Lovely ⵌ KookMin

Chapter Four.

Literalmente, no sabía qué hacer.

¿En qué pensó cuando dijo que cuidaría a un híbrido por una noche?

Claro, lo hizo porque pensó que sería fácil.

¿Y si no lo era?

Pasaron por lo menos once minutos en los que estaba parado mientras miraba al híbrido sin hacer nada.

Creyó que estaría buscando dónde esconderse o escapar, y quizás también haciéndose preguntas.

Aunque agradeció en sus adentros, ya que no se movía de su sitio y no sabía si tenía miedo o esperaba a que él hablara.

- ¿Quieres bañarte? ¿Comer? ¿Cambiarte de ropa? Puedes decirme lo que necesites y yo te lo daré.

El híbrido no respondió, se quedó en silencio y solo se dedicó a observarlo.

Había un detalle que Jungkook aún no sabía.

Ya pronto se lo haría saber.

- Si te traje a mi casa es por que quiero ayudarte por esta noche y te sientas cómodo, ¿Es mucho pedir que me respondas?

El pecho del rubio empezó a arder.

No sabía mucho sobre estas cosas pero, ¿Jungkook se ha enojado?

No lo sabía, ni tampoco quería saberlo.

Tampoco sabía por qué sentía ese pequeño dolor, acaba de conocerlo y no tenía confianza con el chico bonito.

Agachó su cabeza mostrando arrepentimiento.

Siempre lo hacía cuando estaba en su forma animal gatuna cuando robaba la comida de algunas personas, ellas se enojaban haciendo que lo traten mal y a veces recibía un golpe de zapato o una pisada en su colita.

En ese momento tenía hambre y no comía hace días, no lo podían culpar.

Jungkook suspiro intentando calmarse.

No le gustaba cuando no le miraban directamente a los ojos cuando hablaban, por que sentía que si no lo hacían le estaban mintiendo.

Ese no era el caso, pero ya era una costumbre.

Sacó ropa del armario, una camiseta color blanca y unos shorts crema que no sean de su talla y que ya lo haya usado hace tiempo atrás, tiró las prendas a la cama y volvió a acercarse al híbrido quién seguía con la cabeza agachada.

- Primero te das un baño y después te cambias por esa ropa ¿Harás eso?

El híbrido siguió sin responder.

Suficiente.

Jungkook se arrodilló frente a él y con una de sus manos levantó su cabeza desde su barbilla, así podría mirarlo a los ojos.

- ¿Sucede algo?

-Yo...

- Oh, así que puedes hablar.

Detuvo sus palabras en cuánto escuchó al contrario hablarle.

- Lo siento, puedes decirlo sin problemas.

- N-no sé hacer eso.

- ¿Que cosa?

- Lo q-que acabas de d-decir.

- ¿Bañarte y cambiarte?

- S-si, no sé hacer eso.

De acuerdo, eso sí sería un problema.

Lo entendía, de alguna manera lo hacía, el pequeño habrá vivido por mucho tiempo en la calle que quizás por esa razón no sabe hacer algunas cosas.