hospital.
—Ya me voy mamá. —bese su mejilla.
—Espera hijo, llevale esto a Charlie. —me detuvo para darme algunos repostero de comida casera. Sonreí agradecido.
—Gracias mamá, no tenías que molestarte —me gire abrazarla.
Antes me era imposible demostrar algún tipo de emociones o sentimientos. Ahora no podio ocultarlos.
—No es nada. —me miro a los ojos sonriendo calidamente. —Me gusta verte sonreír, verlos sonreír a ambos. Soy feliz.
—Yo también. —bese su frente y me despedí nuevamente. Agarre las llaves del coche y salí rumbo al hospital.
No le demore mucho y fui directo a su habitación. Desde afuera pude escuchar las risas de mis amigos.
—La hora de visita aún no comienza, que hacen todos ustedes aquí —dije interrumpiendo la conversación. Mi novia solo sonrió sacándole la lengua a Elliot.
—Pues te tenemos la noticia de que nos autorizaron venir a la hora que queramos. —respondió Máx con superioridad. —La hora de visita no tiene restricción para Charlie.
Alce mis cejas sin comprender. Cuando quise decir algo mi pequeña Lottie me llamó. Olvidándome del resto fui directo hacia ella. Bese sus labios suavemente y me coloque a lado de ella. La abrace enterrando mi cabeza en el hueco de su coello. Pude ver como su piel se erizo. Sonreí y le di un pequeño beso en esa zona.
—No harán cochinadas, que estoy presente. —compuso Drew. Me separe de ella un poco, mirándolo con cara de pocos amigos.
Detestaba que me apartaran de ella. Respirando hondo sin perder los estribos me ocupe de sacar la comida que mamá había mandado. Busque la mesita que estaba cerca de su cama. La ayude a sentarse para que de esa manera pudiera comer.
—Eso es mucha comida. Marie se paso cocino para un batallón —comento Travis mirando todo lo que había puesto en la mesita. —No creo que pueda comerse todo eso. —No le preste atención y servi un poco de juego que había en un termo.
—Yo tampoco lo creo. —le siguió Dylan. Me gire a encaramos y solamente me guiñaron los ojos. Imbéciles.
—Creo que Seth tendrá que ayudarte a comer Charlie. —añadió Noah.
Paciencia.
Pedía paciencia para no moler a golpes a mis amigos.
—Y no creo que hayas comida lgo antes de salir de casa. —dijo Elliot inocente. Lo fulmine con la mirada, estaba muy comunicativo.
—Es cierto amor, es mucho. —dijo finalmente mi novia. —Me ayudas ¿Sí? —me miró de una manera en que no podía negarle nada. No podía.
—Si, ayúdala —me miró. Blake observo a los demás con complicidad.
—Esta bien. —me rendí besando la frente de mi Lottie.
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Furia Black #1.5 Cristal Gris
RomanceCuando dos personas están destinadas a estar juntas ni la propia muerte es capaz de separarlas.