RADIO OBSESIÓN 2: LA OTRA CARA DE LA MONEDA

CAPITULO OSCURO

Llegó el tan esperado evento en el que pensé todo iba a salir a pedir de boca, pero no fue así, antes de llegar fui interceptado por el "maravilloso" alcalde de la ciudad el mismo me miró de manera despectiva yo realmente no tenía ni idea de que hacía allí.

-En años jamás me hubiese imaginado tener a mi más grande enemigo radial frente a mí-

Me sentí levemente en peligro, pero no había mucho que ese tipejo pudiere hacer en un lugar público.

-No sabía que los payasos del circo hacían presentaciones individuales, vete o le digo a tu capataz que te has escapado mono cirquero-

Le mencioné se acercó a mí de una manera amenazante, invadiendo por completo mi espacio personal, para acercarse a mi oído.

-Me asegurare de que me pagues cada una de esas palabras, yo que tu cuidaría esa boquita tuya-

Se alejó rápidamente de mí con una sonrisa triunfal, para luego caminar como siempre lo hacía de esa manera pomposa y altanera que siempre tuvo, por alguna razón no me dejo buena espina nada de lo que me había dicho, rápidamente comencé a entrevistar además de hacer alguna que otra pregunta a cada una de las figuras públicas que se presentaría el primer día, para mi mala suerte o buena Vox me divisó con la mirada, realmente no me sentía de ánimos ese día para la necedad de él con la idea de salir conmigo.

-Oh, Alastor que gusto encontrarte en un lugar como este-

Debía admitir que cierta parte de mi lo veía atractivo, pero realmente me sentía en un mar de emociones en ese momento además de que la ruptura con Husk aún me pesaba y dolía más al pensar en todo lo que habíamos pasado juntos, pero bueno supongo que no todo es para siempre, por lo que antes de divagar más en el asunto respondí solamente.

-Quisiera decir lo mismo, pero me temo que mi sentir es todo lo contrario-

Le mencioné realmente no deseaba pelear ese día, pero como siempre me hizo caso omiso, tomándome de la cintura llevándome a un pasillo vacío, no lo soportaba más estaba a punto de golpearlo, bueno si tuviere algo de fuerza, pero bueno aun así funcionaba atacar con palabras.

¿Puedes dejar de hacerte esto más difícil?, yo no aceptaré que me tomes como lo haces con los

demás-

Le dije mientras me cruzaba de brazos sintiéndome algo incómodo por esa mirada tan inquisitiva sobre mi persona, por un segundo me sentí desnudo frente a sus ojos, por lo que tuve que reprenderlo.

- ¿Podrías dejar de hacer eso?, no soy una pieza de carne que ponen en una carnicería, me siento

extraño cuando me miras así-

Le dije algo molesto e incómodo, por consecuente debí suponer me haría esa pregunta que aún me dolía afirmar.

-Por cierto, ¿vino el peludo de tu novio o te dejo solito y a tu suerte? –

Me dio un golpe bajo ya que mi ruptura aún me tenía desanimado por lo que solo pude fruncir el ceño levemente.

-Ya no tengo pareja, no le gusto no poder controlarme así que me terminó porque pensó que lo

que quería era coquetear con cualquiera, generalmente no me molesta que sea celoso, pero no

me gusta que sus celos interfieran en mi labor. -

Sentí nuevamente como se apegaba con su cuerpo al mío, realmente a veces me resultaba algo extasiante el tenerlo tan cerca de mí el cómo su calor a veces podía tornarse completamente mío y como podía hacerme disvariar solo con el aroma suave de su colonia, pero aun con ello debía mostrarle que no estaba dispuesto a ese tipo de muestras de parte de él